10. десять

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— Entonces ¿Cómo te ha ido? — YoonGi sintió aquella pregunta cómo una inquisición, que pasaba de cierto modo desapercibida por los ojos azules y la expresión amable del chico que tenía enfrente. Jimin le miraba como si ya supiera la respuesta de sus palabras, como si supiera todo aquello que YoonGi le iba a responder. — Jeongguk me ha contado lo que ha pasado, volviste a su departamento como perro arrepentido y te quedaste con él.

— ¿Él te ha dicho eso? — Alzó una ceja, tratando de asimilar las palabras con el joven. Claro que aquellas palabras eran algo que Jeongguk perfectamente podría haber dicho sin ningún tipo de preámbulo, sin embargo, YoonGi había hecho un acuerdo con él mismo sobre no suponer cosas de Jeon antes de que él pelinegro mismo se lo aclaré. Así evitaría todo tipo de malentendidos o conflictos que el futuro puede conllevar para la relación que tenían de entrenador y estudiante.

— No. — YoonGi asintió. — Pero la forma en que me lo contó me dio aquella sensación, ¿Cómo reaccionó Taehyung?   Supongo que después de hacer todo ese teatro de mala actuación debió haberse enojado en cierto grado. Aunque conociendo a Tae, sólo te ignoraría por un par de semanas, pero después se le pasaría. —  Bebió del trago dulce que se encontraba tomando.  Esperó un poco para que YoonGi respondiera mientras le miraba a través del otro lado de la mesa de la cocina. Después de unos momentos, frunció el ceño ante el inminente silencio del pálido y bajó el vaso, dejando toda actitud alegre de lado. — YoonGi... — Sonó en advertencia..

— No tuve la oportunidad de decirle, Taehyung estaba durmiendo cuando volví al auto. No quería que se despertará de golpe con el hecho de que no aceptaban su propuesta, sobre todo por el hecho de que estaba tan dispuesto a hablar con su entrenador. — Confesó, dándose cuenta a medida que sus palabras salían, que en realidad no tenía sentido que no le hubiera dicho.

— YoonGi, no es excusa alguna. — Suspiró, tratando de no agregarle más peso a su amigo. — Han pasado ya dos días, debes decirle cuánto antes ¿Cómo sabes que ya no se comunicó con Taemin? Quizás el chico ya venga en camino para entrenar a Jeon y se lleve la ligera sorpresa de que rompió un contrato por nada. — Se encogió de hombros, terminando la última gota de licor que tenía en su vaso de cristal. —  Entiendo que estés en la duda, pero que lo evites significa que puedes crear un problema innecesario.

— Tienes razón, pero prefiero esperar un poco. Taehyung se está volviendo una bomba de tiempo y necesito hacerlo cuando Jeongguk no esté desconfiando sobre sí mismo, por eso me voy a quedar con él. — Suspiró levantándose de la mesa. —  hubieras visto la manera en que me abrazó, fue extraño. Una sensación rara inundó esta parte. — Se tocó el pecho. —  en el momento en que colocó sus brazos alrededor de mi cuerpo, nunca había sentido así y menos esperaba hacerlo por parte de quien literalmente me odia en todos los sentidos.

Jimin le dio una mirada severa por unos segundos y luego volvió a lo suyo.

— ¿Hace cuánto no tienes pareja? — Aquella  pregunta provocó que YoonGi le golpeara el brazo de un zape. El pálido frunció sus cejas y le reprendió con una mirada intensa. — Quizás solo llevas mucho tiempo solo.

— Es mi estudiante Jimin, nos llevamos por tres años. No es correcto que hagas ese tipo de bromas. — Suspiro dejando la conversación, caminando hacia la sala de estar, para despejarse un poco de la abrumadora conversación con Jimin. — Además, él todavía es un niño, es imposible que pueda salir conmigo.

— Pronto cumplirá veinte años y créeme que puede llegar a ser más adulto que tú. — El pálido frunció el ceño, movió la cabeza con chasquido de lengua y se dedicó a ordenar un poco, deseando en el fondo que aquello le ayudará a desviar su cabeza de las palabras del rubio.

Meraki [Kookgi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora