Capítulo 3

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-¿Bien, entonces vamos en taxi y volvemos también no?- pregunté mientras metía mis cosas en el bolso

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-¿Bien, entonces vamos en taxi y volvemos también no?- pregunté mientras metía mis cosas en el bolso.

-Esa es la idea, pero de aquí a ese momento pueden pasar muchas cosas, a lo mejor amanecemos todas en el yate de algún famoso después de hacer una orgía .

Todas rieron después de aquello que había dicho Amanda, pero yo me dediqué a mirarlas y no hacer ningún comentario al respecto, ya que no tenía ninguna intención de hacer nada y es más, tampoco de salir esta noche pero al final me convencieron.

Digamos que según ellas esto era algo así como una "celebración de que volvía a estar soltera", y acepté porque tampoco tenía otra cosa que hacer.

- ¡Encima que te invitamos no pongas esa cara Nicole! - Paulina soltó aquello como si ella hubiera sido la cabeza de la idea, cuando todas sabíamos que al final eso de que una invitaba por noche como intentábamos hacer siempre, nunca funcionaba.

Bajamos las escaleras y eso sonaba como una estampida con el sonido de tanto tacón. Salimos de la casa de Rose y nos subimos al taxi que llevaba allí esperando algo más de 10 minutos y, que supongo que nos cobraría lo que no estaba escrito por llevarnos a aquel pub que estaba en la otra punta de la isla.

Era un pub de esos en los que te cuesta la entrada casi 20$ pero ponían reggaeton, el sitio era grande, había reservados en los que te podías encontrar a algún famoso y lo más importante, te cargaban bien los cubatas.

Entramos directamente dejando atrás toda esa cola de gente que esperaba a que alguien saliera y no tener que pagar tanto por una entrada, pillamos sitio en una zona de sillones, pedimos nuestras bebidas y empezamos a hablar e intentar disfrutar de aquella noche.

Aquella conversación ahora giraba en torno a Paulina, quién nos estaba hablando sobre su duda acerca de elegir universidad, y mis otras amigas le daban ideas. La verdad es que yo no estaba muy metida en aquello, simplemente bebía de mi copa con pajita para que no se me fuera el pintalabios, mientras observaba a la gente bailar y disfrutar entre ellos.

...

Benito

-Mañana hemos quedado en el estudio para grabarla, sí, no te preocupes Joaquín, estará todo listo para ese día. Claro, bien, hasta mañana.

Colgué la llamada y saqué la llave del coche de mi bolsillo para abrirlo.

Cuando entré solté todos los papeles y mis cosas en el asiento del copiloto, puse la radio y encendí el aire acondicionado, hacía mucho calor hoy y yo estaba estresado.

Mi nuevo álbum salía el día 20, estábamos a 17 y aún me faltaban 2 canciones de las 22 que prometí. A estas alturas pensé en sacar alguna de las que tenía escritas pero que eran solo borradores, le dábamos algunos retoques y estarían listas, pero no me parecía bien, ya que quiero que cada canción sea especial y no meter 2 canciones en un álbum y que luego ni siquiera me gusten o no estén bien.

Necesitaba inspiración para escribir y poder sacar algo lo antes posible o estaría muerto, así que llamé a mis amigos para salir un rato, quizá pasaba algo aquella noche digno de relatar en una canción.

"Bueno y queremos recordar que estamos a día 17, y el conejo malo anunció que el nuevo álbum salía el 20, ¡Qué ganas de poder escuchar nuevas canciones de este chico!".

Aquella voz femenina que dió ese mensaje en la radio me puso aún más nervioso, no quería decepcionar a nadie, pero tampoco quería lanzar temas que no me gustaran.

De camino a casa me acordé de la chica del aeropuerto y de lo que dije en aquella entrevista. Me llamó la atención verla allí sola, quizá esperaba a algún amigo o familiar, no sé, pero el caso es que yo llegaba hecho mierda y su sonrisita me alegró el día

Ya nunca se ve a la gente sonriendo de verdad, todos van siempre caminando con cara de amargados y pensando en sus cosas.

...

Unas horas después yo ya estaba duchado, vestido y perfumado, listo para salir, pero estábamos esperando a que Mario terminará de hablar por teléfono con esa nueva novia suya que tenía ahora, y entonces nos podríamos ir.

Cuando acabó todos salimos por la puerta de mi casa y nos subimos a los coches para ir a algún sitio con reservado donde yo pudiese estar con mis amigos sin tener a gente molestando, pero aún no sabíamos a donde ir.

Mario y Julio iban en un auto, Liam con Thiago en otro, y yo en el mío, no quería compartir con nadie, así me podía ir a mi casa cuando yo quisiera.

Decidieron a base de votación ir a un pub que había a las afueras de Puerto Rico, un sitio bastante caro y por lo visto dónde se podía beber bien.

Aparcamos y entramos, nos dirigimos directamente al reservado y empezaron a pedir botellas.

Más de una vez se me acercaron chicas a pedirme fotos y yo con gusto me las hice, y otras venían para pedirme otro tipo de favores, no voy a negar que en otro momento habría dicho que sí, pero yo no era así y no me iba eso de despertar con una nueva cada día, ya dejé esa vida.

Me apoyé en una baranda que había allí y desde la que se podía ver a la gente bailando y la barra.

Y de pronto, no sé si quizá lo imaginé por el alcohol aunque apenas había bebido, pero la vi allí sentada, sola y pensativa bebiendo de una copa con sorbete sentada en la barra.

Les avisé a mis amigos que iba al baño y sin perder la oportunidad bajé las escaleras.

The airport - Benito Martinez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora