Narra Arán
Miro el reloj en mi mano notando que ya ha pasado unos diez minutos desde que supuestamente fue al baño, todavía está cerca lo se por su olor pero no tan cerca como debería estarlo
—Está tardando mucho ¿no lo crees? – pregunta Gaspar
—iré a ver que hace – aviso
—cuidado que te tira algo – advierte
—conozco muy bien a mi Alexis para saber que ya no esta detrás de esos arboles – indico con un poco de fastidio
—pues te has equivocado chucho ridículo – indica la chica – además no soy tu Alexis soy solo mía y de mi abuelo ridículo
—¿podrías dejar de insultarme y causar problemas por lo que queda del camino? – ella asiente pasando a un lado de mi
Peculiarmente ella sigue el camino correcto a la manada sin que nadie la guíe a pesar que jamás en esta vida a visitado mi manada
—tu manada es linda – indica una vez al llegar – lastima que este llena de las personas de tus especie
—Alex insúltame a mi pero no te atrevas hacerlo con mi gente – dejo claro
—Si no lo hago ¿qué me harás? – pregunta desafiante
Me acerco a ella y bajo hasta la altura de su oído mientras pongo una mano en su cuello acercándola a mi
—si vuelves a insultar a mi gente juro que después de la noche de boda no podrás caminar en un mes – Alexis Frunce el ceño
—¿te atreverías a romperme las piernas? – pregunta con inocencia
Enseguida las fuertes carcajadas de mi hermano suena por todo el lugar en señal que escucho nuestra pequeña conversación
—no te romperé las piernas – dejo claro
—¿entonces cómo pretendes dejarme si caminar por un mes? – sonrió de lado
—¿la palabra noche de bodas no te dice nada? – pregunto
Sonrió al escucharla tragar saliva y como su corazón empieza a latir con fuerza en señal que ya sabe perfectamente a lo que me refiero
—Estas demente
—no mas que tu mi luna
—No me llames así maldito pulgoso – esta chica a pesar del tiempo me saca de mis casillas muy rápido
—Decir pulgoso a un Alfa es de mala educación – la chica solo ríe
—pero eso eres o acaso no te puedes convertir en un saco de pulgas – la tomo del brazo
—ya basta – ordeno
—¿si no lo hago qué me harás? – pregunta con burla – me acerraras en el calabozo
—sabes que jamás haría eso – indico
—Las bestias como tu no tienen corazón, son incapaces de amar y tener misericordia – mi agarre se vuelve un poco mas fuerte por el hecho que me enoja lo que dice
—Alexis cierra la boca – ordeno intentando que mi lobo no salga
—¿por qué? ¿Te duele la verdad? – miro a mi hermano
—llévala con la diosa luna yo tengo que hacer cosas antes
—Además de pulgoso cobarde
—ya basta – esta vez el que habla es mi lobo y no yo
Alexis queda de rodillas en el suelo demostrando sumisión antes su pareja destinada, su Alfa, me acerco a ella y me agacho hasta su altura
—vuelve a abrir la boca para decir algunas de tus idioteces y atente a las Consecuencia – tomo su mentón levantándolo – soy tu Alfa y me debes respeto no permitiré que suceda lo mismo nuevamente
—no sabes cuanto te detesto – sus mejillas se enrojecen
—créeme lo se mas que nadie – miro su cuello el cual tiene pequeños puntos dorados
—Jamás estaré a tu lado por voluntad propia – sus ojos se vuelven llorosos – prefiero la muerte a estar a tu lado – suelta un grito lastimero
—Aran cálmate – miro a mi hermano y a los otros soldados tapando sus narices – tus feromonas le están haciendo daño a ella y a nosotros
No me había dado cuenta que mi lobo había dejado salir sus feromonas, con razón Alexis esta demostrando un poco de sumisión a pesar de todo
—Llevarla con la Diosa luna – la suelto y me marcho del lugar
Narra Alexis
Me siento muy débil, casi no puedo respirar debido al olor tan fuerte que emana de su cuerpo, una vez que se aleja de mi puedo respirar con mas tranquilidad
—Luna, acompáñanos por favor – pide el chico de antes
—no lo haré – indico con desagrado – no los quiero cerca de mi a ninguno de ustedes
—Por favor Alexis hazme caso de lo contrario mi hermano se enojara con todos nosotros y será peor – ruedo los ojos
Me siento mucho mejor y con mas energía que esta mañana cierro mis ojos pensando en la aldea de cazadores lunares y doy un pequeño chasquido con mis dedos apareciendo allá
Siento un pequeño mareo que me deja en el suelo, llevo mi mano a mi nariz notando la sangre salir de ella
—señorita Alexis – un joven se acerca a mi y toma mi mochila - ¿se siente bien? – niego a su pregunta
—llévame con Daniel el sabrá que hacer – todo alrededor me da vueltas antes da caer inconsciente
(…)
Mi cabeza duele mucho es como, es como si me estuvieran dando pequeños golpecitos en ella, una y otra vez
—pequeña – sus ojos me escanean con preocupación – dime algo – pide tomando mi mano
—disculpa la tardanza – indico haciendo que sonría
—eso es lo que menos importa en este momento, lo bueno es que has llegado y estas a salvo lejos de ese rey tirano – asiento sentándome en la cama
—Daniel, estoy jodida – revelo – él tiene un gran poder sobre mi – lo miro – hizo que me arrodillara ante él solo con su horrible olor
—él es tu pareja destinada era de suponer que eso sucedería aunque según lo que he leído eso no debió pasar hasta que te marcara como suya – como si recordara algo llevo mi mano a mi cuello recordando ese dolor que sentí en el mismo
—¿cómo se hace una marca? – pregunto
—él debe morder tu cuello para que ambos mezclen su sangre y luego deben tener relaciones sexuales para que se mezclen sus cuerpos y así la marca este completada y no podrás separarte de él de lo contrario ambos podrían morir no es lo mismo hacerlo por amor que por obligación – indica – si lo hacen por amor la unión y conexión serán mucho mas fuerte y si es por obligación no será lo mismo solo será como si estuvieras encarcelada por eso no debes permitir que él te marque – asiento
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Hechicera Lunar
Manusia SerigalaDespués de varios años Alexis regresa nuevamente a la tierra hacer su vida como una humana normal pero descubre que la tierra ha sido esclavizada por las nuevas especies ella no recuerda nada pero su carácter no a cambiado nada ¿qué hará para camb...