Corazones dorados

Capítulo 2

Los rayos del Sol iluminan mi habitación por completo y consiguen despertarme de mis sueños. Me despierto y miro al espejo que hay justo en frente de mi cama, me observo, mi pelo castaño claro está despeinado y mis ojos verdes brillan de forma intensa, seguramente sea por el sueño que tuve anoche, otro recuerdo de mi infancia, en éste conversaba con mi abuela sobre los cuentos de hadas, sobre príncipes y princesas, después mi abuela me arropaba y yo me quedaba dormida en mi cama. Todas las noches se repite el mismo sueño, siempre son conversaciones con mi abuela cuando yo era pequeña y nunca he entendido el significado.

Me levanto de la cama y voy al baño, me arreglo rápidamente y me dirijo a la cocina a desayunar. Me hago unas tostadas con mermelada y cojo una manzana de la nevera.

Vivo con mis tres amigos: Alice, Melissa y Ethan. Nos conocemos desde el instituto, ya hace casi diez años. Decidimos vivir juntos hace dos años y por ahora nos va muy bien.

Es extraño que no estén en casa ahora, son sólo las diez de la mañana.
Acabo de desayunar y me voy a trabajar. Trabajo en una librería por ahora es la forma que tengo de pagarme la universidad.

Llego al trabajo y dejo mis cosas sobre el escritorio, básicamente me dedico a buscar los libros que me piden los clientes, es como una biblioteca.

Abren la puerta y entra un chico rubio de ojos azules sonriendo.

-Hola, perdone señorita, estoy buscando un libro.

-Bueno, es lo que se suele buscar en las librerías.

-Sí, es cierto.

Me sonríe y en ese momento me pierdo en el inmenso océano que hay en sus ojos.

-¿Qué libro busca?

-No recuerdo el título.

-Pues va a ser difícil encontrarlo entonces.

Le sonrío y él me devuelve la sonrisa, siento que me he sonrojado, le miro y él también está un poco sonrojado.

-¿Sabe el autor o de qué trata?

-El autor… no, de lo que trata… creo que tampoco.

-¿Realmente ha venido buscando ese libro?

-No.

-Dígame entonces qué libro busca.

-Ninguno en especial.

-¿Quiere que le recomiende alguno?

-Sí, me encantaría que me recomendara alguno, confío en que tenga buen gusto señorita.

-¿De qué género… ficción, romántico, poesía, misterio…?

-Un poco de todo.

-Está bien, miraré a ver si hay algo.

Me levanto del escritorio y busco algún libro de contenido variado mientras el chico de ojos azules me observa fijamente sonriendo. Después de estar buscando un largo rato, no encuentro ningún libro que se ajuste a esa descripción tan variada y me dirijo de nuevo a mi mesa.

-Lo siento, no he encontrado ningún libro de ese tipo.

-Qué pena.

-Si me da una descripción más concreta quizá encuentre alguno.

-Vale, pues un libro romántico.

-Gracias por concretar.

Sonrío de forma sarcástica y él suelta una carcajada.

-¿Se puede saber qué es lo que le causa tanta gracia?

-Se lo estoy poniendo difícil.

Sonríe y levanta una ceja, y ahora soy yo quién suelta una carcajada.

-¿Se está riendo de mí, señorita?

-No, para nada.

-Me gustaría decirle que tiene unos preciosos ojos verdes.

-A mí me gustaría saber cuál es el libro que busca.

-Le he dicho que quería uno romántico.

-Hay varios.

-Pues dígame usted señorita, ¿cuál es su preferido?

-No creo que tengamos el mismo gusto pero… le recomendaría “The notebook".

-Suena bien.

-Voy a mirar si lo tenemos.

Vuelvo a levantarme de mi escritorio y busco el libro por todas partes pero no lo encuentro.

-No lo he encontrado, pero puedo pedirlo para que traigan.

-Vale, gracias. Le dejo mi número y cuando lo traigan me llama.

-Claro. ¿Me dice su nombre?

-Jacob.

Apunto su número junto a su nombre en una libreta.

-Bueno, ha sido un placer conocerla señorita, espero que traigan pronto el libro y me llame.

-Eso haré.

El chico abre la puerta y sale de la librería, yo cojo mi móvil y veo que Melissa me ha llamado, ya ha acabado mi horario así que cojo mis cosas y vuelvo hacia casa. Almenos hoy no ha sido tan aburrido en el trabajo.

              DEDICADO A @nayycastiillo