25: Te va a odiar para toda su vida

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-Tynan Marciol

Me hierve la sangre de tan solo verlo ahí, disfrutando de algo que en realidad es mío.

Detesto ver como la hace suya en aquel estúpido balcón cuando yo se lo podría hacer en la punta de la pirámide del faraón de Egipto.

—Jefe, los francotiradores los tienen en la mira. Cuando usted ordene soltaremos fuego—la voz de mi compañero resonaba en el diminuto audífono que tenía en mi oído.

—Préndanlos fuegos a los hijos de puta—la lluvia de disparos y bombas se oyó hasta la lejanía, y el fuego empezó a asomarse por los arboles— Bun venit, cățea.

Vi como corrían agarrados de la mano hacia la casa donde estaba toda la familia y sonreí de victoria, por fin pude devolvérselo.

— ¡NO! —su grito inundo cada lugar vacío de este estúpido bosque donde se ocultaban.

Sigilosamente desde la oscuridad de los arboles logre ver su cuerpo arrodillado en la tierra mojada, llorando y gritando, pidiendo que por favor sea mentira.

Por otro lado su estúpido amorío estaba tratando de consolarla abrazándola, pero ella no se lo permitía, cada vez que él se acercaba ella lo empujaba gritándole que quería estar sola.

—Voy a entrar—su voz firme y decidida me sorprendió.

— ¡Grecia, ni se te ocurra! —tarde compañero, ya se le ocurrió y no la vas a poder frenar.

Desde las lejanías podía observar como luchaba para poder abrir la puerta que estaba atorada, pero decidió entrar por la ventana que se encontraba al lado de ella.

Me dolió ver como su piel era cortada por todos los vidrios que sobresalían de dicha ventana, pero la conozco, nunca se da por vencida cuando se trata de los que ama.

—Señor, hayamos tres sobrevivientes inconscientes... ¿Qué hacemos? —nuevamente oí esa voz en mi aparato.

—Llévenlos a la CDT, nadie lo encontrara allí—mi mirada seguía aun fija en el estúpido que estaba parado, mirando toda la escena tranquilamente, mientras pateaba una que otra piedra con las manos en los bolsillos.

Se escuchó un grito, que hizo que mi cuerpo se erizara y reaccionara corriendo hacia la puerta trasera, encontrándome con la peor de las escenas. Sangre, un cuerpo, ella tirada entre el humo y las llamas, llorando por aquella persona. Su mirada estaba inundada de sentimientos, su voz apenas se oía y la tos empezó a asomarse.

—No te vayas, aun no te devolví tu jarrón—sus manos sostenían la cabeza desfallecida —, e-escúchame por favor, e-eres la única que me entendía... po-por favor te lo suplico—su voz estaba rota y se sentía cada nudo—, ma-mami...

—Te va a odiar para toda su vida, ¿lo tienes claro? — mi mano estaba sobre el hombro de mi mejor amigo  dándole ánimos a seguir con todo.

Ambos nos alejamos de aquella situación, él por su lado y yo por el mío. Haciendo que nos odiábamos.

++++

Sin comentarios, estoy rota. Es corto pero doloroso este capítulo.

Momento traducción:

· bun venit, cățea: bienvenida, perra.

Nos vemos en el siguiente capítulo, los quiero mucho mocosos<3

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-𝓜.𝓖.𝓣


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