Hola!
He de suponer que ya han leído las advertencias. No escribo s3x0 explícito porque me parece embarazoso e innecesario, pero sí es un tema que quisiera abordar; no en su pura esencia. Para nada creo que no hablar de esto sería tierra de exilio.En esta historia no quiero defender ninguna determinada posición política. Sin embargo, sí quiero retratar las ilícitas desgracias que acechan multiforme a varios grupos sociales.
Agradezco íntimamente a las pocas personas que le echen y le echaran un vistazo a esta cosa. También a mi novio. Gracias por leerme kerido.
Espero que sea de su disfrute, y entonces no duden en hacer sugerencias superfluas. Muchas gracias! :))))•••
Capítulo I
"¡Quédate siempre conmigo, toma cualquier forma, vuélveme loco! Pero, ¡por favor! no me dejes en este abismo donde no puedo hallarte"
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-Cumbres Borrascosas
Emily Brontë"《Seguiría a esta beldad a cualquier parte-dijo algo dentro de Ender-. Vería lo que ven esos ojos》"
•-El juego de Ender
Orson Scott Card●●●
Cuando se habla de amor, uno tiende a pensar en dos personas que se estiman profundamente, caminan embobados de la mano y comparten siempre risas y cariños. Dicha afirmación es soñada por todos; asimismo todos sabemos que es completamente errónea.
Con esta introducción resulta esperable una historia sobre el amor no convencional. Ignóreme. No será así.Corría el año 1925. Mi ubicación geográfica no es importante. Yo era una chica rubia de ojos marrón claro con un toque verdoso. Vivía en el campo con mis padres, sin embargo, no estabamos tan apartados de las aglomeraciones como el paisaje promete incluso al día de hoy.
Mis padres no se llevaban nada bien. No era casual ver un plato volando por una habitación, o escuchar portazos que responden óptimamente al estereotipo de adolescente enfadado, esta vez efectuados por mis progenitores.
Mi padre trabajaba en el pueblo. Como he mencionado, cuando volvía, rara vez la casa estaba en calma. Quien más lo padecía era mi pobre madrastra.
-Sarah, ¿cuántas veces debo decirle que la cena debe estar lista a las ocho?
¿No sabe apreciar el dinero que traigo a esta casa?-preguntaba mi padre, con un tono que ambas, Sarah y yo, sabíamos bien que progresivamente desembocaría en un sinfín de gritos e insultos.
Sarah intentaba mantenerse fría. Mi padre hacia de la mujer adulta una niña resentida y caprichosa, una indefensa víctima.
Al ver que no respondía, prosiguió:
-Te doy una casa, Sarah, comida y bienestar...
-¡Bienestar! ¡Dios me prepare para cuando, entonces, me sortee a un marido violento, en tus términos!-vociferó ella.
Como respuesta obtuvo un argumento físico, y no pudo más que dejar escapar algunas lágrimas. No se puede permanecer impávida al recibir un manotazo.
Yo contemplaba la escena como si fuera un disco rayado. Implícitamente pensaba que nunca cambiaría, pues esto así fue con todas las mujeres que mi padre desposó a lo largo de mi vida. La pobre Sarah no fue la excepción. Hasta donde yo sé, años después murió en manos de aquél truhán.No pude ver más y salí a respirar aire fresco. Era una sensación que me recomponía y me llenaba de voluptuosidad. Los gritos cesaron adentro, y solo pasé a escuchar el misterioso llanto de la cigarra, que alimentaba el espectáculo de la puesta del sol.
El campo que habitaba se extendía en miles de hectáreas de pura soledad. Mis caminatas vespertinas en la penumbra solo eran acompañadas por la línea de luces del pueblo, en el horizonte.
Toda clase de pájaros cantaba al amanecer y al atardecer. Es extravagante el hecho de que lo considerara siniestro; mis años allí no fueron de lo mejor, aunque mi conformismo me induce a no quejarme, ni siquiera en mi interior, cuando una chispa de odio hacia mi vida se enciende. Incluso, hoy en día, que vivo en la ciudad, ese canto evocado usualmente me transmite una súbita memoria de abandono.
Por esa razón, aquella tardecita me pregunté quién podría atribuirme una vida tranquila y luego mirar con embeleso aquel paisaje desolado.
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Jane Baudelaire
Fiksi Sejarah1925. Jane Baudelaire, joven campesina, tras conocer a un muchacho por cartas enviadas al azar, acaba en un desdichado hogar donde su género amerita ciertos tratos inhumanos. Inconforme, comienza un apasionado adulterio con su vecino, cuya finalidad...