Tomi tomó una botella de lubricante y comenzó a acariciar el agujero de Rodri, mientras observaba cada detalle de su cuerpo, su piel blanca, los bellos de sus piernas, los músculos de sus muslos, su abdomen firme y marcado, sus hombros anchos, su cuello, su mandíbula tensada y sus grandes y carnosos labios brillantes y entreabiertos. Metió su dedo dentro de él, se sentía apretado y caliente, lo movió y Rodri sintió una oleada de placer recorrer todo su cuerpo, tapó su boca con la intensión de frenar los intensos gemidos que querían salir disparados de él.
_ ¿Te gusta?_ Preguntó, con un tono dulce y protector, había algo en esta situación que lo emocionaba por dentro y no era solo el echo de tener sexo con Rodri, si no, el saber que esta era su primera vez, que el era el primero en tocarlo, que el iba a ser el primero en entrar dentro de él.
_Si_ Gimió, sintiéndose pequeño, vulnerable, pero a la vez, aunque sonara algo tonto, libre y confundido_ Me encanta_ Susurró, mientras recibía la mirada intensa del mayor que rápidamente metió un dedo más y comenzó a bombear en su interior_ Dios, me encanta, besame por favor_ Rogó. Tomi le sonrió y metió su lengua en su boca en un beso desesperado y profundo, la necesidad de contacto de Rodrigo lo estaba matando, su miembro le dolía y su mente se nublaba.
_ Dios_ Jadeó, mordiendo el labio inferior del menor_ ¿Puedo?_ Apoyó su frente en la frente de Rodri, suspirando, desesperado_ Necesito... ¿Puedo?... Dios...
_ Si, por favor...cogeme_ Susurró.La sensación de tener a Tomi adentro suyo no fue extraña, como se imaginaba, ni incomoda, era más parecido a querer fundirse con el en uno solo cada vez que el movía sus caderas y golpeaba su próstata. Rodri no podía ocultar sus gemidos y aunque sabía que la familia de Tomás se encontraba en la casa, no podía ni quería censurarse. Tomó los hombros del mayor y lo atrajo hacia sí, con la necesidad de sentirlo más cerca y lo abrazó con fuerza, hundiendo su cara en su cuello y gimiendo en su piel.
_Bebé, tranquilo_ Susurró entre gemidos, mientras lo abrazaba sin dejar de moverse dentro de él_ Nos van a escuchar.
_N-no no p-puedo ca callarme_ Tartamudeo y respiró el aroma de su piel, mezcla de sudor y perfume, estaba tan cerca de terminar y sabía que el también, porque sus músculos se estaban tensando mientras se obligaba a follarlo más despacio, dios, necesitaba con todas sus fuerzas que Tomi perdiera el control, asique enterró las uñas en su espalda y mordió su hombro, con tanta fuerza, que Tomás jadeo y echando la cabeza hacia atrás comenzó a cogerlo con fuerza, entrando y saliendo brutalmente de él, dejando moretones en el agarre de las caderas del menor. Toda la habitación se llenó de gemidos, gruñidos y orgasmos.
Ojalá estuviéramos así toda la vida
Tomi se recostó encima de su cuerpo y comenzó a besar su mejilla.
_Que hijo de puta que sos ¿Con qué cara miro a mi vieja ahora?_ Se quejo, intentando sonar moelsto pero su sonrisa de satisfaccion lo delataba. Rodri se rió y sus mejillas se enrojecieron.
_perdón, es que te veías tan...No pude evitarlo.
_Quien diría que tendría a Carrera en mi cama alguna vez_ Bromeó y el oji verde le hizo una llave de cabeza.
_Ey_ Dijo apretandolo y riendose_ Quien diría que cumpliría el sueño de todo gay promedio... digo_ Lo soltó y le hizo una sonrisa pícara_ El de cojerme a Tomi tu casitaAaAa_ Tarareo. Tomi rodeó los ojos y lo empujó de forma amistosa.
_Me parece que yo te cogí a vos.
_Shhh_ Dijo rápidamente, rompiendo la conexión y levantándose de la cama para dirigirse hacia el baño_ Vamos a merendar.Los dos días siguientes fueron iguales, las risas, el sexo, de nuevo las risas, de nuevo el sexo, charlas íntimas o tontas, sexo otra vez y así. Rodri no se lo dijo, pero realmente no quería irse, al igual que Tomás, que quería correr detrás de él cuando lo vio partir en el aeropuerto, abrazarlo y decirle que se quedara o que se iría con el, pero ninguno hizo y dijo nada. Sólo se abrazaron, frente a un montón de personas y se miraron con el deseo de darse un último beso hasta quien sabe cuando, pero había gente y no tenía sentido exponerse así, varias personas los reconocieron cuando llegaron y les pidieron fotos, asi que ambos acordaron de forma implícita que lo mejor era guardar ese fin de semana en sus mentes y mantener el cálido recuerdo de sus cuerpos unidos en secreto.
_Escribime cuando llegues_ Le dijo, pero Rodri no le escribió, al principio pensó que era por él cansancio, por él trabajo o porqué simplemente estaba ocupado, hasta que pasaron tres días y entendió, que quizás lo que había sucedido había sido un error o que tal vez Rodri estaba arrepentido, sea cual fuera la razón, a Tomi le dolió, pero no le escribió.
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Nuestro Secreto
FanfictionEn una visita amistosa se despiertan sentimientos nuevos entre ambos chicos...