Cuando estaba sin tí

10.-Una Identidad

Tres Semanas Después.
Nueva York
Manhattan.
Departamento de Denisse

Denisse y Robert comenzaron a interactuar aún más y forjaron una amistad.
Ella le enseñaba a leer, escribir y a comportarse mejor entre los humanos, también le mostraba canciones, películas y sabores de la Tierra. Él miraba con facinación la comida y empieza a pedirle a Denisse que le enseñe a cocinar, también Robert comienza a tener más gustos en la musica, escuchaba un poco variado. En ese tiempo Pablo iba con más frecuencia a ver a Denisse, pero en secreto, hablaba con Robert explicándole un poco, de cual era su plan para integrarlo en el mundo y entre los Kiras.
Robert empieza a sentir más empatía por Pablo, viendo que él no era tan malo como creía, ni como aparentaba. Aún así no podía evitar sentirse molesto cuando Pablo estaba con Denisse, ya que ambos eran demasiado expresivos con sus muestras de afecto.
Ese Día.
Robert observa la ciudad desde el balcón. Estaba un poco nervioso. Recordando lo que Pablo le dijo tres días atrás.
_________________
Robert voltea y ve a Pablo parado enfrente de su cama, se asusta cuando lo ve.

-Hay cielos. No hagas eso estúpido-. Replicó Robert molesto.

-Perdón Robert-. Lo ve levantarse molesto. -Solo te vengo a decir que el Lunes, tendremos que decirle todo a Denisse.

-¿Qué?-. Voltea.

-Denisse, es una muy buena persona. Ella te protege bien, pero para que me deje ayudarte tenemos que decirle. Deja que yo le expliqué a mi manera, yo también tengo que protegerme. Tengo que proteger a todos-. Dijo Pablo intentando ser comprensivo.

-No se supone que confías en ella-. Ve que baja la mirada. -Ella es tu novia, se la pasa besuqueadose y diciéndose palabras tan cursis y-. Pablo lo mira y solo se ríe. -Y, oye no estabas con ¡Ash! Dime por favor que no ¿Le volviste a hacer lo mismo de la otra vez?-. Pregunta Robert molesto.

-Si la dormir ¿Por?-. Contesto sin preocupación.

-¡Hay eres un sínico!-. Exclamó furioso.

-¿Que quieres que haga? Denisse no me deja cruzar una palabra contigo, te protege bien eso no lo voy a negar, pero creo que se toma el de protegerte muy enserio. Tú y yo solo hablamos de esas veces que se distrae o se va a buscar algo, además no le doy nada malo y sirve que duerme toda la noche y descansa. Ella realmente se esfuerza demasiado en protegerte y cuidarte-. Él lo mira. -¿No quieres devolverle el favor algún día? Robert esto tiene que pasar, es lo mejor para todos, tienes que tener una identidad.
________________________________

-Robert-. Denisse lo saca de sus pensamientos. -¿Qué paso?, te fuiste de aquí.

Él sonríe levemente.
-Si un poco, perdón la pregunta Denisse ¿Que haces aquí?, ¿No vas a ir a trabajar?.

-¿No recuerdas que la semana pasada casi no estuve en casa?-. Él asiente. -Esa semana hubo muchísimo trabajo y como trabaje unas horas extras, no puedo trabajar más de lo permitido, así que no voy a ir hoy. Tal vez hasta el jueves o viernes regrese, aunque descanso los fines de semana.

-Ah, no entendí mucho pero-. Ve que ella se ríe. -Si es verdad casi no estuviste en casa está semana. De hecho, te extrañe mucho esos días-. Ella lo mira con asombro, él se da cuenta de lo que dijo y se queda callado.

-¿Me extrañaste?-. Pregunta sorprendida.

-No, bueno, es que. No dije nada, no-. Niega nervioso

-No, si lo dijiste, ¿Enserio a ese Azulito se le ablandó el corazón?-. Dijo en tono de burla.

-No. No me digas así-. Él se molesta pero a la vez se sonroja levemente.

-¿Cómo? ¿Azulito? Azulito, Azulito-. Él se ríe nervioso y avergonzado.