𝐵𝓁𝒶𝒸𝓀 𝒶𝓃𝒹 𝓎𝑒𝓁𝓁𝑜𝓌

7.

Estaba amaneciendo, yo seguía en la cama del hotel sin ganas de levantarme, sabía que sería la última vez en la que dormiría en una cama decente por las próximas semanas hasta pasar por ciudades o aldeas.

Ayer me despedí de Jae-Ha, es increíble que en 1 día me haya caído bien esa persona, se podría decir que lo juzgue un poco mal al principio.
Prepare mi gran mochila y comencé mi viaje, estaba muy emocionada casi será un año desde que vi a Hak y al viejo. Extrañaba las peleas y bromas de los chicos y mucho mas los cálidos abrazos de los niños. Me di cuenta de que este año había conocido a personas que llenaban una parte de mi corazón, eso me hacia muy feliz.

Los vería en 4 semanas y si mi suerte me acompaña no tendría ningún problema por el camino.

Pasaría por la capital del reino, Kouka. Nunca había visto el castillo de cerca y me daba mucha curiosidad ver a la princesa y al rey. No tenían muy buena fama en las afueras del reino y eso era mas que claro por las aldeas pobres.

Yo no podía juzgar a nadie sin conocerlo, me imaginó que alguna razón habría por el descuido de las afueras así que no podia culpar a nadie, solo a la gente corrupta.

Ya habían pasado 3 semanas, iba entrenando y controlando los poderes. Sabia que me había vuelto mas fuerte sin los poderes y cuando los aplicaba a mis ataques era el doble de daño, así que estaba orgullosa de mis avances.

Algo que me inquietaba era el no poder quitarme la pulsera, sabía que mis poderes se activarían al paso del tiempo pero quería saber cuando y como.

Pronto llegaría al castillo, no podía entrar pero lo quería observar desde las montañas. De repente me acordé de Hak, me contó que el era el guardaespaldas de la princesa una noche cuando conversábamos. Tenía la esperanza de poder verlo al menos desde lejos pero después de un rato observando no pude ver nada.

Una cosa que me llamó la atención fue ver el cabello de la princesa, era hermoso y largo. Su piel no tenia ninguna herida y daba un poco de envida, comparada con la mía la suya era como la de un bebe.

Logre visualizar comida y me entro mucha hambre. Me adentre un poco mas al bosque y cocine algunas plantas comestibles, siempre diré que la comida de Yoon es la mejor ya que la mía era muy sosa.

Seguí caminando, y para llegar mas pronto a la Tribu del Viento decidí usar la rapidez del dragón. Era muy rápida sin el poder pero quería llegar ese mismo día así que decidí usarlo.

Unas horas mas tarde

LLEGUEE! Quería abalanzarme hacia mis amigos pero los vi durmiendo en la entrada.

- Tae-Woo, Han-Dae.. no se supone que debéis de estar vigilando la entrada? - les dije con voz de enfado para asustarlos un poco.

- Perdón señor no volverá a repetirse! - dijeron los dos al mismo tiempo

- Señor?

- T/N! Regresaste! - los dos corrieron a abrazarme

- Claro que si! Ya os habíais olvidado de mi o que? -

- No seas tonta, nunca lo haríamos - dijo Han-Dae casi llorando

- Os extrañé muchísimo chicos -

- Y nosotros a ti - dijo Tae-Woo

- Vamos, hay que avisarles a todos! - dijo Han-Dae emocionado.

- Sisi, pero necesito un poco de agua por favor -

Al ir tan rápido me había deshidratado.

- Claro vamos síguenos -

Después de tomar agua y saludar con algunos que pasaban caminando decidieron llevarme con el viejo. Al llegar ellos llamaron a la puerta y salieron corriendo como si tuvieran algo planeado.