𝐒𝐑 ┃ 𝐂𝐀𝐏𝐈́𝐓𝐔𝐋𝐎 «18»

375 98 5
                                    

(Bibi)

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

(Bibi)

Otro día abrumador, estresante y agobiante de clases, miró a los bulliciosos alumnos del lugar en sus actividades normales hasta que mí atención pasa a Yoongi que caminaba por el pasillo con la cabeza baja hacia la cafetería, pongo una sonrisa satisfecha en mis labios. Yo en cambio estaba a la espera de acostarme con otro nerd jugador de Free Fire, sin embargo, que sabía follar como un puto Dios del sexo. Pero ese pensamiento desapareció cuando vi a Yoongi, enfrente de mí. Sus ojos hinchados y rojos, seguramente de tanto llorar. Él recordaba todo, él sentía a todos, pasó a ser el bicho raro del que viven hablando, del que siguen cada paso.

―Lo siento.. Mucho... ―afirmó en un murmullo― De verdad que lo siento mucho.

Lo miré, me sacó de mis pensamientos, levantó mí cabeza controlándome con el antes mencionado. ¿Qué? ¿De verdad? ¿Tan rápido? Dios, fue más fácil y rápido de lo que esperaba, las lágrimas caían por sus mejillas regordetas.

―Disculpa... ¿Qué has dicho? No he logrado escuchar bien. ―murmuré, con burla e ironía- Podrías decirlo más alto.

Me acercó para tomar su rostro entre mis manos, levantando su cabeza para que sus ojos me miren, sus pupilas estaban rojas e hinchadas, como si lo único que hiciera, era llorar.

―Por favor... no me hagas repetirlo. ―sus ojos me simplifican piedad, cosa que no tengo con tipos como él― ¿En serio?

―Tragate ese puto orgullo de una maldita vez. Anda, dilo. ¿Oh quieres que...

―¡Lo siento! ¿Está bien? ―fui interrumpida abruptamente― ¡Estoy arrepentido! ¡De verdad lo estoy!

Está bien, eso me tomó por sorpresa, bueno nos tomó, cuando hablo en plural. Habló de todo el cuerpo estudiantil y docente del lugar. Yoongi todavía cabizbajo, de reojo observaba a todos con culpa y arrepentimiento, sabía que se estaba martirizando por ser tan idiota.

―Una de las cosas que más nos cuesta hacer es pedir perdón y admitir nuestros errores, sin embargo... ―continúa él, levanta su mirada hacia mí, mientras hacía esa pausa- Perdóname... de veras que siento tanto todo. ―miró a su alrededor, buscando a las personas― Todos ustedes perdónenme, fui un idiota y lo aceptó, pueden odiarme, insultarme. Hasta hablar de mí cuánto gusten, se que unas simples disculpas no remediara el daño que les he causado, pero quiero pedir perdón, quizás eso me haga sentir menos miserable.

Camina hacía un grupo de chicas en especial, aquel grupito con las que se divirtió a finales del año pasado.

―Quiero que nada de lo que les haya dicho o hecho en el pasado les afecte, si en algún momento tuvieron pensamientos suicidas, les pido por favor que tiren todo eso a la basura, vivan su vida, sean felices, por qué son demasiado hermosas para perder el tiempo con tiempo como yo.

Sinceridad y honestidad, sí. Eso era lo que había en sus palabras y sonreí por dentro mío al notarlo. Ahora camino hacía el grupito de los jugadores del Free Fire.

―Con ustedes si que fui más hostil y un verdadero hijo de puta. Lamento haberlos golpeado por diversión, lamento haberme burlado de ustedes por cada mínimo detalle, lamento haber aprovechado sin remordimiento. ―dice, si fue muy hostil, uno de esos chicos quedó en terapia intensiva por tres meses solo por haberse reído de una caída de Yoongi― Les pido perdón a todo, no mencionaré las fechorías que he hecho por de ustedes ya la saben y ya me siento suficientemente mal como para volver a recordar esas idioteces mías. Lo siento.

Termina de hablar dando una última mirada, para luego correr lejos de allí, del público, corrí detrás de él apresurada por alcanzarlo.

―¡Oye idiota! ¡Yoongi! ¡Espera! ―le gritó pero ni sé inmuta, sigue yéndose lejos del pasillo.

Corre rápido, ágil y haciendo zic zac para que su rumbo sea hacia las canchas, logró alcanzarlo en las gradas, sostengo con fuerza mí mochila sobre mí hombro ya que está contenía, su billetera y las llaves de su auto. Con todo el coraje que tengo de no sé dónde me sostengo de las barandas, para poder saltar, voy a poner en práctica las leyes de Isaac Newton, cuando al fin estoy del otro lado me acerco a él dando pasos torpes.

Tengo miedo de ser rechazada. Digo, luego de todo lo que dice si me acepta sería un milagro divino.

Pero me sorprendió que él se girará hacía mí con calma, no había odio en sus facciones. Lo sé, porque lo estudié detalladamente, su rostro está hinchado, húmedo por las lágrimas. Sus ojos estaban rojos. Siento pena por él, tengo ganas de abrazarlo y disculparme, pero no quiero ceder, todavía existe una pequeña posibilidad que eso sea solo un show de su parte para que crean en él. Quizás mis pensamientos sean mediocres e ignorantes, unos que carecen de empatía. Sin embargo, soy humana, y tengo sentimientos, así que los ignoro. Aunque sea solo un pequeño cambió, lo intentó. Y eso cuenta.

―Yoongi... Pedir disculpas no siempre significa estar equivocado. Sólo significa que valoras tu parte humana, más que tu ego. ―le dije, volviendo la mirada hacia él― Cuando digas la palabra «lo siento» asegúrate de comprender que una disculpa tiene 3 partes. «Lo siento» «es mi culpa y no lo volveré a hacer» y «¿Cómo puedo mejorar las cosas?» La última parte es la más importante, así que piénsalo bien antes de cometer otro error que lastime al otro.

Voltea nuevamente hacía adelante, sentándose en las gradas de la cancha, me acerco para sentarme a su lado. Él sentía arrepentimiento, y estaba segura de ello pero quería buscar respuestas concretas, quería confirmar que su discurso de disculpas era cierto y no uno improvisado para safar de las habladurías de los estudiantes.

―Me siento horrible, no puedo ni mirarme a un espejo sin sentir asco de mí mismo. Realmente quiero morirme, ¿Puedes al menos hacerme un velorio sin insultos y una sepultura decente? ―finalmente me miró, sonrió de soslayo ante la propuesta, bajando la mirada a sus manos que apretaban sus piernas.

―¿Quieres ir con traje o sin traje? ―le sigo el juego para aliviar la tensión.

―Da igual, pero entierra mis cosas conmigo para asegurarme que no me volverás a robar. ―hecha la cabeza hacia atrás mirando el cielo carente de nubes.

Suspiró mientras rasguñaba la madera de las gradas, con melancolía, sin saber bien qué decir en ese momento, no creí que pasaría tan rápido.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
«𝐒𝐂𝐇𝐎𝐎𝐋 𝐑𝐔𝐌𝐎𝐑𝐒» ➸ ❝𝗠𝗬𝗚❞ (+¹8) (✓)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora