~Druig~
Estábamos en la cabaña que antes era de Ajak. La familia de Phastos estaba junto a nosotros mientras comíamos pizza y veíamos televisión.
-¿Fueron ustedes? -pregunto el esposo de Phastos la ver un reportaje de noticias
-Te amo muchísimo -le respondió Phastos
Entonces de la nada se escuchó un fuerte ruido de la cocina. Me levanté de inmediato. Caminamos hasta la cocina y el hijo de Phastos estaba algo asustado, pero asombrado por Thena.
-¡Casi le rebanas una oreja! -se quejó Phastos poniendo a su hijo detrás de si mismo -Desde hoy, todos tus privilegios de niñera están revocados
Thena y yo empezamos a reír, pero todo se vino abajo cuando el pequeño pregunto por la fotografía que posaba en el refrigerador.
-¿Quién es ella? -curioso el niño
-Ella es Arilen... Y es la más valiente de todos nosotros -explico Phastos
-Es muy bonita
"Lo es" -responde esta vez Makkari con una gran sonrisa
Ellos se veían felices y, estaba seguro de que no encajaba entre ellos. Así que salí de la casa en silencio, tratando de que nadie me viese.
Llegue al gran campo donde el aire jugaba con las hojas verdes.
Todo el tiempo recordaba a Arilen; su sonrisa, sus ojos, su cabello, su vos. Absolutamente todo. La extrañaba y todo en la tierra me hacía recordarla.
Y no había pasado mucho tiempo desde su partida.
Sentí un pequeño toque en mi hombro, voltee a ver y era Makkari.
"Porque te fuiste" -pregunto tomando asiento a mi lado
"Quería estar solo"
Pasaron segundos en donde ninguno dijo nada. Los dos comprendiamos el dolor y falta que Arilen nos hacía.
"Tengo algo para ti" -tomo dos sobres de su abrigo y me los extendió
"¿Qué es?" -cuestione tomándolos
"Arilen dijo que te los entregara tan solo te viera, pero me pasó por alto y hasta ahora recordé"
Los dos sobres tenían nombre, uno decía Luca y el otro Druig.
"Te dejaré solo para que lo puedas leer en paz" -dijo y se levantó de mi lado
-Gracias -conteste y ella asintió sonriente
Cuando Makkari estaba lo suficientemente lejos, me dispuse a leer la carta.
Lo primero que no te fue la buena ortografía de Arilen, su letra era delicada y cuidadosa. Al abrirla habían unas hojas adornadas con tinta negra. No tarde mucho y empecé a leer.
Mi querido Druig...
Por favor, te ruego no te enojes conmigo. Lo que he hecho, es porque quiero que ustedes sean felices en la Tierra junto a las personas que vimos crecer. Porque si, las personas no son tan malas como lo crees.
Y preferiría decirte todo lo que sé en persona, pero debo conformarme con una carta, porque no sería capaz de despedirme en persona.
No tendría el valor suficiente para decirte adiós.Debo decir que... tú y yo nos conocíamos de antes.
¿Recuerdas que les platique la razón por la cual tengo la forma de una eterna? Bueno, si lo recuerdas, también recordarás que Arishem me envió a proteger a los celestiales de cualquier peligro, incluso de ustedes los eternos. Pero en una misión en un planeta desconocido nos conocimos y según Arishem;
Tú y yo nos enamoramos.
Tanto así que me convenciste de matar a una celestial llamada Gura, para que los dos pudiéramos vivir en ese planeta como una pareja, como una familia.
El plan no funcionó. Arishem nos descubrió y nos hizo dormir a ambos. Después de miles de años luz, porfin logramos reencontrarnos en la tierra, pero nuestros recuerdos juntos habían sido eliminados.
Siendo esa la razón por la cual no recordemos lo sucedido.
Pero bueno, nuestras aventuras en la tierra estoy segura de que si lo recuerdas.
Sé que te preguntarás...
¿Por qué me cuenta esto hasta hora? Y tengo una buena razón.Quiero que sepas que te encontraré. No sé cuándo o dónde, pero lo hare. Porque si nos reencontramos después de milenios, porque no lo haríamos ahora.
Así que por favor. No me busques, por que yo seré quién te encontré.
Estas palabras no compensan nada, pero, por favor, perdóname...
Nunca quise mentirte. Solamente quería protegerte a ti y los chicos.Porfavor recuerda que jamás te olvidare.
Tu eres mi vida, mi corazón, mi mi alma destinada. Y las estrellas son testigos de lo que siento por ti. Si puediera estar ahí, junto a ti, te aseguro que justo ahora estaría envolviendote en un abrazo.
Por que te amo, no lo olvides.Con amor... Tu preciosa Arilen.
PD. Por favor, entregarle la segunda carta a Luca. Sé que a los dos les caera bien conocerse.
No pude evitar llorar.
Ella sabía que en algún momento nos volveríamos a encontrar, y aunque para ser sincero, eso no me tranquilizaba en lo más mínimo. Ahora tenía en cuenta que en algún momento ella volvería.
Volverá y los dos seremos felices juntos, como lo era antes.
-Druig, nos vamos -dijo Thena a mis espaldas
Me levanté del césped y me dirigí hacia ellos.
-¿Qué estabas haciendo? -pregunta Phastos
-Solamente... Pensaba en Arilen -contesto acercándome a su hijo
"¿Qué está haciendo?" -pregunta Makkari a Phastos
"No tengo la mínima idea" -este responde
-Sabes... Arilen no solamente era linda, sino también inteligente y fuerte. Y la conocerás más pronto de lo que crees
El niño sonrío ante mis palabras.
"¿Qué fue eso?" -pregunta Makkari al verme llegar a su lado
"No fue nada" -respondo y comienzo a caminar hacia la nave
-¡Vamos! Debemos ir a un lugar antes de empezar la búsqueda de Arilen
Todos se quedaron asombrados ante mis palabras, pero no dijeron nada, solamente avanzaron.
-¿A dónde iremos? -cuestiona Thena confundida
-Con Kingo -digo de lo más simple
"Y ¿para qué?" -indaga esta vez mi Makkari
-Necesito hablar con Luca
Digo con firmeza mientras el domi empieza su camino.
~×~×~×~×~×~×
Más relleno, lo sé, pero es para darle un final digno. No soy buena con el romance, pero espero les gustará la carta, y si no, pues da igual, a mi sí me gustó :)Espero sea de su agrado y también espero que voten por el.
Gracias por las 100 vistas. No es mucho, lo sé, pero me emociona.
Les quiere... La chica sin vos ni emoción.
(CORREGIDO)
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Two destined souls (Druig y tú) -Eternals Marvel-
FanfictionLos eternos tenían una sola misión: proteger la tierra de los desviantes. Eso estaba claro para todos. Excepto para Arilen y Druig, quienes desde su creación estaban destinados a estar juntos en cualquier lugar y cualquier momento. Aún así, los pro...