14 DESESPERO

103 18 2
                                    

2:30 a.m.

-Yibo, cielo, ¿estás bien? - respondió la llamada un tanto extrañado por la hora

-vaya!! No sabia que eras tan dulce- respondió una voz al otro lado de la línea, que a Zhan le heló la sangre

-quien eres, y porque tienes el teléfono de Yibo? – estaba molesto, pero no podía ocultar su preocupación

- oh, vamos tu sabes quien soy, o al menos lo sabias hace cuatro años. Parece que mis mensajeros no sirvieron de mucho, así que recurrir a otros métodos- se expresaba de manera burlona

-QUIEN DIABLOS ERES Y DONDE ESTA YIBO??- su paciencia se estaba agotando, y su nerviosismo y preocupación era más evidente

- ahí esta el Zhan que conozco, bien, ¿Por qué no vienes a buscarlo? Estoy seguro de que cuando te diga el lugar en donde esta... estamos, recordaras incluso quien soy- decía seguro de sí- sabes, será más divertido si adivinas, solo te diré que, aquí, me rompiste el corazón. ¡Ah!, y no traigas refuerzos, o es que ¿acaso un mayor como tú, no puede hacerse cargo de salvar a su sargento? -En ese momento la llamada termino. Solo con esa frase, Zhan supo de quien se trataba.

Lu Xing Yu, siempre quiso estar con Zhan desde que estudiaban en el instituto, pero siempre recibió una negativa por parte de él. Sin embargo, Xing Yu siempre había sido un hombre muy persistente, y lograba lo que quería, incluso logro salir con Zhan, quien después de tantos años de insistencia aceptó solo para que le dejara en paz, pero no contaba con la obsesión enfermiza que tenia Xing Yu hacia él. Y fue lo que lo obligó a dejar Jiangsu por dos años, hasta que por motivos de trabajo le asignaron nuevamente a ese lugar, sin imaginarse que Yu seguía esperando por él.

Zhan sabia perfectamente a que lugar ir, un viejo teatro, en el que solían jugar de niños, y en el que le dijo que se marcharía. Sabía que Yu era capas de cualquier cosa, así que después de tanto tiempo, tomo el arma que aun guarda en el ultimo cajón de su armario, salió a la calle y tomo un taxi. Mientras iba en camino una video llamada procedente del numero de Yibo entro en su teléfono.

-vamos, date prisa, no le queda mucho tiempo a tu sargento- decía entre risas mientras le mostraba a Yibo completamente inconsciente y atado dentro de una vitrina en la que no dejaba de caer agua, la cual ya llegaba a su cintura.

-pagaras por esto- era lo único que podía decirle en ese momento, pues en realidad lo que quería era matarlo

-tranquilo, el estará bien, claro solo si llegas a tiempo- rio nuevamente y finalizo la llamada.

2:50 a.m.

Al fin había llegado a aquel teatro y en cuanto bajo de aquel taxi corrió hacia adentro para buscarlos.

Mientras tanto, Yibo comenzaba a despertar un tanto aturdido.

-oh, despertaste- decía con indiferencia

-quien eres y por qué me tienes aquí? - pregunto intentando aclarar su vista para identificar y reconocer lo que pasaba

-tranquilo, lo sabrás a su tiempo- decía mientras lo sedaba nuevamente a través de una cánula intravenosa- o tal vez no- sonrió al ver que Yibo caía en sueño nuevamente.

Por fin los encontró, y no pudo evitar arrepentirse por no llamarle en cuanto supo de su salida repentina, tal vez si lo hubiera hecho, esto no habría pasado, y no podía sacar de su cabeza, esa imagen de verlo aun dormido antes de irse.

-Zhan!! Querido ya estas aquí- exclamo Xing Yu, al darse cuenta de la presencia de Zhan

-que es lo que quieres Yu, por que no puedes dejarme en paz? Yibo no tiene nada que ver con lo nuestro- decía en voz serena mientras avanzaba lentamente, pues no quería alterar a Yu.

A TRAVÉS DE TU MIRADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora