18: Solo entonces

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Jungkook sabía los horarios de sus padres, a esa hora ya estarían trabajando y los sirvientes ni siquiera lo vieron subir por la ventana a su habitación. Metió ropa, zapatos, sus cremas y lociones y demás en dos maletas. Se metió a la habitación donde escondieron sus consolas y videojuegos y los empacó también en una tercera maleta.

Se asomó con cuidado a los pasillos para que los sirvientes no lo vean llevarse adornos de valor, entró al estudio de su padre y abrió la caja fuerte que estaba escondida en un compartimiento secreto detrás del librero, sabía la contraseña, y no, no era el cumpleaños de Jungkook, tampoco el de su madre, mucho menos el cumpleaños propio de su padre, era el año en que ganó su primer juicio. Sacó dinero en efectivo, no todo por supuesto, estaba muy tentado, pero no quería darle más razones a su padre para que lo buscara. Además con sus consolas y videojuegos, más los ornamentos de oro podría conseguir más dinero.

Yoongi no aprobó esa acción, tuvieron una discusión cuando Yoongi regresó de trabajar y vio a Jungkook usando su ropa cara, la alacena y refrigerador llenos de comida y las cuentas pagadas.

—son mis padres, de alguna manera ese es mi dinero también —Jungkook se defendió 

—no es lo correcto Jungkook, robar nunca será la opción. Si tus padres se dan cuenta le echarán la culpa a los sirvientes, o peor, se darán cuenta que fuiste tú y te apartarán de mi lado.

—Yoongi, ya está hecho —Jungkook decía en un puchero, odiaba pelear con Yoongi —y no todo el dinero es robado, vendí mis videojuegos y consolas y la ropa es mía

Yoongi dejó salir gran cantidad de aire en un suspiro, tampoco le gustaba pelear con Jungkook, sus ojitos brillaban con tristeza y su labio se abultaba, sus mejillas se ponían rojitas, Yoongi no podía molestarse con esa linda cara.

—okay, no volverás a hacerlo—Yoongi amonestó—encontraré la forma de que podamos costearnos lo necesario ¿si?

—¡puedo cantar en la calle con Adora!

—ya veremos

—¡come! Es carne, hace mucho que no comemos carne, ya estás más delgado

Yoongi aceptó y dejaron la conversación ahí.

🎸🎤🎸🎤

Cuando Jungkook leyó la carta que la empresa de entretenimiento le envió, estaban en el restaurante donde Yoongi trabajaba, era su hora de comida y como siempre Jungkook lo acompañaba en dicha hora.

Se decían en voz alta que era genial, que Jungkook al fin estaría cumpliendo su sueño, que no tendría que preocuparse por la comida o techo o abrigo, Jungkook decía que era genial que Yoongi no tuviese que romperse la espalda con dos trabajos.

Pero la verdad es que ambos estaban preocupados por no poder verse.

Y es que la carta decía que Jungkook tendría que mudarse a la vivienda con todos los trainees, pues pasarían meses de entrenamiento exhaustivo por horas.

Era obvio, Jungkook y Yoongi sabían que era así, pero tenían la esperanza de que viviendo en Seúl no obligarían al menor a irse. Pero por supuesto la suerte no estaba de su lado.

—¿cuándo te tendrás que mudar? —Yoongi preguntó después de dar una mordida a su hamburguesa

—algunos trainees son foráneos, después de la prueba final tenemos un mes para prepararnos, despedirnos de las familias y etc...

—tengo un mes para seguir viendo tu precioso rostro.

Jungkook se sonrojó y arrugó su nariz.

King of Disaster - Kookgi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora