La moral de Draco era cuestionable. O eso podría parecer a un extraño. Siempre lo fue y ahora también. Draco aseguraba que esto dependía de a quien preguntaras y sobre qué.
Habia pensado mucho en eso cuando conoció a esa persona y en un momento se detuvo a pensar en sí era lo correcto. Podía aceptar que le había gustado desde que lo vio. En ese instante pensó que tenía una especie de fetiche, pero no le importo.No pensó que amaría a alguien más así y quizás no lo hacía igual, pero se encontraba ahí ansiando verlo. Deseando quererlo y sobretodo deseando que ese ser lo amará de vuelta. Todo a su alrededor era fuego, cuando pensaba en ese ser casi mitológico o celestial todo se convertía en fuego dentro de sí.
Le encantaba y funcionaba en lo que quería en su vida ahora. Pero eso no evitaba que en sus primeras citas la duda lo carcomiera junto a la culpa. Es que Fred había sido Fred, su primer amor y sus primeras veces.
Por eso cuando fue arrastrado por Luna Lovegood a una convención anual de animales fantásticos no supo decir no. Ella le había ayudado desde que fue prisionera en la mansión, sabía sobre su relación con Fred. Y había estado con él al final de la guerra. Era la única que conocía su historia y le había brindado consuelo a su muerte.Lo que no esperaba era que en Pongo de Caynarachi encontraría a alguien que haría saltar su corazón con una sola sonrisa. Lo había visto de lejos, en ese momento no lo relaciono a su antiguo novio. Pero después de ver su nombre, la culpa, la tristeza, la duda lo atacaron sin piedad. Al tercer día de esa convención se encontraba suspirando por Charlie Weasley.
ESTÁS LEYENDO
Amores de una vida: amores distintos
FanfictionTemporada 2. Las remodelación de Malfoy Manor seguía, Draco seguía recordando como había llegado ahí. A Draco podrían decirle mil cosas sobre su moral, pero no sobre su forma de amar y ser leal a ello. Aún así no pensó que se enamoraría de alguien c...