-¡Qué frío que hace, abuelita!
-Toma, ponte esta manta.
-Gracias.
-¿En qué piensas, cariño?
-Creo que antes de hablar, mucha gente debería pensar un poco lo que va a decir.
-Sí.
-¿No se dan cuenta que una sola palabra puede significar mucho para alguien?
-A veces, hasta un silencio puede tener mil significados.
-Al final, sólo los que nos conocen realmente saben lo que nos puede afectar algo así.
-Nadie puede saber de qué forma puede afectar algo en ti, querida, nadie está dentro de tu mente para saber qué es lo que te duele, eso sólo lo sabes tú.
-Pero puedes contárselo a alguien.
-Bueno, hay personas que les desahoga expresar lo que sienten a los demás.
-¿De verdad? Yo cuando no me encuentro bien, el hecho de contárselo a alguien me hace encontrarme peor, no me gusta mostrar lo que me afecta, odio mostrar cuáles son mis debilidades.
-A mí tampoco me ha gustado nunca mostrar las cosas que me pueden afectar emocionalmente, a veces, es más fácil sonreir que explicar por qué estás triste. Pero, querida, al fin y al cabo, todos necesitamos que nos ayuden.
-Sí, necesitamos que nos ayuden, pueden ayudarte con la mejor intención del mundo, pero eso me haría sentir incapaz de solucionar mis problemas.
-¿Sabes qué forma tenía yo desde pequeña para desahogarme de mis problemas?
-¿Cuál?
-Tenía una libreta, ahí apuntaba todo lo que me molestaba o me afectaba, nadie podía leerlo, sólo yo, cuando acababa de escribir, arrancaba la hoja y luego la quemaba, y parece extraño, pero, me ayudaba mucho hacer eso.
-Eso es una buena idea.
-Vamos, cariño, has de dormirte.
-Que tengas buena noche, abuelita.
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Corazones dorados
RomanceDicen que los cuentos de hadas son sólo fantasía, que nada es real, pero siempre hay una gota de verdad en medio de una mentira. Dicen que a través de una mirada puedes saber como es la otra persona, una especie de conexión instantánea. Dicen que la...