Hasta en la noche estrellada

CAPÍTULO VI "Un juego amistoso"

¡Advertencia! En este cap se muestran escenas explícitas y de violencia. Por favor leer con precaución.
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ÁSTEREON
Miércoles 0400 de la tarde.

Lanzo el balón al otro lado del campo recostándome en el césped. Estoy cansado y estresado, odio el baile de bienvenida, es un estrés familiar mas con el que tengo que lidiar. Observo el cielo por unos minutos, perdiéndome en las nubes y los colores. Logro relajarme y despejar mi mente pero algo interrumpe mi tranquilidad.
Mi teléfono vibra en mi bolsillo, lo saco maldiciendo a la persona que me está molestando en mis pocos minutos de paz. La pantalla se ilumina con el nombre de Cirina en el, mi dolor de cabeza vuelve enseguida, esa es otra que está obsesionada con la "Gala" de mis padres.

Respiro profundo y contesto.

—Asti, ¿estás ahí?— El apodo que usa me dan ganas de vomitar y tomo todas mis fuerzas para no gritarle.

—Dime—. Me levanto respondiendo.

—Dijiste que me recogerías en el centro comercial, ¿recuerdas? estoy con las chicas— Me toco la sien, Saliendo de las gradas— Creí que querías ver el vestido que elegí para mañana.

—Mándame la ubicación por mensaje.— Camino hacia mi auto y corto la llamada.

«ya le cortarás la garganta» Me digo a mi mismo. Llego al centro comercial y me estaciono en los puestos exclusivos para los miembros de la realeza. Me coloco la capucha de mi sudadera y un tapabocas, veo de reojo a mis guardaespaldas y me adentro al centro comercial llamando a Cirina.

—¿En donde estas?—Pregunto en lo que atiende el teléfono.

—Estoy en el café de arriba, ¿puedes ayudarme con las bolsas?

Dios la odio, solo quiere presumir delante de sus "amigas". Voy hasta el café y las veo sentadas en una de las mesas del fondo. No quieren llamar la atención, pero es algo que no pueden, todas llaman mucho la atención.

Camino hacia ellas con seguridad, Cirina está sentada dándome la espalda, así que no ve cuando llego, por otro lado todas voltean a verme menos una, que está sentada al frente de Cirina mirando su taza de café con una sonrisa. Lleva su taza hasta sus labios levantando la mirada. Una corriente eléctrica me recorre la espalda y brazos cuando los posa en mi.

Quiero sostenerle la mirada pero es tan pesada, tiene algo que no se que es y me hace correrla a otro lado, disimulo saludando a todas mientras Cirina empieza a despedirse.

Tomo las bolsas que trae y escucho a las demás suspirar. Me doy la vuelta antes de darle un último vistazo a la chica nueva.
Algo con ella no me da buena espina.
Salimos del centro comercial y apenas estamos solos lanzo las bolsas al piso.

Entro al carro y cierro de un portazo.
Veo a Cirina recoger las bolsas afuera y le toco la bocina para que se apure, entra al carro hecha un mar de lagrimas.

—¿Como puedes ser tan idiota?

Aprieto mis manos al volante.

—Que sea la última vez que me llamas para hacer semejante ridiculez—La encaro—. Tu y yo, ya no estamos juntos, entiéndelo de una puta vez.

Esta vez si le grito, porque ya no tengo cabeza para sus niñadas. La escucho sollozar y me hierve mas la sangre.

—Si no te callas te bajaré aquí mismo.

—No creo que se vea bien como titulo de la primera plana.

—Tampoco creo que "Cirina Fournier sigue acosando al príncipe" se vea bien.