PAJARILLO (OMEGAVERSE) COMPLETA

CAPITULO 9 CELO

-No te dejare hacerlo- dijo con pánico la mayor.
-No puedes ir conmigo, acompañándome como si fuera un chiquillo- la miro retándola.
-Sé que no eres un chiquillo, pero la situación lo amerita, que no te deje solo- dijo desesperada.
-Martjha, sé que te preocupas, pero también sé que sabes que mi Alfa no me hará ningún daño- le dijo sin ceder- además no estaré solo, Prem estará conmigo- torció la boca.
Su hermana bufo mas molesta.
-Ya te expliqué por qué Prem sigue siendo tu guardaespaldas.
-Trato de entenderlo, sientes que soy mas vulnerable que antes, ya que no soy el Fluke que conoces,-la miro a los ojos, y se arrepintió de ser tan cabezota, el dolor se veía en sus ojos, ella solo trataba de protegerlo.- Y soy diferente- le dijo mas calmado, lleno de culpa- pero como ya te dije, Prem estará ahí, es como mi sombra desde que lo contrataste, además el señor Thitiwat no me hará daño- se acerco a ella y tomo sus manos. –Comprendo lo que haces, aunque no parezca- siguió- soy terco, y mucho- eso hizo sonreír a la mas alta- pero comprendo la situación- le aseguro- aun es algo difícil para mi adecuarme a la nueva situación, pero la entiendo.
-¿Estás seguro?- cuestiono preocupada.
-Lo estoy, no es como si fuera a la guerra- apretó su agarre- no quiero morir y se que tu tampoco quieres que lo haga, por eso me esforzaré en encajar.
-No quiero que te obligues en hacer algo que no quieres- dijo la castaña.
-Lo tengo que hacer, nadie pidió esto, pero así son las cosas- se encogió de hombros- además investigue a Ohm, y es un buen hombre Alfa- le confeso.
-Lo es- lo atrajo hacia si abrazándolo con fuerza.
-Todo estará bien- también la abrazo-  es solo una cena, estaré aquí en un par de horas como mucho.
-Cualquier cosa me llamas, o se lo dices a Prem, por favor.
-Lo hare, no te preocupes, llegare antes que digas Harry Potter.
-Tendré que hablar con Boun seriamente.
El menor se rio, y se separó de ella.
-El me agrada, es divertido y un buen amigo, tienes buenos gustos.
-Oh cállate- contesto Martjha con una sonrisa- suerte- le beso la mejilla.
-Gracias.
Llegaron al hotel Ritz, su restaurante era de los mas famosos de la ciudad, Prem se bajó primero, mientras el chofer le abría la puerta.
-Vamos- dijo a su sombra.
Los nervios se lo comían por dentro, pero sabía que no pasaría nada malo, si algo había aprendido de la lectura sobre las almas gemelas, era que su pareja destinada no podría hacerle daño, al contrario, lo protegería con su vida, así que todo iría bien.
-Bienvenidos- les dijo un joven rubio y atractivo, un Omega, supo identificar Fluke, ya estaba empezando a reconocer a los géneros, al menos Omegas y Alfas, sus características físicas eran mas destacables que el de los Betas, y eso no le hacía sentir mas tranquilo.
Los Alfas eran mas altos que los demás, mientras los otros dos géneros eran mas bajos, también los Alfas eran muy imponentes y con aura de poder a su alrededor, también algo que lo había sorprendido era que los Omegas como el, tenían rasgos delicados, así que había corrido para mirarse en el espejo, se había quedado varios segundos mirándose críticamente, no lo había notado antes, pero su piel parecía mas blanca y tersa, ¿tenía las pestañas mas largas?, dios solo se estaba sugestionando.
En pocos segundos vería a Ohm, tenía el estómago hecho nudo, y no solo porque su Alfa fuera su destinado, si no por el apasionado beso que habían compartido, y no solo eso, se había besado con un hombre, por primera vez en su vida, y le había gustado mucho.
-El señor Ohm Thitiwat está esperando al joven Natouch- le dijo el pelinegro al Omega.
-Síganme por aquí- les dijo el chico antes de recorrer con una mirada de envidia al castaño, era un Omega como ,l pero con mejor suerte, tenía guardaespaldas y se vería con uno de los Alfas mas codiciados.
Caminaron muy rápido, según el piense de Fluke.
-Señor Thitiwat, llego el joven Natouch- anuncio al rubio al pelinegro sentado en la mesa frente a ellos.
El llamado levanto su mirada de su celular.
-Gracias Joel- le sonrió a este.
Este le sonrió coqueto y se alejó.
-Siéntate por favor- pidió el pelinegro mayor.
Lo que no decían los medios masivos era que, Ohm era un pica flor. Se sentó frente a el.
-Gracias por aceptar verme- le dijo Ohm a su Omega.
-Si- siseo Fluke sintiéndose molesto y sin querer mirarlo, ¿Por qué sentía de esa manera?.
-Martjha no estaba muy segura de la situación, incluso tomando en cuenta que es algo que no se puede evitar.
-Eso me dijo- miraba el mantel con gran profundidad.
-¿Cómo fue tu día?- pregunto con mirada profunda, su Omega no levanto la mirada en ningún momento.
-Bien- apretó los labios.
-Fluke, quiero que me mires, eso de hablar contigo mientras te enfocas en el mantel, es de mala educación.
Silencio. Ohm estaba tenso, no esperaba eso en su primera cita.
-Si no me miras, ¿Cómo vamos a conocernos?- miro hacia la entrada del restaurante, y ahí estaba el pelinegro que había llevado a Fluke, un guardaespaldas.
-No quiero conocerte- soltó antes de pensar en lo que decía.
-Martjha me dijo que no eres un Omega común, que eras especial.
-Y no te imaginas cuanto- apretó sus manos bajo el mantel.
-Aquí tiene su vino de siempre- dijo el rubio de antes.
El castaño rio burlonamente sin poder evitarlo.
-Gracias- le dijo el pelinegro ignorando la risa burlona del otro.
-Eres un casanova- siseo levantando la mirada- mi hermana creía que era alguien de fiar pero está equivocada.- algo hizo clic al cruzar miradas.
-Ese es un término arcaico- respondió- y mal empleado en mi persona.
-No lo creo- jadeo Fluke sintiendo mucho calor, sentía como su rostro se arrebolaba de repente- eres un Alfa al final de cuentas.
-Ser un Alfa no me hace ser mala persona- le dijo sin dejar de mirarlo- no sé por qué piensas eso si tu hermana también es un Alfa.- olfateo un dulce olor a menta con chocolate.
-Yo- jadeo- yo no lo sé- su mirada se había vuelto cristalina y sus mejillas estaban arreboladas.
Fluke estaba en celo, reconoció el mayor, se levantó de inmediato, buscando con la mirada al guardaespaldas, este era un Beta.
Prem vio que el señor Thitiwat se levantaba y lo miraba con algo parecido al terror, corrió hasta ellos, de inmediato el olor a chocolate con menta le golpeo la nariz.
-Joven Natouch venga conmigo- dijo Prem tomándolo del brazo.
-Está en celo- informo inútilmente Ohm al guardaespaldas, todos lo que estaban cerca ya habian detectado el olor de su Omega.
-¿Qué me pasa?- articulo con dificultad el mas bajo agarrándose fuertemente a Prem.
-Debo llevarlo con su hermana- le dijo viendo que muchos Alfas del lugar los miraban.
Ohm sintió como su animal rugía, él era suyo, solo suyo, tenía que marcarlo.
-Sácalo de aquí- rugio con su voz de Alfa al Beta.
-Vamos, venga conmigo- empezó a arrástralo.
-No se siento bien.
-Pronto se sentirá bien- lo subió a la limosina.
A Ohm le habría encantado llevarlo hasta su casa, pero si hacia eso, no se hubiera podido contener, lo haría suyo y lo marcaria, se dejó caer de nuevo en su silla, mientras se dejaba envolver por el aroma que seguía en el ambiente.
Llegaron y la señorita Natouch los estaba esperando. 
-¿Por qué tan pronto?- se acercó- ¿Le pasa algo a Fluke?-pregunto preocupada.
-El está en celo- informo el hombre sacando a un desmayado Fluke del auto.
-Por Dios, Samantha, Boston- grito a los mayores-Llévalo a su cuarto- ordeno al guardaespaldas en tono desesperado.
Entre los cuatro llevaron con dificultad al Omega en celo.
¿Qué fue lo que paso?- cuestiono al hombre en uno de los salones de la planta baja.
-No lo sé señorita- respondió- su hermano estaba sentado frente al señor Thitiwat, y de repente sentí algo extraño y cuando levante la mirada, este se había levantado y me miraba intensamente, supe que algo no estaba bien, y cuando llegue con ellos, el olor inundo mis fosas nasales, y entendí que su hermano estaba en celo.
-¿Solo eso?, ¿Ohm no lo forzó a nada?
-Bueno estábamos en un lugar público, pero su hermano no levanto la mirada para nada.
-¿Eso es todo?
-El joven Fluke se veía molesto e incómodo- contesto
-Gracias por traerlo a salvo. Puedes irte.
-Señorita- le dijo no muy seguro- si soy sincero con usted, sé que el joven Fluke no esta muy cómodo con mi presencia- le confeso sorprendiéndola- soy muy bueno leyendo a las personas, por eso decidí hacerme guardaespaldas, es un rasgo muy bueno para este trabajo. No sé si lo que yo le diga tenga algo que ver con el celo de su hermano, ya que me imagino que toma sus supresores.
-Así es, él dice que son como su vitamina, que si no los ve de esa manera, se le olvidaría tomarlos. ¿Pero qué tiene que ver eso con el celo de Fluke?
-Que al menos que mi instinto me falle, lo que causo el celo repentino de su hermano, fueron los celos.
-¿Los celos?- cuestiono mirándolo con el ceño fruncido.
-Cuando llegamos al restaurante nos recibió un Omega joven y atractivo.
-Eso no es nuevo- lo interrumpió, los Omegas solían ser hermosos, y llamaban la atención a su paso.
-Lo sé- le respondió- pero al parecer ese Omega era muy cercano al señor Thitiwat.
-¿Cómo de cercanos?- cuestiono empezándose a sentir molesta.
-No se lo podría decir señorita, no tengo ese grado de instinto- pero por lo que yo supongo, el señor Thitiwat es asiduo en ese lugar, y el Omega era muy coqueto, ya sabe con esas sonrisas sugerentes mientras hablaba con este, frente a su hermano.
-¿Me estás diciendo que Fluke se puso celoso de este Omega y Ohm?
-Si- respondió muy seguro- no paso nada, el señor Thitiwat le sonrió al chico, solo con agradecimiento cuando llevo a su hermano hasta el, eso fue todo.
-Pero Fluke vio a este chico como su competencia- dijo bajito la castaña comprendiendo todo.
-Así es, cuando hablamos de las parejas destinadas, sabe que se vuelven muy posesivos, y su hermano aunque no lo diga, ve a el señor Thitiwath como su pareja, y que otro Omega venga y le coquetee, lo molesto.
-Gracias por ser sincero, ¿es todo lo que tienes que decirme?
-Si señorita.
-Entonces, puedes retirarte- le sonrió- ve a descansar, tomate un par de dias.
-Gracias señorita, buenas noches- se despidió y salió.
Cuando el Beta salió de la mansión, ella fue hacia su oficina, podía estar tranquila la recamara de su hermano era hermética, especial para cuando tenía el celo, así el olor no se propagaría por toda la casa. Para Fluke la sensación del celo tuvo que ser muy intensa, tanto que se desmayó, más tarde Samantha subiría a ver como estaba, ella como Beta al igual que muchos en la mansión podían oler el estado de su hermano sin ser afectado, ella era la única Alfa. No podían hacer nada, el celo no se podía detener cuando ya había empezado.
Prendió su laptop, no creía poder dormir esa noche, parecía tranquila, pero todo revoloteaba a su alrededor. De hecho si se ponía a pensar, Fluke debería de haber tenido el celo cuando el despertó en el hospital, pero eso no paso, ella no le tomo importancia, estaba demasiado ocupada por el menor. Y cuando pensó en ellos, lo adjudico a que Fluke ya no era el mismo de antes, y no volvió a pensar en eso.
Sabía que no siempre el celo llegaba cuando debía, sino que este, también se presentaba cuando algún sentimiento sobrepasaba al Omega u Alfa. Estaba sorprendida de que Fluke no hubiera entrado en este estado cuando conoció a Ohm, pero si lo había hecho con unos celos infundados y falsos.
Fluke no admitía estar emparejado con su destinado, solo era un chico fuerte que enfrentaba su destino con ímpetu y valor, estaba muy orgullosa de el, pero su parte Omega salió a flote cuando nadie lo espero, celos, sonrió abriendo el email, Fluke había sentido celos de un Omega que solo había sido amable y coqueto con su Alfa, tal vez no sería tan complicado que Fluke aceptara a Ohm.
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El celo fue lo más difícil que paso Fluke en toda su vida, nunca creyó que su cuerpo fuera tan lujurioso, trato de aliviar el calor lo mejor que pudo. Se había masturbado mas que en toda su vida, incluso se había dado placer por su parte trasera, nunca lo había hecho, y no había aliviado su deseo, deseo de su Alfa, ¿Por qué en todas las ocasiones que se había tocado, había pensado en el?.
No sabía cuánto tiempo había pasado, pero por lo poco que leyó sobre el tema, tenían que haber sido tres días.  Los síntomas no hacían justicia al texto que había investigado sobre los Omegas. Sentía lastima por todos los Omegas, pasar por eso cada tres meses, era pero que el periodo de las mujeres cada mes en su mundo, ellas no se dejaban llevar por la lujuria, ese era lo que el había pasado todo ese tiempo, lujuria por un hombre que no conocía, por un hombre.
Bajo las piernas lentamente, su cuerpo dolía, tenía varias marcas en este, que el mismo se había hecho, estrujando y mordiendo lo que tenía a su alcance. Puso los pies sobre el suelo, espiro profundo y apoyándose en el colchón se levantó lentamente, hizo una mueca de dolor, lo soporto, se lo merecía por ser tan lascivo.
Tomo una larga ducha, su estómago rugía de hambre, no recordaba cuando fue la última vez que comió algo. Samantha lo había ido a ver algunas veces, no recordaba mucho ciertamente, comió y bebió algo, pero no estaba muy seguro, el celo era como estar drogado, horrible en pocas palabras, aunque el nunca se había drogado, cuando era nuño se había queblado el brazo en la pista, y lo habían dopado.
Con paso lento y tembloroso se dirigió hacia el baño de su cuarto, le urgía una ducha. Cuando se sintió algo cómodo quito las sabanas y cobijas de la cama arrugada y apestosa, las llevo con asco hacia el bote de ropa sucia, tomo ropa de cama limpia e hizo su cama como si nada hubiera pasado. Miro las puertas de cristal que daban hacia la terraza, el sol se estaba ocultando, ya casi era de noche.
Se armó de valor y se decidió a salir de esas cuatro paredes. Bajo las escaleras con paso rígido, sabía que todos sabían lo que le había pasado, eso lo mortificaba y molestaba de igual manera, pero no podía seguirse escondiendo, su hermana debía de estar esperándolo.
-Buenas noches- saludo al ver a Martjha.
-Me alegro que bajaras- le sonrió la castaña.
-Nuestro Omega favorito- dijo una voz masculina.
-Boun- exclamo feliz el pequeño- ¿Qué haces aquí?- cuestiono mirando al Alfa.
-Llegando si ser invitado- respondió con una gran sonrisa.
-No digas eso, es bueno tenerte aquí- se sentó a su lado- ¿Cómo te fue en tu viaje?
-Maso menos, ya sabes, juntarte con la familia que no frecuentas, es difícil.- se encogió de hombros.
-Realmente no lo sé, solo tengo a Martjha.- miro de reojo a la mencionada- aunque Boston y Samantha también son como de la familia.
-¿Y estabas preocupado por el?- pregunto sarcástico a su amiga.
-Calla- ordeno la mujer- son grandes amigos, pero la cena esta servida- informo viendo a Boston llevar una bandeja con la cena.
Al parecer los tres llegaron a un acuerdo silencioso, así que solo disfrutaron de los alimentos, y charlaron amenamente.
-Martjha, he conocido al guardaespaldas de Fluke.
-Sí, él estuvo llamando para saber sobre es estado de mi hermano, y cuando el estuvo bien vino de inmediato- le conto.
El castaño hacía rato que se había retirado a sus aposentos.
-¿Pero por qué me hablas de el?- cuestiono tomado de su copa.
-Me gusta- dijo raja tabla.
-¿Te gusta?- cuestiono burlona.-¿no te gustan todos los Omegas y Betas?
-Buen punto- se rio el rubio- sé que soy un caso difícil, pero soy un Alfa.
-No es escusa nuestro género.- dijo muy segura.
-Yo no tengo la culpa de que tu no disfrutes de la ventaja de nuestro granero. Pero esto es diferente, el es diferente.
-No te metas con mi guardaespaldas.- dijo seria.
-Yo sentí ese clic, con nadie lo había sentido.
-Agradezco que no lo sintieras con mi hermano.
-No bromeo, él es diferente- la miro.
-Puedes hacer lo que te plazca, siempre y cuando no entorpezcas su trabajo.
-Así que ya no soy un peligro para Fluke.
-Ni para mi hermano, y eso lo agradezco, pero no voy a permitir que le hagas mas difícil las cosas a ninguno de los dos.
-No lo hare, Fluke es como mie hermano al igual que tú, y con Prem, tomare las cosas despacio.
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Estaba frente al edificio, por fin vería frente a frente a su hermana. Camino con paso firme hacia la entrada del lugar, miro a su amigo y empezaron a caminar.
Kao llamo a la puerta, después de unos segundos esta fue abierta.
-Señora Bieri, gracias por recibirnos- le dijo Ohm a la mujer.
-Bienvenidos- les dijo dándoles el pase.
Los hombres entraron el en lugar, Ohm no pudo evitar mirar a su alrededor, el lugar era humilde.
-Por favor tomen asiento - invito nerviosa sin separar la mirada del hermano de su hija.
-Gracias por recibirnos, pero ¿Dónde esta Yiwa?- pregunto.
-Ella esta en clases, pero no tarda en llegar.
-Su casa es acogedora- dijo Kao.
Ohm dejo que su amigo llevara la plática mientras el esperaba tenso.
-¿Mamá?- dijo una von dubitativa.
Los tres se quedaron tensos al escucharla.
-Hija- se levantó desde la sala, esta estaba separada de le entrada.
-¿El ya esta aquí?- cuestiono nerviosa viéndola aparecerer frente a ella.
-Saluda al señor Kao Nine, y a el señor Ohm Thitiwat.- la llevo mas adentro.
-Un placer conocerlos- les dijo tomado asiento frente a los Alfas.
-¿Lo sabes?- dijo su hermano.
-Lo sé- reconoció sin bajar su mirada.- tu eres mi hermano.
Ohm suspiro aliviado.
-Eso está bien. – le sonrió- ¿Me quieres conocer?
-No estoy muy segura, pero eres mi hermano.- reconoció.
-Lo soy, te busque por varios meses- dijo sin dejar de verla, era su hermana.
-Eso escuche, de mi madre- miro a la pelinegra y después a el.
-Me gustaría ser parte de tu vida.
-Lo entiendo, pero te pido tiempo.
-Está bien- respondió- gracias señora Bieri por recibirnos- se levantó y lo igualo su amigo- Yiwa, gracias a ti también.
Ambas mujeres sonrieron en despedida.
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Fluke abrió de golpe los ojos, lo que había soñado no era falso, Ohm Thitiwat, era su Alfa, y todos lo sabían, el había tenido el celo, habían pasado cuatro días desde eso y se sentía igualmente avergonzado, odiaba ser un Omega.
No entendía la situación, se levantó y fue a la ducha. Boun se había presentado en la cena, el le agradaba, era divertido, se sentía cómodo, un Alfa divertido. No se sentía incómodo, era bueno tener a alguien mas que su hermana y los Glenn en su nueva vida, aunque eso no era sufriente,  nadie de ellos entendía su miedo.