The Diamond War

Cap 27

                      ⏳️⚓️PÉRDIDAS⚓️⌛️

Los pensamientos de Itzia estaban revueltos todo había pasado tan rápido.
Recordaba estar discutiendo con Liar, la ira la cegó y sin darse cuenta había sacado su arma espiritual y había golpeado a Liar...El golpe de su látigo no era cualquier cosa y mucho menos para una persona que ya estaba herida...Aquella camarera se había apresurado a socorrer a su compañera y la niña llorando le gritó que se fuera, ahora Itzia se encontraba sentada bajo la sombra de un árbol de jacarandas mientras miraba su látigo preguntándose como se había atrevido a golpear a la castaña? Fue solo un ataque de ira... No era su intención lastimarle.

El tiempo pasó lentamente hasta que la camarera se le acercó y se recargo en el mismo árbol que ella, no quiso mirarle reconocía su presencia, por más que no le agradará reprimió su orgullo para preguntar.

Itzia: "Esta bien?" -Dijo de manera cortante mientras guardaba su látigo y observaba los pétalos caer-

Alma: "Lo está, desperto, no hay gran daño excepto por una cicatriz... probablemente no sane por completo pero ya está curada..." -Su tono era un poco incómodo mientras observaba de reojo la expresión de la peli azul- "hum... No soy quien para decirle cómo debe de comportarse pero... La señorita Liar... ella acaba de sufrir mucho, casi muere y perdió a alguien que apreciaba... solo... sea considerada, se que no le agrado mucho, no pido que me escuche o me deje de odiar entiendo perfectamente que en efecto somos una carga pero... La señorita Liar no tiene la culpa de ello por-

Itzia: "Lo entiendo! Joder no soy idiota, seré más considerada con ella tsk no hay necesidad de explicarme por qué mi comportamiento estuvo mal...." -Itzia pasó su mano por su cara como intentando limpiar la vergüenza y luego al fin miro a aquella camarera- "Dime, quien fue esa persona que Liar perdió"

Aquella frase no era una pregunta, era una demanda y se notaba en su rostro. Alma inmediatamente entro en pánico y los nervios le invadieron mientras jugaba con sus pulgares disimuladamente preparándose mentalmente para hacer que aquella peli azul le odiará más.

Alma: "Lo siento, esa información es personal de la señorita, no puedo decirle sin su permiso..." -Dijo mientras desviaba el rostro para evitar ser congelada por aquella mirada invernal-

Itzia: "Hump, entonces solo cuéntame como era esa persona o que le sucedió" -Dijo mientras miraba a aquella camarera que seguía desviando la mirada asustada-

Alma: "Yo no le conocí, solo se que era alguien que quería mucho a la señorita, la señorita la quería igual, ella era muy amable y hermosa" -Alma aún recordaba el como Annette se había sacrificado para salvar a Liar y la mirada de horror de esta al verla ser atravesada- "No la conocí pero el minuto que estuve con ella me hizo notar que ella era la persona más bondadosa y pura que jamás había visto"

Itzia observo la mirada de la camarera al hablar sobre esa chica, decía no conocerla pero al hablar de ella parecía estar describiendo a una persona tan dulce que su voca se lleno de aquel asqueroso sabor empalagoso que solo le caudo náuseas.

Itzia: "Ya es suficiente" -Su tono sonaba molesto y su ceño estaba fruncido. Alma comenzaba a pensar que el día en que su rostro no se notara molesto el mundo llegaría a su fin-

Alma: "ehm, puedes pasar a verla, creo que necesitan hablar" -Dijo intentando persuadir a la chica-

Itzia: "Hum lo haré ya lo había pensado igual" - Dijo entre dientes -

Itzia se levantó y caminó rumbo aquel edificio donde se hospedaba, al llegar a la puerta se mostraba algo nerviosa pero no dudó más de un segundo en abrirla.
Cuando entro acostada en un sillón se encontraba aquella chiquilla azabache, seguro la camarera le había ordenado no acostarse con Liar. En la cama se encontraba Liar, la observo un segundo, parecía estar ida, sus ojos lucían algo tristes, un vendaje rojizo cubría su torso en la parte en la que ella la había golpeado, sus manos chamuscadas estaban cubiertas por vendas y sus brazos llenos de marcas... Aún así ella parecía un bello ángel herido. La castaña parecía ignorar la herida y solo observaba una pulsera color verde que usaba en su muñeca con total atención a cada detalle.

Liar: "Esta bien, tienes razón Axu" -No había tono que destacara en su frase ni expresión que resaltará en su rostro- "No tengo idea de lo que hago, soy imprudente no podría cuidar a nadie, haremos lo que tu decidas"

Había un nudo en la garganta de Itzia al escuchar aquellas palabras. Algo en su interior ardía al observar a su compañera hablar de una forma tan... vacía, esa castaña alegre y enérgica con la que había charlado, la niña castaña que jugaba con su paciencia y intentaba abrazarla... ahora se veía triste, como una hermosa muñeca de porcelana que fue abandonada y tras años de acumular polvo al salir se cayó y destrozó.
Que debía hacer? Debería decir algo? Esa muñeca rota no era su Liar pero... Que debía hacer?

Itzia: "Iremos con Lord William, si no las acepta las dejaremos en algún lugar de acogida" - Su rostro impasible hacia difícil notar el temblor de sus pestañas o el frío de sus manos, a simple vista nadie diría que la chica estaba en una pelea interna-

El tiempo pasó lentamente. Esa noche Itzia no pudo dormir, se quedó a un lado de la ventana observando la luna, era muy hermosa, la forma en la que los rayos de una luz tan suave pudieran iluminar la noche entera era algo increíble.
Mientras Itzia pensaba en la maravillosa noche un leve sollozo interrumpió sus pensamientos, Liar tenía una pesadilla, sus manos apretaban las sábanas y sus ojos se apretaban con fuerza en aquella mueca triste. Que soñaba? Itzia podía recordar hace apenas unos 10 días cuándo la castaña se había quedado dormida en un cojín, mientras trataba de despertarla la castaña solo se hacía bolita con sus lindas mejillas infladas se quejaba pidiéndole que le dejara descansar un poco más.
Itzia sonreía ante los recuerdos, "como todo pudo cambiar tan pronto?" Se dijo a si misma en un susurró mientras se re cargaba en la cama de su superior y la observaba luchar contra sus malos sueños, era tan lamentable como no solo le habían robado a esa castaña la sonrisa sino...

"Annette"

Se pudo escuchar en un tono triste en aquella habitación solo iluminada por los rayos de luz que pronto comenzaron a hacer brillar un par de lágrimas silenciosas.

Y ahí estaba el nombre de la persona que le había robado el sueño y la sonrisa a su superior, Que tan grande fue el trauma de su superior? Que tanto sufrimiento aguantó para que en unos días aquel rayo de sol se hubiera apagado?.
Un suspiro salió de ella al pensarlo, prefería no hacerlo... Quien era esa chica? Tal parece que a su superior le gustan los nombres con "A".
Una risa dolida escapó de su boca mientras pensaba en aquellas dos chicas que tanto amaba su superior, ella siempre lograba hacer amigas, ahora gracias a esto ella tendría que cargar con una Liar deprimida, una camarera, y una niña, Genial!!!

Itzia comenzó a reír de forma silenciosa. No sabía cuándo decidió ser empática y ocultando su rostro entre sus brazos, recargada en la cama de Liar comenzó a acompañar a la castaña con su llanto. Ya no podía más...

Fue una noche larga para las dos chicas, ambas no podían dejar de lamentar sus perdidas.