8: Despedidas y otras cuestiones.

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Para cuando habían llegado a su destino, los defensores sabían jugar rayuela y matatena, mientras que los invitados se habían graduado de vals y de esgrima para principiantes.

También, Matt había escuchado relatos impresionantes por parte de los piratas y al parecer, ahora sabía la diferencia entre duendes y trolls. Había escuchado, a su vez, historias sobre las estrellas cada noche y había tocado más el piano en tres días de lo que había hecho en toda su vida.

— Y por allá está Lira — Frank tomaba su brazo con delicadeza y lo guiaba hacia dónde seguramente se encontraba en el cielo — no es mi favorita, son demasiado sentimentales ahí — murmuró mientras trazaba la forma de la constelación en la palma de su mano.

— Frank... — le dio la vuelta a su mano y le dio un pequeño apretón — ¿p-puedo pedirte algo?

— Depende de lo que sea.

— No sé cómo luces. Me hago una idea, pero, podría saberlo mejor si me dejaras tocar tu rostro, si me lo permites, claro — dijo un poco dudoso, mientras que el otro solo le miraba sin decir nada, y a pesar de no verlo podía sentirlo haciendo eso — no tienes que hacerlo si no quieres — se apresuró a decir.

Frank no dijo nada, simplemente guio su mano hasta su rostro y la dejó reposar sobre su mejilla. Era una sensación extraña el sentir las manos de alguien más recorriendo su rostro, sin embargo, valía la pena al ver las expresiones que hacía el otro al sentir algo que no era como se imaginaba.

Frank tenía una piel suave, pero con una consistencia particular, nada parecido a lo que había sentido en su vida, parecía, de alguna forma, arenosa, como si estuviera a punto de derretirse entre sus dedos.

Tenía una barbilla contundente, que raspaba contra los dedos de Matt, y labios irregulares en una línea neutra. Tenía la nariz ancha, desigual y un poco rota. Eso probablemente era culpa suya.

Sus ojos estaban cerrados y Matt podía sentir las bolsas debajo de ellos, nacidas de interminable vigilancia noche tras noche en el cielo. El espacio entre sus cejas era profundo, trincheras hechas por fruncir el ceño y rugidos enojados, y líneas a través de su frente más de lo mismo.

Sus dedos se perdieron en el pelo de Frank. Era tan grueso como la lana de acero, rizos obstinados que se negaban a controlarse.

Terminó por bajar discretamente su mano por el cuello del otro, acariciando su piel lentamente, provocando que esta se encrespara con escalofríos de por medio.

Frank agradecía que el otro no pudiera verlo en ese momento porque brillaba en más de una forma.

— Oh — escucharon la voz de Danny Rand detrás de ellos, haciendo que rápidamente se separaran — Jessica quería que supieran que llegaremos al mercado en cuanto salga el sol, para que tengan tiempo de arreglar sus cosas y de dormir.

Frank lucía molesto por haber sido interrumpidos, sin embargo, un sonrojado Matt Murdock le dedicó una sonrisa y un asentimiento como forma de agradecimiento. El rubio parecía tener intenciones de irse, pero no pudo evitar girar sobre sus talones.

— Quería decirles que no es buena idea lo que van a hacer — dijo nerviosamente mientras miraba el suelo — una vez conocí a alguien a quien estafaron con algo parecido y ahora es una ardilla.

— ¿De qué estás hablando? — preguntó exasperado Castle.

— Todos sabemos la razón por la que se dirigen al mercado — se relamió los labios antes de seguir — es peligroso, pero es su decisión.

— Y según ustedes, ¿por qué razón nos dirigimos ahí? — preguntó cómo si se dirigiera a un niño pequeño.

— Para conseguir unos ojos nuevos, obviamente — se encogió de hombros, y a pesar de no ser invitado, se sentó con ellos en el suelo — me imagino que le vas a ayudar a elegir unos bonitos, — señaló a Frank — aunque los ojos de elfo puedan verse bien con todos esos colores exóticos, no se dejen llevar por esto. Tienen una visión muy reducida por todo eso de su magia — hizo un ademán con la mano restándole importancia — oh, conozco una bruja muy buena, quizás ella sepa de alguien de confianza, si quieren podría darles su dirección...

Stardust [Fratt]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora