4: Sueños y metas

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Yoongi sentía sus manos sudar mientras sostenía el teléfono y el cigarrillo. Estaba loco, su mente no dejaba de decirle eso. ¿Qué tal si Jungkook no quería verlo? Quizá solo lo invitó por cortesía, porque se veía patético pidiéndole verlo de nuevo.

Se sentía aún más nervioso rodeado de todos esos estudiantes que lo miraban, esos niños tenían lo que Yoongi nunca tuvo y deseaba: una oportunidad, padres con posibilidad de darles educación y una vida digna; los alumnos eran mucho más jóvenes que él ¿Cuántos años tenía Jungkook? Esperaba que no fuese menor de edad, no quería terminar preso. Ya había estado detenido, y no era bonito, la prisión seguro era peor.

Pero sintió un alivio al ver a Jungkook caminar directo hacia él y con una sonrisa tímida, charlaba de algo con sus amigos, y cuando Yoongi lo saludó de lejos Jungkook correspondió el gesto. Notó a las chicas que estaban con él golpearlo y el chico a su lado riendo.

¿Hacía cuánto que él había dejado la escuela? Ya había perdido la cuenta, lo extrañaba,  ni siquiera había terminado la escuela media.

Jungkook al fin se acercó a solas, dejó atrás a sus amigos.

—Hola Jungkook ¿nos vamos?

—¿A dónde vamos?

—podemos ir a comer, te enseño a conducir la motocicleta ahora que estoy en mis cinco sentidos...¿y después vamos por unas cervezas?

Jungkook asintió sonriendo, y su sonrisa era lo más lindo que Yoongi había visto.

—¿no estás resacado?—Jungkook preguntó mientras se ponía el casco

—una ducha fría es infalible para la resaca, además yo pude dormir más que tú—Yoongi respondió mientras arrancaba la motocicleta. Sintió las manos de Jungkook en sus hombros—te recomiendo sostenerte bien

Jungkook entonces cambió su agarre y envolvió la cintura de Yoongi, esperando que nadie en la escuela malinterpretase aquello. Yoongi sintió un cosquilleo, dicha sensación lo hizo decidir que quería ser sostenido por esos brazos por largo tiempo.

Jungkook olvidó su preocupación, el cuerpo de Yoongi se sentía tan delgado y frágil entre los brazos de Jungkook y su corazón latía acelerado, pero era una sensación agradable.

Jungkook amaba la pizza, pero en esta ocasión estaba adorando más el momento. Yoongi era muy interesante, divertido e ingenioso, sabía hacer la convivencia muy cómoda pues no todo el tiempo hablaba él, no dejaba de hacerle preguntas a Jungkook y opinar sobre sus respuestas o añadir algo sobre las mismas.

—¿Qué edad tienes?—Yoongi inquirió

—soy del 97

—eres cuatro años menor que yo, un alivio que seas mayor de edad no quería terminar preso

—¿Por qué terminarías preso? Ni siquiera hicimos mucho...

—¿ah no? ¿Querías más?

Jungkook se sonrojó y tomó refresco para no tener que responder

—pues yo si quería más—Yoongi añadió, ahora Jungkook estaba intensamente rojo, sonrió deduciendo cambiar el tema para comodidad del menor.—Jungkook ¿Qué harás cuando te gradúes de la escuela media? Ya es tu último año

mis padres quieren que entre a la facultad de derecho, tengo buen promedio así que ellos creen que si entraré, he estado estudiando arduamente para el examen de admisión

—así que eres buen estudiante, eres como un personaje de película, eres guapo, rico, inteligente...

—no lo soy...

King of Disaster - Kookgi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora