Deku

Todo por "la reina"

Si Shinso lo pensaba bien, sabía que con suerte era un alfil para Deku, útil pero no irreemplazable. Era una herramienta fundamental y un guerrero capaz, pero era sacrificable... Si realmente reflexionaba en ello, sabía que en su tablero propio Deku era el rey, incluso por encima del mismo Sensei... Pero eso era solo en su propio esquema. 

Porque Shinso sabía que el pecoso de profundos ojos verdes oscuros para con todos menos ellos, era, en realidad, dentro del gran esquema de las cosas, una reina. La única reina en el tablero; Deku era el heredero de Sensei, su pupilo más preciado, si obviamos el favoritismo desvergonzado del mayor hacia su amigo. 

Deku era prácticamente irreemplazable y si alguna vez tuviera que ser sacrificado sería únicamente después de que ellos mismos, como los más fieles seguidores del pecoso, cayeran primero. 

Por Deku era el todo o nada. Todo por la reina... Ese era el lema silencioso del controlador de mentes. No es que nunca se lo admitiera a alguien. 

Ahora no creas que Shinso está desesperado por morir. Oh, no, pese a toda la mierda que ha experimentado en su vida, no está ni por asomo cansado de existir y vivir. De realmente hacer algo con su vida ahora que encontró a las personas adecuadas... Ahora que encontró un camino y a un rey. 

Shinso era leal, seguía a Sensei y le era fiel, pero solamente porque este era en extremo respetado por aquel al que había jurado en silencio su eterna lealtad. Deku era su líder, sus filosofías su mayor creencia y sus palabras los sermones constructivos que le hacían reflexionar.

Sus palabras eran órdenes que estaba más que feliz de tomar. 

Shinso en un resumen comparativo era el Deku de su Sensei, es decir el más leal y quien mejor le entendía, alguien que seguía su filosofía, pero no tendría problemas en hacerle frente en algunas cosas, era su mejor amigo, su mano derecha y todo lo que este necesitará de él. 

Con la llegada de Shoto a su grupo, Shinso fue aún más consciente de su lugar bajo el mando del pecoso... Había visto los ojos y caricias que el par se regalaban casi de forma inconsciente. Su rey había encontrado interés en el nuevo alfil, un interés que él jamás habría esperado despertar... 

Pero este desarrollo llevó a la reevaluación del tablero general y a su vez de su propio puesto en este. Porque él era un alfil incluso para Sensei, esto gracias a su relación tan devota para con Deku, pero Shoto también cabía en ese puesto y a la larga era cuestión de quién era más fácilmente sacrificable y quien no... Y Shinso era dolorosamente consciente de que si se comparaban en poder y capacidad bruta de potencia no había manera de que él le ganara a Todoroki Shoto. 

Aún más, fuera de sus poderosas particularidades, tenía el poder y la influencia de su familia y todos los sucios secretos de una figura sumamente importante como lo era Endeavor... Shinso no tenía nada de eso y en realidad nunca antes le había parecido necesario tener algo así, porque su único propósito era ser útil para su amigo. 

Una parte inconsciente de él anhelaba la valoración y el reconocimiento que siempre se le habían negado por ser quien era. 

Ahora algo nuevo, una ansiedad cruda y repugnante crecía dentro de él. No era miedo en sí mismo, ni rechazo hacia algo, pero era una sensación extraña y molesta que se acumulaba en la boca de su estómago. 

Debería odiarlo, no pudo evitar pensar... 

Pero no podía odiarlo, él era un niño tan bueno, tan roto y dolorosamente inocente, hasta el punto de hacerlo sentirse culpable por empujarlo a este camino cubierto de sangre... Shoto era un ser dulce y que despertaba el deseo en los demás de protegerlo, así como Deku despertaba el deseo de seguirle y caminar por el camino que creará, Shoto invitaba de forma inconsciente a cuidarlo debido a lo atrofiado que estaba emocionalmente y socialmente.