Astrid Huntter.
El corazón me late a mil por hora, esto se me esta saliendo de las manos y todo por culpa de Christofer y su bocota.
El debió hablar con los chicos y resolver el problema en el que me metió.
Pero no, estoy sola en esto o mejor dicho, me dejo sola en esto.
Las manos me sudan mas de lo normal y mis pasos son mas inseguros de lo que me gustaría.
Tomo una gran bocanada de aire y por fin llego hasta ellos.
—Hola chicos —logro decir en un tartamudeo.
Ellos ni se inmutan por mi presencia, solo me miran de pies a cabeza inspeccionándome de una manera muy aterradora, no dicen ni una sola palabra y yo ya estoy al borde de un colapso nervioso.
¿Estoy temblando también?
¡Ay no puede ser! ¡Perdí a mis amigos!
¡Me voy a quedar sin amigos por el resto de mi vida! ¡Nadie me va a querer!
¡VOY A MORIR SOLA!
—Astrid.
Espera un momento, ¿Keyla acaba de hablar? ¿Acaba de decir mi nombre?
Por estar pensando en que no me querían no me fije en que tenían una sonrisa boba estampada en sus rostros.
—Debiste ver tu cara de susto. —esa vez fue Ryan quien hablo entre risas.
Yo estaba pasmada.
—Seguro estabas pensando en que no te queríamos. —siguió hablando Keyla.
—O en que ibas a morir sola y sin amigos. —agregó Ryan.
Se estaban burlando de mi. Ahora era yo la que estaba molesta.
Los mire con furia y pase entre ellos para entrar al colegio y dejarlos atrás.
Estaba indignada.
Ellos me siguieron y entre risas se disculparon por asustarme de esa manera.
—La verdad no se por que te molestas. —expreso Ryan aun riéndose. —Si tu hubieras visto tu cara también estarías riendo.
—No lo creo fijate.
—Bueno, bueno. — exclamó subiendo ambas manos en forma de rendición.
—Lo importante es que no estamos molestos contigo. —intervino Keyla.
—¿Christofer hablo con ustedes? ¿Que les dijo para que cambiaran de opinión?
—Nada que tengamos que decirte. —soltaron al unisono.
—¿Ahora se ponen de acuerdo para esconderme cosas? —estaba indignada una vez más.
—No te estamos escondiendo nada, Astrid. —replicó Keyla.
—No es nada importante. —agregó Ryan.
Llegamos al salón de clases y tomamos asiento juntos como de costumbre.
[...]
El timbre de salida anuncio la hora esperada por todos los alumnos que salieron disparados de sus asientos para dirigirse a sus casas.
Yo no tenia tanta prisa al igual que mis dos amigos que nos encontrábamos ya solos en el salón aun guardando nuestras cosas.
—¿Planes para hoy? —pregunto Keyla entusiasmada parándose frente a mi.
—Yo digo que tarde de helado en mi casa. —comentó Ryan haciendo lo mismo que mi amiga de modo que ahora los dos se encontraban frente a mi.
—Yo digo que me apunto. —no iba a oponerme a la idea y tampoco era mala, es decir, no es como que me apeteciera volver a tenerlos en mi casa y no me malinterpreten, me refiero a que no estoy muy cómoda con la idea de otra escena como la de la ultima vez, estar reunidos en mi casa ya me tiene un poco traumatizada.
ESTÁS LEYENDO
La Biografía De Mi Boca ✓ [Editando]
Fiksi RemajaElla, sencilla y muy tranquila. Ellos, locos por ella. Todo cambia en cuestión de segundos. No creo que sea una historia de amor muy bonita o muy absurda típica de los libros pero puede que se sientan identificados con esto, que va más allá de unos...