𝓭𝓲𝓼𝓽𝓲𝓷𝓽𝓸 ●willmax●

VII

- E-es solo qué tengo miedo. -la voz de Will sonaba algo entrecortada.- No a lo qué esos hombres o muchos más puedan hacerme, tengo miedo de qué ustedes se den cuenta finalmente de qué soy un monstruo y quieran alejarse de mí.

Al chico le dolió decir eso, sintiendo pequeñas lagrimas caer por su rostro, sin embargo el vacío qué tenía en su pecho se fue llenando al sentir a Dustin y Max abrazarlo rápidamente luego de decir esto.

- No seas idiota, Byers. -el castaño se ganó un tirón de oreja de la chica.- Nosotros te amamos y no seríamos capaces de pensar así sobre ti, ni de esa ni de ninguna qué tu cabeza debe estar maquinando en este momento.

- Exacto. -coincidió el otro chico.- Eres mí amigo desde los cuatro años, y te prometí acompañarte y apoyarte siempre en lo qué sea, esto no será una excepción, hermano, así qué quieras o no estaremos juntos hasta qué la muerte nos separé.

Lo último qué dijo el chico arrancó una carcajada de todos los presentes, aliviando el ambiente y el humor del menor.

Pasaron toda la tarde jugando C&D en la habitación del menor, hasta qué Dustin se tuvo qué ir ya qué era muy tarde.

- Los veo luego, chicos. -Henderson saludó con la mano a ambos mientras salía de la habitación.-

Luego de esto, los dos adolescentes se quedaron en silencio. Will se encontraba nervioso porqué seguramente la chica lo regañaría.

Este se tiró de espaldas a la cama, tapándose su rostro frustradamente, se sorprendió cuando sintió cómo el cuerpo de la chica se acostaba lentamente a su lado, apoyando su mejilla en el pecho del menor.

- Will, sabes qué no es cierto, verdad? -la voz de Max sonó en apenas un susurro, Byers solo llevo su mano hasta su cabello, acariciando delicadamente el mismo.-

- No lo sé, maxie, tal vez luego cambien de opinión cuando se den cuenta de qué soy un raro monstruo. -habló en el mismo tono qué su acompañante, pellizcando su mejilla de forma suave al verla sufrir el ceño.-

- Nunca te abandonaría, Will, eres la persona más importante qué tengo en este mundo, eres mí pilar en el qué me apoyo para seguir adelante cuando siento que las ganas son nulas y no tengo razón para hacerlo. -los ojos de la pelirroja se cristalizaron, y Will se odió por hacerla sentirse así.- Sino te tendría en este momento, no sé qué sería de mí vida, no tendría rumbo ni sentido, Will. Entiendo el qué creas qué eres un monstruo, es algo nuevo y demasiado grande a lo qué ninguno estaba acostumbrado y nisiquiera esperaba, pero debes entender qué el deber qué tienes qué cumplir es hermoso, es algo lindo qué muchas personas sueñan hacer sin embargo no tuvieron la suerte qué tuviste tu, cariño.

El castaño vio cómo una pequeña lagrima resbalaba por la mejilla de la pelirroja, al instante la abrazó fuertemente, estrechandola entre sus brazos y dejando qué se acurruque en su pecho.

- S-solo quiero qué sepas qué te amo y siempre estaré para ti, me quieras o no a tu lado, yo estaré allí apoyándote y respetando cada decisión qué decidas tomar porqué para mí cada decisión, palabra, actos y cualquier tipo de cosas qué puedas llegar a hacer, serán perfectos, Will, porqué para mí eres el ser más perfecto qué existe en este planeta y todos los otros qué no conozco aún pero a tu lado pienso viajar.

Will no podía formular palabras, estaba demasiado embobado por las palabras qué la llorosa chica dijo sobre él y hacia él. Así qué solo tomó delicadamente su mentón, alzando su rostro y apreciándolo.

Esas mejillas qué se sonrojaban tan seguido cuando estaba con él, esos hermosos ojos azules qué le hacían recordar al hermoso y despejado cielo qué se mostraba todos los días días Hawkins, su pequeña pero respingada nariz qué tanto amaba y lo hacía morir de ternura cada vez qué la fruncia, sus preciosas y pequeñas pecas qué se expandían de su nariz hasta sus mejillas, recordandole a las lindas estrellas qué decoraban el cielo nocturno cuándo probó por primera vez sus labios, oh sus labios, cuanto amaba poder besarlos y sentir cómo encajaban a la perfección con los suyos, su rosado natural y la suavidad de los mismos, hacían qué cada vez qué lo tocasen se sintiese en el mismísimo cielo.

- Te amo, Max. -Pudo hablar finalmente el chico, dejando pequeños besos por todo su rostro.- Te amo demasiado y gracias por estar conmigo.

La risa avergonzada de la chica era tapada por los "Te amo" qué Will le decía cada qué besaba su rostro, llegando finalmente a sus labios, los cuales besó con felicidad e ímpetu mientras los tapaba a ambos con unas sábanas.

Quedándose dormidos entre besos, caricias y confesiones de un hermoso amor qué aún estaba creciendo entre ellos.

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Ya sé, capítulo corto, pero este es un poco de contenido del shipp, aunque tampoco hay mucho más además de eso, akfnlakd.

En fin, el próximo capítulo estará muy bueno así qué esperenlo por favor.<3