Jayden Lewis, salvaje, brutal, despiadado. Tres palabras que lo describen a la perfección, al menos sobre el cuadrilátero.
Tessandra Green, testaruda, orgullosa, y reina de las apuestas de la vieja bodega abandonada de los barrios bajos.
Jayden, c...
Dicen que nunca debes de dar por sentado algo, que la vida en un instante puede cambiar.
Dicen que a veces estarás en la cima, y otras veces caerás hasta el fondo.
¿Mi problema? Creí que la cima me pertenecería siempre.
Cuando conocí a Tessandra nunca imaginé que aquella chica de cabellos rojizos y mirada de hielo, pudiera ser la única oportunidad para salvar mi gloria, para asegurarme mi lugar en la cima.
Pero Tessandra Green es todo menos compasiva, su ayuda tiene un precio. Y para alguien que no está acostumbrado a ceder ante nadie, eso significa un problema.
Pero en este instante, mirando al hombre frente a mí siendo incapaz de ponerse de pie, sé que lo he jodido, en grande.
Sí. EN GRANDE.
¿Cómo llegamos a este punto? ¿En qué momento mi gloria se convirtió en un punto de miseria?
Nada tiene sentido, mí título, mi cinturón, mi carrera entera...es como si una fuerza mayor hubiese arreglado absolutamente toda mi vida, para traerme a este punto, para colocarme aquí, en medio de la oscuridad, en medio de la humedad.
Miro a mi alrededor, las paredes humedecidas, el olor a moho llenándome y provocándome nauseas. La necesito aquí. Su nombre brota como una nube en mi mente, como una niebla. ¿debí de haber aceptado su precio? ¿Debí haber cedido más?
Este no es mi lugar, no debo de estar aquí. Las lágrimas nublan mi visión, el sentimiento de frustración y decepción.
—Soy el campeón —elevo el mentón con suficiencia, armándome con la última dosis de dignidad. —¡Soy el maldito campeón!
El eco me devuelve la furia de mi grito, mi pecho sube y baja con rapidez, mis rodillas pierden fuerza, caigo de rodillas elevando la mirada al oscuro cielo. Soy un campeón, en medio de un reino que no me pertenece. Un campeón que ha abandonado su gloria, y se ha sumergido en la más grande de las miserias.
Y entonces su voz me envuelve, su voz vibrante esa que siempre consiguió molestarme. La escucho y creo que estoy alucinando, pero está aquí. Es ella.
¡Hola, hola! Pues bueno, aquí estamos comenzando una nueva aventura, espero que le den tanto amor como a las demás, los días de actualización se quedan en tres veces por semana, siendo Lunes, miércoles y viernes, a las 4 pm hr méxico.
Espero que les guste tanto, y les emocione así como a mí.
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