1 COMPAÑEROS

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Era temprano por la mañana y como de costumbre Xiao Zhan era el primero en llegar a la oficina, para él, mientras menos personas "vivas" estuvieran cerca de él mejor, no era que las odiara, pero... no, en realidad si, detestaba a las personas, no entendían lo que no eran capaces de ver, pero él, él era diferente, podía ver mas allá de lo que la gente normal puede ver, y por eso tomo la carrera de Medicina Forense, ya que en esta podía hacer uso de su extraño y peculiar talento.

Eran ya las ocho de la mañana y todo el personal del edificio había llegado ya, y con ellos el trabajo del día.

- ¡Buenos días Doctor! - saludó uno de los oficiales que trabajaba indirectamente con el

-Buenos días- respondió Zhan con indiferencia y sin siquiera mirar al joven

- Vamos, ¿por qué estas de malas hoy? - pregunto aquel joven acercándose al mayor que clasificaba la documentación de la autopsia realizada la noche anterior.

-hmm- lo miró fijamente con claro repudio

-Esta bien, esta bien, me voy- dijo deteniéndose en seco ante aquella mirada fulminante- por eso ningún chico te quiere- dijo en un tono burlesco mientras corría fuera de la oficina del mayor, seguido por una grapadora que termino estrellándose en el marco de la puerta.

Se disponía a continuar con su trabajo, pero...

-Creo que esto es tuyo- dijo un oficial que había presenciado lo ocurrido y ahora tenia la grapadora en la mano

-Gracias capitán- respondió tomando la grapadora dando una reverencia- usted...

-Tranquilo se que puede llegar a ser bastante irritante- interrumpió el oficial- el motivo de mi visita es otro- dijo el capitán bastante serio

- Lo escucho- respondió

- Ah... si... - dijo un tanto nervioso, pues conocía la personalidad de Zhan bastante bien, pues se conocían desde hacia tiempo, se podría decir que era el único amigo de Zhan

-Le escucho - dijo confiado en que podría con cualquier prueba que le pusiera

- Bien, él es el sargento Wang y trabajara contigo - dijo mientras hacia pasar a aquel imponente oficial

Al escuchar esto Zhan quedo sin palabras, no podía creer que lo obligaran a trabajar con alguien más, el solo era más que suficiente, no necesitaba de la ayuda de nadie, pero todo eso se fue al caño en cuanto lo vio entrar, el porte de aquel oficial no paso desapercibido, pues como podía ignorar aquellos hermosos y profundos ojos negros, aquella figura que era definida por aquel uniforme que aseguraba a nadie se le veía mejor que a ese joven.

-Zhan... Zhan! – lo llamo su mayor al notarlo perdido en la nada

-ah... ah!, si- respondió intentando salir de aquel trance en el que se sumergió por ver al joven que trabajaría con él.

- Se que no te gusta trabajar con nadie, pero...

-Está bien- interrumpió

-¿Que? - pregunto extrañado, pues esperaba una rotunda negación- ah... bien, los dejare para que se conozcan-dijo un tanto desconcertado

En ese momento, Zhan comenzó a sentirse muy nervioso, no lo entendía, pues no era común en él, pero ahora que estaba a solas con ese joven, no sabía qué hacer.

-Sargento Wang Yi Bo, es un honor conocerlo- se presentó dando un saludo militar, llamando la atención de Zhan

-Un gusto, pero por que el saludo de esa manera?, no es necesario- dijo intentando ocultar los nervios que lo comían vivo

-Cuando me asignan a un compañero, suelo revisar sus antecedentes, y en términos militares es usted mi superior, ya que yo soy un sargento y usted un Mayor- respondió con seguridad

- Bueno, bueno, pero aquí no soy militar, solo soy un medico forense, no es necesario que hagas tanta reverencia, me pone nervioso- dijo mientras continuaba organizando la documentación.

A las ocho de la mañana que el Sargento Wang Yi Bo esperaba al capitán, quien, le presentaría al forense con el que haría equipo en el caso que le habían asignado, se imaginaba a un doctor un tanto mayor, ya que había escuchado que era bastante malhumorado, que no toleraba a las personas, y en su investigación, solo aparecían sus logros y méritos, pero información como edad o una fotografía no estaban. Pero cuando lo conoció era todo lo contrario, era un hombre joven, siendo sinceros bastante guapo, y un poco extraño, pues antes de entrar en su oficina pudo ver como le lanzaba una grapadora a uno de sus compañeros, pero con él, con él fue diferente, escucho decir al capitán que no le gustaba trabajar con nadie, pero con él, simplemente acepto.

-Xiao Zhan que clase de persona eres? - se preguntó así mismo

A TRAVÉS DE TU MIRADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora