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En ese momento lo único que pude hacer fue que el nudo de mi garganta saliera de mí, temblando y con dificultad para respirar vomite en el lugar donde estaba, agradecía que nadie estuviera pasando por ahí en ese momento.

Las lágrimas no salían, simplemente no podían salir. No sabia si en mí había enojo, asco o tristeza.

Mi cabeza daba miles de vueltas, no me sentía bien, era como si... él me diera asco.

Camine unos pasos hasta que no pude, ni siquiera podía mantenerme bien de pie, de un momento todo estaba cayendo a pedazos, me concentré en entrar a la mente de Diego, al fin servían para algo estos poderes de mierda.

Él sabría en donde estaría, no era idiota.

[•••]

Estaba en un momento de shock en donde no podía pronunciar una sola palabra, dentro de la habitación estaba Allison y Vanya mientras yo veía a la nada con un vaso de agua en mis manos.

— ¿Cómo es que se te ocurre salir sola? —me cuestiono histerica Allison— ¡es peligroso, Ocho!, no conoces nada de allá afuera ¿qué tal si te pasaba algo malo? —ella no cerraba la boca y eso me ponía peor, no hablo de tristeza, hablo de enojo.

—No creo que sea lo mejor regañarla, Allison —comentó Vanya viendo mi cara de desinterés a lo que decía Allison.

— ¿Y que quieres que haga, Vanya? ¿qué le de un premio por salir de casa sin avisar, sabiendo que jamás ha salido más que para misiones? —cuestionó burlesca.

No dije nada, no me importaba en lo absoluto.

— ¿Qué paso, Aitana? —pregunto posando su mano sobre mi espalda y sobando esta.

—Él me engaño —solté en un hilo de voz comenzando a sentir mis ojos húmedos.

Las manos de Allison se posaron sobre su boca levemente abierta por la impresión, Vanya solo vio con cara de preocupación a la morena.

—Ocho... —murmuro tres poniéndose frente a mí de cuclillas.

—Fue mi culpa —dije sin más, las dos negaron molestas.

—Jamás sería tu culpa.

—Claro que lo es, no fui suficiente para Cinco —comencé— es que hubieras visto como la veía, como Cinco veía a esa chica, lo entenderías si la hubieses visto. —comenzaba a sofocarme— la veía de una manera en la que a mí nunca me vio —remarqué las palabras. Tape mí cara con mis manos comenzando a sollozar— ¿¡QUÉ HICE MAL!? —cuestione casi en grito quitando mis manos de la cara— ¿qué es lo que ella tiene que yo no? —volví a preguntar.

Las dos me abrazaron mientras me escuchaban sollozar, a este punto me daba igual si alguien me escuchaba.

— ¿No soy lo suficiente linda para él? ¿o lo suficiente delgada? ¿lo suficiente inteligente o comprensiva? ¿qué hay de malo en mí? —pregunte con desesperación viendo al techo, esperando una respuesta, sollozaba cada vez más fuerte.

Era ridícula.

—Ocho, basta, no hay nada malo en ti —murmuro Vanya mientras me atraía hacia ella para abrazarme.

Las horas pasaban y mi llanto no paraba, ¿qué más podría hacer?

Estaba acostada en mi cama, Vanya estaba sentada en la orilla mientras me veía y Allison estaba sentada en la silla de mi escritorio. Suspiraba entrecortado, mis manos temblaban levemente y mis parpados pesaban, sin verme al espejo supe que estaba demacrada, posiblemente mi nariz estaba roja al igual que mis mejillas y ojos.

Poco a poco sentí la pesadez de mis ojos, estos se cerraban mientras soltaba un largo suspiro.

Todo el día la pase encerrada en mí habitación, ha decir verdad, no tenía ganas ni de existir. Suspire sentándome sobre la cama, sorbi mi nariz y sentí la inchadez de mis ojos.

A mí lado estaba Vanya sentada en una de las sillas de mi cuarto mientras leía un libro mientras que Allison se veía en un espejo probando los productos que se encontraban en mi tocador, claro que no me molesto, teníamos esa confianza de hermanas a pesar de no convivir tanto en nuestra niñez.

Al momento de levantarme para sentarme en mí cama Vany se reincorporó quitando su vista del libro.

— Ocho... —murmuro con voz suave sentándose ahora a mí lado. Suspire cansada.

— ¿Él vino a buscarme? —pregunte haciendo bufar y rodar los ojos a Allison. Fue lo primero que vino a mí mente, sé que le importo.

—No Aitana —escupió molesta— el idiota de Cinco no vino y probablemente no vendrá.

— ¿Qué tal que si? —cuestione irónica.

— ¿Qué te hace pensar que te buscara después de esto? jamás lo hecho en momentos importantes menos lo hará para dar la cara.

—Tal vez él aún no sabe que yo lo sé —dije con obviedad.

—Lo dudo. —se levanto del tocador para posicionarse a un lado de Vanya, solo que ella de cuclillas— los chicos ya le hicieron un show —termino de decir de lo más normal.

— ¿Qué?, ¿y no pensaban en decirme? —pregunté molesta.

— ¿Para qué? ¿para qué vayas a buscarlo, defenderlo y rogarle? jamás —negó— y sé que por tu retorcida mente pasa el pedirle perdón.

Me quede callada unos segundos.

— Él no sería capaz de hacer eso —Allison me mando una mirada esperando a que me retractara, pero no lo hice. Vanya, quien solo veía negó con la cabeza en forma de desaprobación— escuchen —hable antes que me interrumpieran— sí, Cinco me engaño, pero... ¿qué tal si esa chica fue la que lo sedujo? —solté con molestia.  

— ¿Es una broma?, ninguna de las dos tiene la culpa, él único culpable aquí es Cinco. Apuesto lo que sea a que Cinco jamás te menciono o nos menciono en general cuando la conoció, ¿cómo supones que ella sabría que Cinco tenía una relación? es más que obvio que él no te dio tu lugar como su novia, así que deja de culpar a alguien que no sabia de esto. —terminó por decir Allison.

—Lo primero que alguien hace es preguntar si estas en una relación —dije— ¿por qué ella no hizo lo mismo?

— ¿Y si ella pregunto, pero Cinco simplemente te negó? —contraataco mi pregunta.

—Él no haría eso —murmure.

— ¿Qué te hace pensar que no lo haría? —pregunto Vanya después de minutos en silencio.

—Yo confió en él y sé que me ama aunque lo demuestra muy poco, ninguna de ustedes lo conoce realmente —bufé molesta.

Ambas negaron, de nuevo.

—Di lo que quieras —murmuro Allison ya sin darle importancia a lo que pasaba o decía.

—Debo ir a hablar con él —solté después de unos segundos de silencio. Me levante de mí cama, camine hacia la puerta, pero la voz de Vanya me detuvo.

—Él no está —habló tímidamente— salio hace una hora.

Me gire confusa.

—Maldito idiota —murmure. Hablaría seriamente con él, es ella o yo.

𝖤 𝖥 Í 𝖬 𝖤 𝖱 𝖮 || Five Hargreeves [✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora