Capítulo 12

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Evans en multimedia

Narra Arán

—antes que algún sucio cazador te toque lo mato y luego te follo tan duro hasta que tu cuerpo se entere de mi nombre y sepa quién es tu jodido dueño – ella solo sonríe

—mientras no esté marcada soy libre de hacer con mi vida lo que me plazca

—desde el momento en cual aceptaste casarte conmigo tu vida me pertenece al igual que la mía a ti

—no pienso igual que tú, si tu no me marcas habrán muchos hombres que querrán hacerlo

—no me retes Alexis que puedes salir perdiendo

—ambos podemos salir perdiendo pero yo no soy la que moriré de dolor – juro que esa sonrisa ya me está estresando

—Eres mía

Narra Alexis

—aún no soy tuya – colocó mis manos en su pecho al sentir como su agarre se identifica en mi cuello – cuando tengas agallas lo seré

Sus labios atacan los míos con ferocidad, sus manos van a mi trasero y a mis muslos haciendo que quede encima de él con mis piernas alrededor de su cintura, el beso sigue subiendo de intensidad y no quiero parar hasta lograr mi objetivo

Siento como caemos en la cama y él se coloca en medio de mis piernas rozando mi feminidad, se separa de mi y lo ayudo a quitarse el suéter que trae puesto

Sonrió de lado al ver su cuerpo, llevo mis manos a ese lugar tocando cada parte de su duro pecho, sus abdominales, mis manos paran en esa V que llama completamente mi atención por que se perfectamente que es lo que se encuentra debajo de ella

Muerdo mis labios solo de imaginarme lo que ocurrirá en poco tiempo, ayudo a Arán con sus pantalones al igual que con sus boxes deleitándome con la vista que me regala

Arán me toma nuevamente del cuello haciendo que me quede quieta, siento como sus manos van bajando a mi parte íntima, sus dedos empiezan a masajear esa zona haciendo que unos que otros gemidos salgan de mi, puedo sentir como esa parte ya está lo suficientemente mojada para poder recibirlo y quiero tenerlo ya dentro de mi

—dime por favor que solo eres mía – se a lo que se refiere

—¿por qué debería serlo? ¿Acaso tu eres solo mío?

Puedo ver en sus ojos esa pisca de ira y confusión mezclada en su mirada

—mi abuelo confiaba mucho en mi ¿cómo crees que me escapaba sin ser detectada?

Sus movimientos paran pero siento como mi interior es llenado de golpe, si que dolió un poco pero solo quiero una cosa en este momento

Sus movimientos bruscos y firmes solo hace que el deseo aumente cada vez más, si siento ardor y dolor pero es satisfactorio, mis manos van a su espalda

También lo marcare como mío

No puedo evitar soltar gritos y gemidos de satisfacción, de placer de deseo, Arán deja marcas en mi cuerpo que seguro tardarán días en desaparecer

Me atrevo a mirar sus ojos los cuales están dorados pero de un dorado intenso y brillante no como el dorado que siempre tiene

Acaricio su mejilla sin poder evitarlo, sus manos se aferran cada vez más a mi cintura, siento un liquido salir de ahí después de lo que siento como horas llenas de placer al fin siento como se descarga dentro de mi, siento sus colmillos en mi cuello y como mi piel es penetrada

Me acerco a su oído y beso nuevamente su mejilla

—No te preocupes jamás hice algo que pudiera defraudar a mi abuelo, soy completamente tuya lobito – con esas palabras caigo en un profundo sueño

Dos días después

Sigue narrando Alexis

Mi cuerpo, mi alma y hasta la existencia me duele en este momento, es que a mi sola se me ocurre decirle que no era virgen cuando lo era

Por qué no se me paso por la mente que es un Alfa, creo que mi parte de semi-diosa me ayudó mucho a aguantar tremendo hombre, si fuera humana de seguro hubiera muerto

Necesito mis poderes de vuelta y es urgente y más por éste dolor que siento

La puerta se abre y sonrió al ver quién entra pero al parecer él está muy enojado así que me hago la dormida

—Padre entiende de una ves por todas, odio a esa humana la detesto la única razón por la cuál está conmigo es por esa estúpida carta que dejo mi madre antes de ser asesinada por esos asquerosos humanos – en la voz de este chico se puede sentir el odio y el desagrado – solo está a mi lado por que si no me caso con mi mate no puedo seguir al frente de la manada que era de mi madre pero jamás tendré algo más con esa mujer

—esa mujer es tu mate, esa mujer es tu mujer, aquella que lleva a tu cachorro en su vientre – chismecito

—¿qué?

—¿acaso no lo notaste? – pregunta con enojo Arán – ni siquiera estas al pendiente de tu mujer, ella será la Reyna de todo esto si algo le ocurre a mi luna y a mi, su bebé será el heredero de todo lo que es tuyo, no se como te convertiste en esto, no se como no notaste el aroma dulce que emana de ella – valla qué está enojado – su aroma está mezclado con el tuyo, si no la querías, desde el principió no la hubieras marcado ahora sal necesito arreglar algunos asuntos con mi luna

—padre yo…

—Padre nada, si no estás dispuesto a cuidar debidamente a la madre de mi nieto puedes dejarla conmigo, yo me haré cargo de ella y de su hijo

—no te quedarás con mi cachorro ni con mi luna, ellos me pertenecen

—entonces aprende a tratarlos como tal, yo si voy a querer a mi nieto sin importar que pueda ser humano o medio humano y protegeré  mi nuera sin importar su raza  

—Claro como tu maté es la hija de la diosa luna todo está bien

—a ver, a ver a mi no me metan en sus problemas, yo no tengo la culpa ni de tu falta de hombría ni del poco sentido de olvidar el pasado que tienes además yo estaba tranquilamente durmiendo y ustedes llegaron haciendo ruido, existe un despacho allá abajo donde seguramente sería un buen lugar para charlar así que fuera que necesito ducharme  

—Ya decía yo que se me hacía muy raro que te hicieras la dormida por mucho tiempo – sonrío con un poco de inocencia – Evans hablamos luego

El chico se va de la habitación y Arán me mira como si quisiera matarme

—¿por qué no me dijiste que eras virgen? – hago un ademán que no se  

—Oye eso no importa ya

—estás adolorida, claro que si importa

—estoy adolorida pero estoy marcada por mi lindo lobito así qué valió la pena además no quería que te contuvieras por el hecho que mi especie es más frágil que la tuya, Arán Bloody no soy tan frágil como piensas

—no es que seas frágil si no que eres mi maté y no me gusta lastimarte – su vista se dirige a mis brazos los cuales están intactos – si no fuera por que tienes mi sangre en tu cuerpo todavía estaría llena de manchas moradas y negras

—claro ya recuerdo eso – el me mira raro – al marcarme básicamente paso a ser como un omega solo que ellos son lindos y tiernos – Arán sonríe

—tu también eres linda y tierna

—tienes una sonrisa muy linda lobito, deberías sonreír más seguido

—ahora que estás aquí lo haré mucho más seguido – asiento

—eso espero, ahora ya deja la preocupación de lado y desayunemos, antes de desmayarme me dijiste que me darías pastel de limón 

—claro mi luna lo que desees

 

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