Virgen a los 27 || Toji Fushiguro (+18)

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Pov Neith

No entendía absolutamente nada de lo que estaba pasando en este momento, no podía entender que era lo que estaba mal conmigo para que llegaran ciertas personas a mi hogar y hacer todo un desastre en cuestión de segundos.

Abrí mis ojos de golpe, al darme cuenta que todavía seguía tendida en el piso. Observe toda la habitación y era un desastre, ya que todas mis pertenencias estaban tiradas por todo el piso. Un pequeño charco de sangre se visualizó frente a mis ojos.

Me levante con cuidado y sin ponerme nerviosa, lleve mi mano hacia mi cabeza, para luego retirarla y verificar si tenía sangre. Y era cierto.

La palma de mi mano estaba cubierta por sangre, por culpa de el impacto que recibí en la pared. Todavía me sentía un poco mareada de aquel golpe que había recibido.

Lentamente me fui levantando del piso para sentarme con cuidado en mi cama.

Lleve la mirada hacia el reloj de mi mesita para ver cuantas horas habían pasado desde que me desmayé.

7:30 am.

Me sorprendí. Entonces estuve inconsciente 4 horas y media. Todavía no podía asimilar lo que había ocurrido.

Con una mueca de dolor, me levanto de ahí y voy a la ducha para poder quitar todo rastro de sangre que había en mi cuerpo y mi ropa.

No supe cuantas horas estuve bajo la lluvia artificial, que no me di cuenta que ya estaba llorando en silencio en mi baño. El dolor era insoportable, mi cara también había sido golpeada, podía sentir el calor en ciertos puntos específicos en donde podía percibir en donde se ubicaban cada uno de los golpes.

Después de salir de la ducha, me había cambiado y recogido todo lo que habían ocasionado estas personas en mi departamento. Ya que también desgraciadamente en la sala principal también habían roto varias cosas.

Termine de recoger todo para luego ir a mi habitación otra vez, y poder sacar un poco de maquillaje de mi tocador, para así cubrir todos los hematomas que tenía en mi rostro hinchado. No quería que Toji me viera en este estado. No quiero que el se involucre en lo que me ocurrió esta madrugada.

Tenía miedo. De que algo me ocurriera o le pasara a él. No quiero que por mi culpa él salga herido a futuro por culpa mía. No me lo perdonaría.

No tenía a nadie a quien contarle lo que me estaba pasando en este momento. El miedo de estar amenazada de muerte por algo que yo no hice, me produce mucha ansiedad.

Escuché tres golpes en la puerta principal de mi hogar. Verifique que todo estuviera en orden para ir a abrir la puerta.

De camino para poder abrir, mis ojos se empezaron a inundar de lágrimas otra vez. No me importo quien fuera el que estuviera tocando la puerta de mi casa. Al momento de abrir, no me importo quien podría ser que ya estaba encima de esa persona abrazándola con fuerza y poniendo mi cara en el pecho de esta para poder llorar desahogarme.

Sentí cómo está me abrazo y puso su mano delicadamente en mi cabeza para poder acariciarla.

Mi cuerpo se fue relajando a las caricias que recibía. Me sentía un poco tranquila al poder abrazar a alguien y poder llorar a gusto y en silencio.