_¿A qué te dedicas?.
_¿Acaso no leyeron mi currículum?.
_No nos interesa_ responden ambos al mismo tiempo luego de tomar asiento en los sillones.
_Pues, soy Elizabeth Johns Walker, tengo veinte años, se mucho sobre computadoras, se hablar cinco idiomas, francés, inglés, ruso, un poco de chino y español y los demás los estoy aprendiendo.
_Osea que sabes de todo un poco.
_Si señor Brandon.
_Bien, ¿Puedes traerme un café?.
_Por supuesto.
_A mi tráeme un trozo de pastel.
_Como digan.
Me levanto del sillón y camino hacia la puerta, será fácil para mí adaptarme ya que mi mamá me preparo para todo.
Salgo de la oficina y justo como me indicaron llegó a la cocina, todo se ve excelente y lo amo por qué la cocina de mamá es justo así. La alacena está llena de comida y todo lo que necesito para el pastel.
Agrego agua y el café a la cafetera, en unos minutos ya está listo y se lo llevó a mi jefe indicando que me dé más tiempo para el pastel.
Agrego los ingredientes y revuelvo bien, también agrego unas chispas de chocolate y más azúcar.
Lo agrego en el molde y lo llevo al horno. En verdad me siento muy feliz por qué al fin pude conseguir un trabajo y al fin vivir sola.
Ese es el trato de mi familia, me ayudan a conseguir trabajo y el primer sueldo me mudo, yo me sentiría bien viviendo sola ya que hay algunas cosas que quisiera hacer y mis padres no me lo permiten.
Saco el pastel cuando está listo y lo saco del molde, agrego unas cuantas chispas de chocolate más y cortó una rebanada, en una bandeja llevo más café con tazas y el pastel completo con una rebanada en otro plato.
Toco dos veces y cuando escucho el pase abro la puerta.
_Si como huele sabe.
Brandon hace una seña de chuparse los dedos y sonrío por lo bajo dejando la bandeja en el escritorio.
Le doy la rebanada de pastel a mi jefe y por lo serio que se pone ya me dio miedo, le doy el cubierto y lo recibe dudoso antes de llevarse el pastel a la boca.
_Yo quiero de ese pastel.
_Disculpe no sabía, iré por un cuchillo.
_Yo te acompaño.
Ambos caminamos saliendo de la oficina.
_A mi hermano le encantó ese pastel.
_¿Enserio, como sabe?.
_Conozco a mi hermano como si fuera yo mismo.
Llegamos a la cocina y le extiendo el cuchillo.
_Limpiare este desastre señor.
_¿Sabías que hay servidumbre para eso?.
Me dice cuando toma el cuchillo.
_No cuando yo esté aquí, me gusta distraerme.
_Esta bien pero trata de que mi hermano no te vea.
Asiento y se va, limpio la cocina justo como estaba antes, lavo los platos y la isla de la cocina.
Para cuando termino me adentro en mi oficina y también la ordenó a mi gusto, a las una de la tarde muero de hambre y bajo a la cafetería para comprar mi almuerzo.
Es más bien un restaurante pero no es tan grande, me siento y la mesera me da la carpeta, ordenó un pollo a la plancha con tostones.
Minutos después me sirven mi comida y agradezco. Miro por la ventana y veo al señor Brandon salir de la empresa con una hacha en la mano, hago un gesto de no saber por qué carga con eso.
Lo ignoro y empiezo a comer, en verdad me parece muy extraño que ese chico ande con una hacha, vuelvo a mirar y veo que aborda un McLaren, abro los ojos en exageración al ver tal vehículo ya que cuesta un riñón.
Vuelvo mi vista a mi plato y cuando termino de comer pago, salgo del restaurante y me adentro en la empresa, camino por los pasillos aprendidos y me adentro en mi oficina.
Acomode el escritorio más cerca del ventanal, las plantas las puse al rededor y los estantes con libros a cada lado de las paredes y la máquina de imprimir a un lado de los estantes, se ve acojedor y se que desde ahora será mi nuevo hogar.
Veo en las cámaras una mujer rubia que no lleva uniforme y justo como me pidió el señor Brant apago las cámaras y me dispongo a ver una peli hasta que el señor me necesite en algo.
Pasada las horas el señor me llama y camino tocando su puerta, la abro cuando me dice que pase y me detengo en su frente preguntando que necesita, miro la mesa del escritorio y veo el plato del pastel terminado sin una pizca.
_Te enviarán algunos archivos que quiero que imprimas y me lo des para firmar.
_Perfecto señor, ¿Cuando lo envían?.
Mira su reloj de oro blanco y vuelve su vista a mi.
_En dos minutos, los quiero para hoy.
_Como ordene_ recojo todos los utensilios del escritorio_ permiso para retirarme.
_Puedes irte.
Me doy la vuelta y juro que siento su mirada en mi espalda.
Salgo de la oficina y limpio los utensilios en la cocina, vuelvo a mi oficina y justo como me dijo el señor me enviaron los archivos.
Los ordenó y los imprimo, acomodo los papeles con mis manos y buscando un folder los agrego todos allí.
Salgo de mi oficina y toco dos veces antes de entrar en la del señor Brant.
_Aqui están los archivos que me pidió señor.
Me extiende la mano y se los paso, los firma todos antes de volver a pasarmelos.
_Entregalos en la recepción y dile que los envíen a Italia.
_Como ordene, permiso para retirarme.
_Puedes irte.
Hago lo que me pide y se los entrego a la chica que me ayudó está mañana.
Le informo al señor Brant que sus papeles fueron entregados desde mi oficina.
_Tienes dos horas libres y al final de la tarde trabajas una más y luego te vas a tu casa.
_Es perfecto señor, muchas gracias.
_No me agradezcas.
Sonrío sin querer y dejo el teléfono de lado.
Las dos horas pasaron rápido y en la última que me quedaba no trabaje mucho, a las siete de la noche me quité la ropa y me coloque la mía y luego ya estaba rumbó a mi casa en un taxi.
La cena ya estaba preparada cuando llegué y saludando a todos me ducho y mientras ceno mi familia me pregunta cómo me fue, le conté mi día y luego me fui a dormir.
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Saga Mafiosos #1 La Secretaria Del Mafioso.
ActionMi vida era normal, muy normal diría yo. Tenía unos padres estrictos pero eran buenos. Conseguí un trabajo y ese fue el peor de los errores que hice en toda mi vida. No sabía que allá yo iba a ser la secretaria de un mafioso ni que sería Medusa, la...