En los infinitos multiversos, donde cada instante se reinventa, las vidas se entrelazan en patrones impredecibles. Una persona puede vivir realidades paralelas, desde lo común hasta lo extraordinario.
Una pareja, en este juego cósmico, puede compart...
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- Bakugou.- el nombrado giró su cabeza para ver a quien lo llamó
-¿Qué quieres bastardo mitad y mitad?- preguntó levemente astiado el chico de difícil carácter
No es que a Katsuki le desagrade hablar con el chico que tantos suspiros ha llegado a sacarle en un solo día, lo que sucede con el varón adolescente de cabellera rubia es que no está entendiendo la tarea que su maestro; Aizawa, le dejó como castigo.
Ambos chicos se encuentran en el salón de clases; siendo supervisados por el maestro, mientras ellos resuelven una difícil tarea que el sensei Aizawa les dejó como castigo por pintar y escribir con un vocabulario soes, en una de las paredes de la clase 1-B.
- Bakugou, no entiendo la "d".- dijo decepcionado el bicolor
-¿Estás en la "d"?, que lerdo y tonto.- burló el cenizo
-¿En cuál estás tú, ah?- preguntó curioso
- Yo estoy en la "e", tonto.- presumió el fanfarrón
- Solo estás una por delante de mí.- se quejó el chico de cicatriz
- Pero estoy delante de tí. Eso me convierte en el mejor.- siguió con su egocéntrico actitud
- Seguro que tienes todas malas, estúpido narcisista.- susurró molestó y un poco avergonzado el de dos colores
-¡¿¡QUÉ FUE LO QUE DIJISTE, BASTARDO!?!- gritó Bakugou
Oh sí, Shōto olvidó por completo el buen he increíblemente desarollado oído que tiene su compañero de clase. Todoroki se encogió en sus hombros; achicando su cuerpo por los gritos de su amigo–no amigo.
El de dos colores ha estado pasando más tiempo con el explosivo y su vocabulario soes se le ha pegado; haciéndole costumbre insultar; más que todo porque cuando lo hace Katsuki siempre muestra esa sonrisa orgullosa y le da elogios; a él lo hace sentir bien eso.
- Bakugou.- habló el de cabellos negros que se encuentra en aquella habitación - Silencio.- y no dijo más
El maestro se encuentra leyendo un libro mientras supervisa que sus mejores estudiantes; académicamente hablando, resuelvan los ejercicios Universitarios que usó para los dos engreídos mocosos que vienen empezando preparatoria.
- Bakugou.- susurró Shōto
-¿Qué?- preguntó brusco
- Hablemos mientras resolvemos estos ejercicios.- propuso el de cara estoica
- Bien.- aceptó el chico de ojos rojos
- Bakugou, ¿quién te gusta?- preguntó repentinamente el chico de fascinante heterochromia
A Bakugou inevitablemente se le cayó la lapicera con la que estaba respondiendo resolviendo su tarea, su boca se abrió un poco grande y luego la cerró nuevamente, aquella acción fue vista por un sonriente Aizawa; quién dejó de prestar atención a su libro.
