Mi madre me obligó a despertarme desde la seis de la mañana y ya me estoy duchando, cepillo mis dientes y salgo.
Aliso mi cabello en el espejo y me hago una coleta, revivo mi cara con muy poco maquillaje, mamá ya tenía mi ropa en la cama y cuenta con una falda larga blanca y una camisa negra, me la coloco agregando los zapatos.
Salgo afuera cuando mi padre me llama, el me dejara en la empresa y luego irá a trabajar.
Desayuno rápido y tomo el bolso y mi teléfono antes de abordar el auto, papá empieza el trayecto a la empresa y en el camino me recuerda todas las cosas que tengo que hacer y que no.
El edificio se cierne sobre mi, es de quince pisos enormes con solo ventanas, afuera las personas entran y salen .
_Recuerda caminar con la espalda recta y no faltarle el respeto a nadie.
_Si.
_Si ¿Que?.
_Si señor papá_ le doy un beso en la mejilla y como me enseñaron camino hacia adentro.
El aire acondicionado me recibe y personas con trajes y mujeres con faldas de encaje cortas y camisas blancas se mueven de aquí para allá.
Me acerco a una de las chicas en la recepción y le hablo sobre como aceptaron mi currículum.
_El señor Brant la espera hace unos minutos, camina recto hacia allá y toma el elevador hasta el último piso, camina por los pasillos y al final dobla a la derecha, encontrarás una puerta de madera y toca especialmente dos veces, al señor le gusta la puntualidad y que hagan todo bien.
La chica me sonríe y le agradezco.
_Puedes pedirme ayuda con lo que sea.
Vuelvo agradecer y justo como dijo camino recto hasta ver el elevador, marco el último piso y cuando se detiene salgo.
Tomo las instrucciones de la chica y en este piso es más elegante que abajo, caminas sobre un piso de losetas blancas y ventanas polarizadas por todos lados. Encuentro la puerta de madera y como me dijeron toco dos veces.
Escucho esa voz gruesa con un pase así como la de vin Diesel.
Abro la puerta lentamente y paso adelante, hay un escritorio y montón de libros, todo está decorado en cristal y un ventanal enorme dando una perfecta vista a la cuidad.
Un hombre enorme de tez blanca y barba recortada está detrás del escritorio, luce un suéter de lana marrón dándole un toque adorable pero su cara no.
_Llegas cinco minutos tarde.
_Lo siento señor estaba desayunando.
_No me importa lo que hagas, me importa que llegues a tiempo.
_Lo siento.
Bajo la cabeza avergonzada, genial Eliza arruinaste tu primer día.
_Levanta la cabeza.
Hago caso observando sus ojos.
_Nunca hagas eso y no delante de mi.
_Si señor.
_Escucha, lo que pase aquí no sale de aquí, debes apagar las cámaras de mi oficina cuando veas a las mujeres que no tengan uniforme, tienes que traerme café a las nueve de la mañana y un trozo de pastel de chocolate, ¿Queda claro?.
_Si señor_ me doy la vuelta para irme pero me llama.
_¿Te he dado el permiso de irte?.
_No señor.
_Puedes irte.
Obedezco saliendo de la habitación, suelto todo el aire que tenía contenido y vuelvo a bajar al primer piso, pido café un trozo de pastel en la cafetería y vuelvo.
_Tu lugar de trabajo está fuera de la oficina del señor Brant, acomodate como quieras, es muy acojedor.
_En verdad muchas gracias.
Vuelvo arriba nuevamente y toco la puerta como me indicaron, escucho el pase y entro con el pedido.
_¿Sabes cocinar?.
_Si señor.
_No quiero pastel de la cafetería, al final del pasillo hay una puerta que indica la cocina, tienes que hacer todo por ti misma.
_Como diga señor ¿Me puedo retirar?.
_¿Que traes puesto?.
_Pues ropa señor.
_En tu oficina tienes ropa en los estantes, quítate eso que me da jaqueca.
_Con todo respeto señor pero no puedo quitarme nada ya que mi madre no me lo permite.
_¿Me ves cara de que me importa? Has lo que te pido y listo, ve y quítate esa mierda.
Asiento saliendo por la puerta, sigo las indicaciones y abro la puerta, la oficina es un poco más pequeña que la del señor Brant.
Cuenta con un escritorio, plasma y varias TV más que presentan las cámaras y un baño. Busco en los estantes la ropa y no me sorprendo mirando todo. Marco el número de mi madre y al tercer pitido responde.
_Hola Elizabeth como la estás pasando?.
_Muy bien pero la ropa cuenta con una falda hasta la rodilla y una camisa blanca, panties media y zapatos con tacón.
_Si ese es el uniforme úsalo cuando estés allá y te lo quitas aquí.
_Esta bien mamá.
Cuelgo la llamada y me dirijo al baño, me deshago de mi ropa y me miro en el espejo de cuerpo completo en el baño.
En realidad no me veo mal, tengo la cintura fina, la piel blanca bien cuidada y sin un moretón, eso es lo que ocultó bajo las faldas largas.
Empiezo por colocarme la camisa que me queda ajustada gracias a mis senos, no son tan grandes pero si lo suficiente para que la camisa se levante por la parte delantera.
Ajusto la falda y entro la camisa por dentro de ella, subo las mallas negras y me coloco los zapatos con tacones.
Me veo.... Bien.
La falda resalta mi trasero y todo lo que mi madre quería ocultar está saliendo a la luz.
_Señorita Elizabeth ¿sigue viva?.
_Si señor disculpe me estaba colocando el uniforme.
_Ven a mi oficina.
Hago caso saliendo y cerrando la puerta, mis tacones resuenan en el piso y toco dos veces antes de entrar.
Otro hombre está sentado en los sillones, tiene el cabello largo y la barba más larga que mi jefe.
Ambos me miran como si fuera de otro universo y me analizan de arriba hacia abajo.
Se quedan callados solo mirándome y me pregunto que pasa.
_Sañorita Elizabeth el es mi hermano Brandon y está de visita para poder conocerla.
Brandon se levanta y mi corazón se acelera cuando se acerca a mi, lleva sus manos a mi nuca y desata la liga de mi cabello, mi pelo cae por mis hombros y el empieza a peinarlo con las manos.
Se hace a un lado acompañándome al espejo y sonrío al ver lo hermosa que me veo así.
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Saga Mafiosos #1 La Secretaria Del Mafioso.
ActionMi vida era normal, muy normal diría yo. Tenía unos padres estrictos pero eran buenos. Conseguí un trabajo y ese fue el peor de los errores que hice en toda mi vida. No sabía que allá yo iba a ser la secretaria de un mafioso ni que sería Medusa, la...