Capitulo 40

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-quiero que cada uno se valla por dónde vino, no quiero volver a tocar este tema y una cosa más, a partir de ahora nadie puede tener esclavos humanos en sus casas, si quieren servidumbre tendrán que pagarles un sueldo eso es lo justo, no me importa que ellos sean "inferiores" a ustedes es una orden directa de la hija de la diosa Luna - miro a Silas - haste cargo que está ley se cumpla

-como ordene nuestra luna

-quiero a dos de los mejores guerreros que tenemos, envíalos aqui de inmediato - pido

-¿Qué planeas hacer Alexis? - miro Arán

-no te metas, trataste de solucionar las cosas a tu manera y ellos no entendieron, ahora es mi turno - regreso mi vista a los demás - aquellos que irán a sus manada y no se quedarán aquí quiero que les den la orden a sus Alfas de proteger las 24 horas sus manadas, la guerra iniciará nuevamente si no puedo solucionarlo pasificamente

-los mejores guerreros que tenemos en este momento disponibles son de la familia real - no puedo enviarlos a ellos

-¿Alguien que no pertenezca a tu familia?

-si pero solo son guardias y no podemos enviarlos a algún lugar si ese es tu objetivo - responde Arán - ellos están cuidando a los cachorros y algunos están en otras manadas ayudando

-puedo ir yo, lo haré en modo de disculpas mi Luna - la pelirroja habla - no soy de esta manada tampoco soy de la familia real asique no habrá problema si algo me sucede - tiene un punto

-bien irás con un cazador Lunar, prepárate para salir mañana al amanecer, su misión será traer al hijo del líder de los cazadores, su nombre es Daniel y hace poco éramos amigos también traerán a su esposa su nombre es Astrid ellos nos ayudarán

(...)

Le doy una fuerte bofetada a Arán una vez llegamos a la habitación

-que sea la última vez que me pones por debajo de tu raza y de tu gente - señaló su pecho con mi dedo - no voy a permitir que ni tú ni nadie me ponga por poco, que me ponga por menos de lo que soy, vas a empezar a respetarme como tú luna y como tú reina de lo contrario me iré lejos junto con mi hija y no nos volverás a ver

-no me amenaces - toma con fuerza mi mano - ni tu ni mi cachorra se pueden ir de este lugar

-entonces dame mi lugar y no me dejes de lado como si fuera solo una decoración del castillo - exijo

-jamas te he visto como una decoración y lo sabes

-por eso es que aceptaste otra esposa, eres un cínico

-la acepte por qué quería protegerte, quería que la atacarán a ella y no a ti

-si y luego te ibas a acostar con ella, me ibas a engañar ¿Crees que soy tonta? - lo empujo con fuerza - no soy ni la mitad de incrédula de lo que tú o tu especie piensan, me respetas o me hago respetar contigo también como lo hice con esos tonto ancianos tu decides

-yo no soy tu enemigo entiende eso de una vez por todas, yo no me iba a acostar con esa mujer es más renuncie al trono por ti pero no me dejaron hacerlo, entiende de una vez por todas que toda la vida he buscado protegerte no lanzarte a los Leones - me deja sola en la habitación

Un silbido suena en la habitación una vez Arán se va

-quisiera tener la paciencia de tu Alfa y la confianza tuya al saber que el no te atacara - la miro mal

-¿Que haces aquí Hazly? - (unas de sus aprendices, la que más se parecía a ella en actitud en la primera temporada)

-nada solo vine a protegerte por si acaso Aran se cansaba de ti y te atacaba

-¿Lo crees capaz de hacerlo? - pregunto

-no pero eres tan irritante y tan tú al hablar que sacas a cualquiera de sus casillas sin contar que lo amenazaste con su cachorra y para los hombres lobos los Cachorros son lo más importante aparte que Arán es tanto Lobo como bestia y sus instintos son más fuertes - explica

-eso quiere decir

-quiere decir que si su bestia lo domina puede acabar con tu vida cosa que no ha pasado ni pasará por qué Arán no lo dejara pero por si acaso aquí estaré yo para protegerte - me sonrie

-¿Protegerme? No te olvides que fui yo la que te enseño a protegerte

-por esa razón ahora lo haré yo - bufo

-¿No tienes hijos que cuidar o algo así?

-mis hijos ya son mayores y trabajan juntos a su padre protegiendo el reino entonces no tengo nada por qué preocuparme, todos somos personas de guerra por lo tanto no estamos mucho en casa

-eso quiere decir que eres una vieja

-vieja pero candente ya quisieras tener este cutis a mi edad, los jóvenes de ahora no saben nada - para que mentir, se ve espectacular pero ella tiene ADN de los dioses asique no es algo raro

-soy de tu misma raza viejita, yo me veré mucho mejor a esa edad - dejo claro

-ya lo veremos

(....)

—lo primero que diré es que ni Daniel ni yo estamos de acuerdo con esto - Frunzo el ceño

—si no está de acuerdo ¿Por qué no está aquí? - mi voz sale con tanto odio que ella solo me mira mal

—no lo sé tal vez si pensarás un poco lo entenderías - responde en el mismo tono que yo

—no voy a permitir que me hables de esa manera yo soy tu reina - reclamo

—pues bájale dos rayas a ese ego, conmigo no te comportes como una perfecta Perra - reclama

—si vuelve hablarle así a nuestra luna le cortaré la carganta - Astrid solo mira al hombre retandolo

—atreve a tocarme un solo pelo y te juro que la carganta que será cortada no es la mía - digamos que lo único que está chica y yo teníamos en común era el odio hacia la especie superior - dile a tu perro que no le tengo miedo y ponle una carrera no valla hacer que me muerda y me infecte con rabia - sonríe con burla - aún no tengo esa vacuna

Hechicera Lunar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora