Parte 23

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Emma, ¿Qué sucedió? —Las lágrimas salieron por sí mismas en mis ojos intentando liberar tensión acumulada dentro de todo mi cuerpo, mis manos no dejaron de temblar, y mis ojos se posaron fijos en la mesa metálica frente a mí.

—No lo sé. —Susurré y volví a negar con la cabeza, como ya lo he hecho antes. —No hay nada claro.

—Solo intenta calmarte. —Me pidió el oficial Alex, un hombre caucásico y de cabellera corta a camisa blanca y pantalón negro.

Me fue increíblemente difícil respirar, sentí miedo y me sentí de pronto totalmente aturdida, mis ojos apenas pudieron distinguir las cuatro paredes color blanco, y fui vagamente consciente de que estaba en una sala de interrogaciones.

Fueron dos oficiales los que vi frente a mí, los mismos que me sacaron de la casa; El pelirrojo, quien había permanecido pálido y silencioso durante todo este tiempo, y el moreno, quien había intentado hacerme hablar y calmarme, las dos cosas al mismo tiempo. Pero no pude. No había nada que decir.

—Eso hago —Afirmé desesperada fijando mi vista al espejo de doble vista detrás de los oficiales. Supe inmediatamente que mamá estaba detrás, pero me negué a aceptar que algo tan terrible sucedió como para que yo estuviese ahí.

— ¿Viste a alguien entrar cuando te duchabas? —Lo miré fijo. Mi cabeza recordó a una persona diciendo "Escóndete" "Ven conmigo Emma" una persona tomándome del brazo con fuerza alejándome del infierno. Haciéndome dejar a mi amiga sola

-No. -Respondí fríamente. El intercambio oficial con miradas, dudosos de mi respuesta. En última instancia, el moreno, Alex, luchó contra una carpeta que sostenía en mis manos que me dio una sonrisa que no había llegado a sus ojos.

-Bueno Emma, ​​hablaremos con tu madre al minuto y podrás irte. - Tomó suavemente del brazo sacándome finalmente de ese lugar asfixiante; Espejados alrededor de un temblando. Se siente como despierto de un préstamo y todo debido, principalmente la cabeza.

-Todo es bueno. -Afirmó a Alex con una sonrisa sombría, había algo detrás de él, de sus ojos y su forma de actuar, pero decidí ignorar en ese momento cualquier cosa que pudiese perturbar más.

-Si. -Recorrido deseando que alguien me dijese realmente que sucedió. Salimos de la habitación en la que está estancada. Mi madre lloraba como niña .

-Hola linda -Dijo mamá, con voz cortada. Sus ojos grandes y asustados se fijaron en mí un poco más, buscando algo. - ¿Sabes dónde estamos? -Pero, ¿qué clase de pregunta?

- ¿Qué estás sucediendo? -Pregunte firmemente en este momento, con urgencia una respuesta de una buena vez. Apenas se vio obligado a grabar, todo era borroso.

-Quédate aquí hija -Mi pidió mi madre y el oficial Alex jaló puso a mi madre a unos metros de distancia.

-Necesitara terapia -Escuché, en lo que para mí fue un susurro -Ella no tuvo nada que ver con lo sucedido. Está asustada y posiblemente tiene estrés postraumático, por lo que su mente bloqueo todo .

- ¿Y Leia? -Susurró mamá. ¿Qué pasa con Leia? Que hay de la amiga

-Leia esta mal. Nadie puede mentir. -Susurró Alex con un tonode silencio y discreción. -No tengo manera de decir esto .. como sedice ... ella está en coma, según tengoentendido.El silencio duró tanto que no me importó, necesitaba saber que sucedió,y lo necesitaba en ese momento. Enuno de los pasos de las firmas me acerqué y mamá, y los oficiales.

Sexo con mi profesor particularDonde viven las historias. Descúbrelo ahora