Amores de una vida: amores distintos

¿Iremos Muy Rápido?

La plática fluyó un poco mejor después de eso y los siguientes días fueron más tranquilos para el corazón de ambos. En el hotel habían compartido una experiencia de intimidad increíblemente no sexual para la sorpresa de un rubio y entre esa sorpresa habían establecido algo entre ambos.
Draco se preguntó si debía seguir la corriente. Una sonrisa de Charlie le dijo que no podía ir mal. O tan mal como podría imaginarse. Al menos podría disfrutar aquello los días que dudará la convención y después ya estaría buscando una nueva cosa que hacer. Ambos habían dicho eso ¿no? Disfrutar esos días.
Por lo pronto la relación que habían forjado en esos tres días, era increíble. Draco sentía cierta tranquilidad en aquello de una extraña manera. Charlie era fuego, había peligro en aquello y también calidez. Charlie sentía que aquello iba en buen camino, hasta el momento solo sería algo si bien no pasajero, esta relación tenía fecha límite el día que regresarán a sus oficios y por ello debía disfrutarlo.
Ambos hombres decidieron que ese día dejarian la convención de lado e irían a pasear por el pueblo donde estaban. Cuando Draco supo dónde estarían no esperaba mucho, el lugar estaba seguro ni los locales sabían donde estaba. Así que tampoco esperaba mucho cuando Charlie le pidió salir a caminar por el lugar, aun así lo disfruto. Lo disfruto, definitivamente estar junto a Charlie hizo todo mejor.
Esa noche durmieron en la misma cama, después de esa noche no se preguntó de su dudosa moral por un tiempo. Por el momento solo se concentraría en disfrutaría esos días.