Para YoonGi era increíble que TaeHyung se haya dejado endulzar el oído por las palabras de JungKook, tanto era así que habían escapado de la preparatoria, faltando a todas las clases (siendo una supuesta conclusión). Al chico pálido le ponía de nervios lo que pudiese suceder, no quería ver más a un Tae lastimado. Su pierna se movía desesperada y sus dedos golpeteaban la pantalla de su celular sobre la mesa.
— Señor YoonGi, ¿todo bien? — Hablaba el profesor de la clase.
— Eh, sí, una disculpa, iré al baño — respondió poniéndose de pie —.
Dio pasos acelerados para estar lejos de su salón y así poder abrir el chat de TaeHyung.
No te he visto en la escuela hoy. ¿Has faltado?
¿Te encuentras bien?
Mensajes que recién el de pelo azabache había enviado, ansioso por saber qué sucedía. Sin embargo, esos mensajes no le habían llegado al rubio y claro, cómo le iban a llegar si estaba en medio de la majestuosa naturaleza del campo y el río.
Las mochilas de aquellos estudiantes posaban en la base del árbol que les daba sombra. TaeHyung miraba hacia lo lejos, inmerso en su último recuerdo de aquel lugar donde también había drogado a su mejor amigo.
— Hace falta respirar aire limpio y alejarse de la ciudad, ¿no? — mencionaba el pelinegro.
TaeHyung volteó a mirarlo, topándose justo con un JungKook retirando su camiseta, mostrando aquellos músculos de su pecho. El rubio tragó saliva y asintió, desviando su mirada con un sonrojo delatador. El más alto siguió retirando esta prenda hasta dejarla sobre su mochila, prosiguiendo con sus zapatos y calcetas.
— ¿No quieres entrar al río, Taetae?
— Debe estar helada el agua...
— Vamos, no seas aguafiestas — rió JungKook que golpeó suavemente la espalda del rubio —. ¿Te quedarás observándome nadar?
Tae soltó un suspiro y negó avergonzado, mordiendo su labio inferior.
— No quiero nadar solo, Kim TaeHyung — cambió el tono de voz del pelinegro que se colocó frente a su mejor amigo —.
El rubio asombrado y sin esperar aquel cambio de voz más bajo y grueso, desvío su mirada y relamió sus labios discretamente para relajarse ante aquella extraña situación que parecía seducción.
Las manos de JungKook fueron hasta la camisa del menor, desabotonando botón por botón, mientras miraba al contrario a sus ojos que mantenía desviados al suelo.
— No quiero que te sientas incómodo, Taetae, quiero que volvamos a ser los mismos de antes — terminaba de desabrochar su camisa para dejarla igualmente sobre su mochila—.
— ¿Y si me sigues gustando?
Un silencio.
Parecía que TaeHyung hablaba en el momento incorrecto con el tema incorrecto.
JungKook se alejó para quitarse sus propios pantalones, corriendo sin decir nada hasta el río donde se echó un clavado y salió a los segundos.
— Uh, está helada — jadeaba del frío, mientras movía su cabello —. Ven, Taetae, mete aunque sea tus pies al agua, anda.
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• | Viagra | • KookTae • |+ 18|
FanfictionAdvertencias antes de leer: ≥ TaeHyung bottom(pasivo) y JungKook top (activo). ≥ Contiene lenguaje explícito (no tanto, pero sí una que otra cosita). ≥ Contenido sexual (lemon). Síntesis de la historia: Un secreto tiene guardado Tae, desde que tenía...