04. Almas Gemelas.

297 40 33
                                    

Mi Alma Gemela, El Amor De Mi Vida.

Los dedos sobre las cuerdas de la guitarra tocan aquellas notas que aprendió por primera vez.

Y su voz entona aquella canción que su padre le enseñó:

Me gusta tu alma, tu alma me gusta, me gustas...

- Me gusta amanecer pensado que me quieres, soñarte se hizo ya el mayor de mis placeres...

La voz de su madre se le une, con cautela dirige su mirada hacia la voz y encuentra a Julieta a su lado, sonriéndole con melancolía.

- Desde que tu padre se fue no habías tocado la guitarra, tuvo que pasar algo muy especial para que volvieras a hacerlo...

Y así, de un momento a otro la mirada de la mujer pasó de ser amorosa a cómplice, enarcando una ceja y sonriendo con picardía.

Emilio Geller puede utilizar todos sus dotes para convencer a sus socios de invertir pero a Julieta no puede ni siquiera decirle una mentira piadosa.

Suspira y sus dedos abandonan las cuerdas, con cuidado toma a su madre de la mano para ambos tomar asiento al pequeño sofá de la habitación, apoya la guitarra sobre su regazo y acaricia lentamente la madera.

- Es Joaquín... Hoy... Le he invitado a cenar... Bailamos un poco y yo...

Bajó la mirada, sus pies descalzos son más interesantes que soportar la mirada dura de Julieta, más cuando se enfada.

- ¿Y tú...? - Le incitó a continuar, ella sabe perfectamente cuando Emilio evita mirarla por miedo a que le regañe, sabe cuando su bebé está nervioso y le cuesta expresarse.

- Yo... Lo besé, sé que no debí hacerlo, hice todo lo contrario a lo que me dijiste pero es que cuando tuve su cuerpo entre mis brazos y nuestras miradas se encontraron fue tan difícil no hacerlo, una conexión muy fuerte surgió, un sentimiento extraño y tan precioso a la vez que solo deseaba no soltarlo nunca...

Emilio habló tan rápido que para Julieta fue todo un reto poder descifrar que dijo, sin embargo el mensaje era claro, con sus manos cálidas tomó las mejillas de su hijo y le hizo mirarle, se le veía arrepentido por "decepcionarla".

- Oh mi amor... Está bien, me dí cuenta que entre ustedes había algo especial desde que les vi en la floristería, Joaquín evitando mirarte y tú tan coqueto como nunca - Sonrió y eso provocó que Emilio también lo hiciera, añadiendo un sonrojo a sus mejillas - Verás, el universo es tan maravilloso que a veces no entendemos todos los mensajes que nos da, hay algo llamado almas gemelas, almas que están destinadas a estar juntas sin importar la situación, almas que siempre van a unirse, ese sentimiento extraño surge cuando frente a nuestras narices está nuestra alma gemela, el corazón late desenfrenado, los nervios en nuestro cuerpo son intensos y nuestra mente nos dice que todo va a estar bien, el alma se alborota, hace fiesta cuando estamos cerca, se regocija con un simple roce de dedos y desfallece con un beso.

Julieta se levantó del sillón y dejó un beso de buenas noches en la frente de su hijo, dejándolo con más preguntas que respuestas.

¿Joaquín es su alma gemela?.

¤°¤°¤°¤°

Cierra la puerta tras él, suspira y una sonrisa enorme divide su rostro.

Su cuerpo tiembla, el corazón parece querer salirse de su caja torácica y su alma, oh su alma...

¡¡ME SIENTO EN EL CIELO, BONDONI!!.

Latidos | EmiliacoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora