Nuestra Primera Mirada

Capítulo 6

Maroon 5 - Payphone ft. Wiz Khalifa

Ayer después de que Erick me dejara en casa, me envió un mensaje deseándome feliz noche y que nos veríamos luego.

El era una buena compañía, así que no me quejaba. Creo que podríamos tener una linda amistad si nos lo proponemos.

—Harries ¿No piensa salir del aula?

Miro a mi alrededor y me doy cuenta de que todos se fueron. Recojo mis cosas lo más rápido que puedo y salgo del salón.

Mi teléfono comienza a sonar y veo que es papá, esto es raro. Él nunca me llama.

—Hola papi. —respondo mientras camino por los pasillos.

—Hola linda ¿puedes venir hoy a casa?

—No estoy segura, tengo algunas cosas que hacer.

—Es por el cumpleaños de Lily.

Ah es por eso, quiere darme dinero para que lo haga todo yo.

—Lily cumple en una semana papá. Puedo ir cualquier otro día. A demás, ella lo va a celebrar en un club.

—Sigue sin convencerme esa idea, pero es su cumpleaños no podemos hacer nada.

—Si. —Ahí es cuando nos quedamos sin tema de conversación.

—¿Qué tal la universidad?

—Todo bien, estoy super ocupada con todo, pero sobrevivo.

—Esa es mi hija, nunca me decepcionas. Te extrañamos por aquí.

—Y yo a ustedes, nos vemos luego. Te amo.

—Te amo. —Cuelgo y vuelvo a centrarme.

Tengo que aprender a manejar, pronto.

No puedo seguir pidiendo taxis cada vez que no me puedan llevar, puede que el dinero no me falte, pero siento que estoy mal gastando.

Llega el taxi y subo.

—¿Hacia dónde se dirige? —Le indico la dirección y automáticamente le envío mi ubicación a mamá.

Eso es algo que hacemos Layla y yo cada vez que estamos en un auto que no es nuestro.

Es lamentable que tengamos que tomar esas medidas, pero no podemos hacer nada para cambiar esta sociedad de mierda.

Llego a mi destino sana y salva y camino hasta llegar a un cafecito muy bonito de la ciudad.

Este es uno de mis lugares favoritos para merendar, la vibra que me transmite es super tranquila y hogareña.

Me siento y rápidamente llega Adam, uno de los que trabajan aquí.

—Hola Claire ¿Lo de siempre?

—Si, gracias.

Asher es el hijo del dueño del lugar. Es un año menor que nosotros y está en la clase de mi querida hermana. Aquí también trabaja Connor.

La verdad es que es un chico lindo: Cabello castaño y ojos del mismo color, con rasgos tiernos y hoyuelos.

—¿Cómo estás? —dice mientras deja una tartaleta de fresa sobre la mesita.

—Bien, muy ocupada útilmente, pero aún no muero de estrés.

—¿Y Layla?

—No se por qué preguntas, si la ves todos los días.

—Es que tampoco me acerco a hablarle. —dice con las orejas rojas.

—Le puedes hablar, no te va a comer.