Mi Alfa (Rusmex)

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La perdió,  lo supo cuándo empezaron a salir los paramédicos con la cabeza gacha.

Nadie le dirigía la palabra o la mirada, un doctor se acercó y le miró con una pequeña mueca, ya sabía que le diría, lo sentía en su pecho y le dolía saber que por fin tendría razón en algo tan malo.

Caminó junto al doctor hasta la "guardería" dónde miró cunas con pequeños dormidos, miró al doctor y esté le invitó a pasar de manera silenciosa.

Aceptó con el corazón en la mano y entró mirando entré aterrado y dolido a todos aquéllos bebés que si lograrían tener una mamá.

Miró a su alrededor tratando de buscar al cachorro de su amiga, aún cuándo no sabía como era.

El doctor le guío casi hasta la esquina de la habitación y España se quedó estático al ver a un cachorro envuelto en una sábana blanca sintiendo una corriente por su cuerpo en cuánto el doctor tomó en sus manos aquél pequeño.

Como cuidaría de aquél pequeño?

Lo tomó en brazos y España se mordió el labio buscando no llorar desconsolado al saber que aquéllo era lo único qué le quedaba de su gran amiga y amor.

Lo abrazo con cuidado y suspiró entrecortado.

Salió juntó al doctor hasta qué llegaron a una sala vacía dónde había unas cuantas sillas, España se sentó y el doctor empezó a hablarle y a explicarle todo lo qué había pasado y lo qué podía hacer para poder quedarse con aquél cachorro qué aunque no quisiera el sería su única familia.

España buscó un mejor trabajó con el cuál logró darle una vida aceptable a "su" cachorro quién por mala suerte era muy enfermizo lo cuál le contaba una fortuna al español quién aveces lloraba al no saber que hacer para mantener a aquél bebé.

Aunque tampoco quería dejarlo, cómo dejó a su bebé Perú o como dejó ir a argentina o como chile... Ya no quería quedarse sin hijos, ya no quería ser un mal padre.

Por lo qué cada qué terminaba de llorar buscaba fuerzas para poder hacer algo mejor para su cachorro, solo era el y su cachorro contra el mundo, solo él tratando de darle la mejor vida y hacer sentir orgullosa a su amiga por no dejar a su bebé solo.

Fue de hotel en hotel, de casa hogar en casa hogar, no dejaría qué todas sus desgracias arruinaran la vida de aquel cachorrito qué empezaba a crecer con el tiempo.

Vamos crío... Abre la boca

Habló nervioso acariciando las mejillas del cachorro quién veía indeciso la cuchara qué le acercaba el español.

Está rico, lo prometo

Habló cariñoso y apretó ligeramente su mejilla haciendo qué el cachorro se quejara y abriera la boca.

España sonrió victorioso y río al ver la carita del mexicano quién abrió los ojos un poco más y empezó a hacer ruiditos desesperados por más comida.

Estaba alegre de qué su cachorro ya comiera, porque eso de comprar tanta leche y biberones era terrible, sumamente caro, por lo que agradecía enormemente que su bebé haya crecido y le gustará aquélla papilla.

Aquél cachorro con el tiempo crecía más y más y el no sabía que hacer, nunca antes había cuidado a un bebé tanto tiempo.

Cargó a aquel cachorro el cuál empezó a llorar al no poder seguir en el suelo.

No llores crío, papá España te va a llevar a un lugar mejor, acá aquí hay más bebés, seguramente podrás hacer amigos... Mejor que yo

Lo llevó a aquélla guardería de la casa hogar y sonrió al ver qué lo dejaron pasar, acomodó a su cachorro dentro de una alberca con peluches juntó a otros bebes que también gateaban, sonrió al verlo tranquilo y alegré de su logró se alejó a buscar asiento, en cuánto lo encontró y se acostó sintió como rápidamente el sueño llegó, ya iba a quedar totalmente dormido cuándo escuchó el llanto de su cachorro, se levantó rápido y corrió a verlo.

Qué pasó? Ven, ven, no llores

Lo cargó con cuidado y rápidamente el mexicano dejó de llorar, España le miró con una pequeña mueca y lo regresó mirando como esté empezaba a gatear y a buscar algún peluche bonito para sentarse y mirar a España para después reír y mover alegré aquél peluche para volver a gatear con el peluche en mano.

España se sentó a un lado y al ver qué su cachorro le veía cada cierto tiempo suspiró, era evidente que su bebé no lo dejaría irse.

Una omega le miró a lo lejos y se acercó para llevarle una silla cómoda.

No te dejá irte?

No, no entiendo porque

Habló cansado el Alfa acomodándose en la silla para después mirarle y sonreír decaído.

Gracias

No es nada, soy Ali, trabajó aquí, por lo que te digo como psicóloga que la dependencia de tú bebé no es muy sana, debés soltarlo un poco, dónde está su mami?

...ya mo está...

La omega hizo una mueca y acarició la espalda del español entendiendo mucho.

Fue... Hace poco?

No, fue desde qué mex nació, ella falleció... Y me dejó a cargó de él.

Habló aún algo decaído, pero al ver al cachorro mirarle y soltar una risita para acercarse a el sonrió inconciente y estiró su mano para acariciar el cabello del cachorro quien empezó a reír.

Entiendo, bien, yo lo lamento, pero me alegra saber que vas bien, no todos pueden con ello, ésto es una gran responsabilidad y tú vas muy bien, te admiró

Aquéllas palabras le habían calado muy dentro, realmente lo estaba haciendo bien? Miró a la omega y está sonrió para darle pequeñas palmadas en la espalda.

Solo te pido qué empieces a soltar un poco a tu cachorro, es necesario, puedes crearle una gran dependencia

Entiendo, nuevamente gracias

No hay de que

España suspiró y miró como su cachorro volvía a jugar con los demás bebés ahí, porque su bebé era más pequeño que los demás?

Hola, como están? Perdón por tardar tanto en actualizar, pero llegaron muchas cosas y pasarón, pensé y demás, pero acá andamos otra vez!  Espero les haya gustado la historia.