The Diamond War

Cap 40

                         DESESPERACIÓN

La fogata ya no parece emitir calor suficiente pero los brazos que le rodeaban se sentían como una manta cálida a pesar del frío cuerpo de la portadora.
Liar siempre estaba fría pero su presencia siempre le resultaba cálida de alguna forma desconocida, que pasaría si ya no volviese a tener los alientos que aquella castaña le daba? Tal vez su nombre sólo sería otro nombre que agregar a la lista de bajas de aquella guerra.

Liar: Aiya, Aiya... tranquila -Fue lo único que pudo decir en el momento mientras abrazaba aquel pequeño cuerpo de agua cuya fuga no parecía querer parar-

Era su culpa que ella ahora estuviese llorando así que debía hacer algo para hacer que ella se calmase pero eso nunca fue su don.
Observaba los cabellos azules de la menor mientras pensaba que decir pero no las palabras no parecían venir a su mente.

Liar: Tu cabello es azul, como el mar...Me gusta el mar, el océano es tan grande y silencioso...- La había liado? No sabía cómo eso hiba a ayudar o siquiera el por que lo dijo. Sólo quería acabar con el silencio incomodo-

Liar: Eres del Reino Azul... Sabes? yo también soy de ahí -Por un momento sintió como la menor se sorprendía y dejaba de llorar-

Liar: Es un Reino frío lleno de estanques congelados de forma parcial... las noches son largas y hay ráfagas fuertes que te empujan con fuerza - Dijo mientras notaba como la peli-azul sólo la observa confusa-

Itzia: Eres del Reino Azul? - Pregunto confusa mientras su llanto paraba un rato-

Liar: Hump no es algo que me guste contar - Contestó un tanto incómoda-

Itzia: Pero no puedes salir del Reino Azul, es ilegal - Dijo recordando como se suele castigar de pena de muerte a quien huye del Reino Azul-

Liar: Sólo si te descubren- Dijo colocando un dedo en su boca como si le pidiera guardar el secreto -

Lo había logrado!. Había cambiado de tema, pero esta vez Itzia no quiso molestarse en regañar la.

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Era más de media noche cuando Ron escucho un sonido en la Copa del árbol donde estaba.

Itzia: Ron... - Dijo de forma seca-

Ron: Vaya gato que eres - Dijo sin siquiera voltear a ver a la chica de atrás suyo- Ya te lo contó, cierto? - Pregunto el chico-

Itzia: Muy a medias - Dijo con un suspiro sentándose al lado de la criatura- Cuéntame más respecto a ese veneno

No era un pregunta, era una orden y Ron lo sabía más ya no le importaba mucho dar detalles. De al fin Liar ya había confesado, no le costaba mucho dar más  detalles entonces.

Ron: Has visto aquel collar metálico que Liar usa? - Dijo para luego ver como la peli-azul asentía y continuar- Se le llama por varios nombres pero es prácticamente un collar de contención de qí, lo que hace es inyectar pequeñas dosis no mortales de veneno al cuerpo para hacer que la persona se quede sin poder alguno - Explicó de forma breve lo mejor  posible-

Itzia: Pero por que esta matando a Liar?! - Dijo molesta como si fuese la culpa del azabache a su lado-

Ron: Cuanta más resistencia pones más veneno inyecta. Liar utilizó mucho sus poderes mientras usaba el collar por esto el collar inyectó mucho más de la cuenta y se rompió - Explicaba mientras tapaba sus oídos. Como odiaba aquella voz chillona - El collar está roto, cada vez inyecta más... ella prácticamente está muriendo de forma lenta, en realidad me sorprende que siga viva - Dijo en un tono monótono-

La peli-azul estaba impactada, sus manos apretaban con fuerza su falda y su rostro estaba sombrío. Liar estaba muriendo, como había llegado a ese punto? Que rayos había hecho Liar para acabar en tal situación?

Ron: El nombre del veneno es veneno esmeralda... Se uso mucho en la guerra de independencia del Reino Morado y lo solían usar los verdes para castigar a los morados - Dijo un poco incómodo- Fue prohibido pero aún se usa de forma ilegal, aun que normalmente se hace en el Reino Verde y no morado.

Itzia: Hay alguna cura? - Dijo en un hilo de voz casi inaudible -

Ron se retorcia un poco incómodo en su lugar, se sentía muy culpable y lo peor es que no sabía si el podría hacer la cura para la chica

Ron: No lo sé... - Dijo con un tono similar al de la anterior - Pese a todo yo no lo hice, fue solo una broma de mal gusto...

Itzia miraba al suelo de forma vacía y sin mucha esperanza hasta que volvió a escuchar la voz del mayor

Ron: Pero puedo intentar - Dijo con ánimos sacados de quien sabe dónde - Se que con los materiales adecuados podré quitar aquel collar y hacer alguna cura - Dijo intentando más que nada consolarse a sí mismo-

A Itzia no le agradaba mucho aquel pelinegro pero en esos momentos más que nunca quería confiar en el.
Al volver a la tienda de campaña Liar dormía con el seño fruncido como si soñase alguna pesadilla. Tal vez lo hacía

Era una persona demaciado misteriosa y eso no le agradaba pero pese a todo Itzia solo deseaba que aquella castaña ojiazul estubiera bien...

...

Mamá, tengo mucha hambre, no hemos comido desde hace 2 días... ya no aguanto más. Podemos salir?

No. Si tienes hambre sólo duerme

Por que?! Mamá tenemos hambre!

Un golpe seco se escuchó y un pequeño cuerpo delgado se desplomó en el piso como un saco de arena.

No grites mocosa, si nos descubren moriremos las tres

No la golpes!

También quieres? Si sabes lo que te conviene toma a tu hermana y escondanse en otro sitio. Por su culpa estamos haciendo esto

Liar despertó con su cara llena de sudor. Sobaba su mejilla para aliviar el golpe imaginario mientras se adaptaba al nuevo escenario a su alrededor.
Sólo un sueño... No, era más  que eso, era un recuerdo.
Se sentía tan real que su corazón latía muy rápido y el aliento se le escapaba....
No, eso ya no era por el sueño.

Liar se quedaba sin aliento, su garganta dolía, dolía mucho, ardía y no dejaba pasar el aire, sus manos sudaban como un hielo derritiendose y su vista se comenzaba a nublar. Quería gritar pero le era imposible, quería correr pero sus músculos no movían, no podía hacer nada más que sentir como el aire no pasaba por sus pulmones y escuchar como su corazón latía de forma desenfrenada.