—¡Lili!—Jennie tarareó alegremente una vez que Lisa entró en la cocina. Se acercó a la chica de ojos mieles y levantó un plátano—Te extrañamos.
Lisa miró a sus amigas, quienes estaban
observando su interacción desde el sofá. Ella levantó una ceja y todas se dieron la vuelta, sabiendo que las habían atrapado.—¿Necesitas que pele eso?—preguntó Lisa, mirando el plátano que Jennie sostenía.
—No—Jennie negó con la cabeza. Se quedó mirando el plátano por unos momentos antes de llevárselo a la boca e intentar morderlo. Rápidamente apartó el plátano y lo miró con disgusto—Lo rompí—jadeó ella.
Lisa se rió y negó con la cabeza.
—No lo rompiste—tomó el plátano de las manos de Jennie y lo peló hasta la mitad, devolviéndoselo—Solo tienes que pelarlo primero.
—Mi salvadora—Jennie tarareó alegremente, mirando el plátano y luego a Lisa—¿Quieres?—inclinó la cabeza hacia un lado y sostuvo la fruta frente a la cara de Lisa.
Encogiéndose de hombros, Lisa se inclinó y le dio un mordisco al plátano. Jennie rió emocionada.
—Gracias—Lisa se rió ante la emoción de Jennie.
—Gracias—repitió Jennie. Ella asintió una vez y le dio un mordisco al plátano, tarareando en señal de aprobación.
—No, se supone que debes decir 'de nada'—señaló Lisa a Jennie en explicación—Si alguien te da las gracias, dices 'de nada'.
—De nada, gracias—Jennie asintió alegremente y se dio la vuelta, caminando hacia el mostrador y sentándose en uno de los taburetes. Lisa se rió del intento de Jennie, apoyándose en el mostrador y mirando hacia atrás en la sala de estar. Sus amigas desviaron la mirada rápidamente, pero Lisa sabía que todavía la estaban observando.
—Tienes una linda risa—observó Jennie. Se inclinó sobre el mostrador y puso sus dedos sobre los labios de Lisa, como si pudiera oír su risa con un toque—Me gusta cuando te ríes—reafirmó Jennie asintiendo.
Las mejillas de Lisa se pusieron rojas y sabía que las otras chicas estaban sorprendidas por la facilidad con que ella y Jennie se estaban llevando bien.
—Supongo que debería hacerlo más a seguido, entonces—se encogió de hombros, sonriendo cuando vio a Jisoo decir 'Oh, Dios mío' a Rosé por el rabillo del ojo.
—Sí, de nada—sonrió Jennie con la boca llena de su plátano. Lisa soltó una risita, lo que hizo que Jennie sonriera aún más.
—¿Qué hay para cenar?—Jisoo entró en la cocina, fingiendo que no había visto todo el encuentro entre Lisa y Jennie. La chica de ojos mieles se encogió de hombros y comenzó a guardar las compras.
—Esta es la cena—anunció Jennie, sosteniendo una caja de macarrones con queso para que Jisoo la viera.
—Buena elección, Jendeukie—se rió Jisoo, extendiendo el puño a Jennie. La chica más pequeña lo miró inquisitivamente—Se supone que debes chocar tu puño, algo así—se rió Jisoo, extendiendo su puño hacia Lisa, quien le devolvió el gesto.
—Oh—Jennie asintió, chocando sus puños. Lisa y Jisoo se rieron y Jisoo negó con la cabeza.
—No, choca mi puño—explicó, levantando su puño frente a Jennie. Jennie asintió una vez y levantó su puño para chocar con el de Jisoo. Una vez que lo hizo, Jisoo empujó su puño hacia atrás e hizo un ruido de explosión con la boca. Jennie rió emocionada y luego hizo lo mismo.
—Hazle a la chica su cena, Lis—bromeó Jisoo, arrojando la caja de macarrones con queso a Lisa. La chica de ojos mieles le hizo una mueca a Jisoo antes de agarrar una olla y llenarla de agua para luego así ponerla en la estufa a hervir.
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Yellow (Jenlisa) -CORRIGIENDO-
Fiksi PenggemarPrimer libro de la trilogía 'YELLOW' Lalisa Manoban odiaba a Jennie Kim, simple y llanamente. Por supuesto, ¿quién podría culparla? Jennie había sido la que leyó sus textos privados de Lisa frente a toda la cafetería, obligándola a salir del armario...