Capítulo 16

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Edmund dejo silenciosamente la habitación después de haber descansado un par de horas, la noche aun estaba presente y el frio de la cubierta termino por despertarlo, el silencio del mar era abrumador y la oscuridad provocaba escalofríos.

Edmund camino apresuradamente hacia la habitación donde estaban los enfermos, por suerte no eran demasiados, Lucy ya se encontraba allí, cambiando los paños de las frentes de los enfermos. Edmund no quería que Lucy tuviera que pasar por esto, pero ya era demasiado tarde como para mandarla de regreso. 

— Edmund, no te escuche entrar. — Ed le dedico una sonrisa al rostro cansado de su hermana.

— ¿Haz dormido? — La menor asintió, aunque se podía notar el agotamiento en su cuerpo. - Por que no vas a descansar. 

— Estoy bien, no puedo dormir. 

— ¿Ocurre algo?

— El cordial debería ser suficiente, pero no lo es...no entiendo que pasa.—- Edmund suspiro.

— No sabemos que es esto, pero lo he visto antes. 

— ¿Donde?

— En una isla donde paramos una vez con Caspian, tal parece que ese extraño polvo los momifica de alguna forma...

Lucy se quedo en silencio durante unos minutos, luego se levanto rápidamente y salió de la habitación bajo la confusa mirada de Ed. Volvió minutos después con un bolso de tela que nunca antes había visto, comenzó a sacar pequeños frascos con aceites y algunas hierbas que Edmund supuso eran medicinales. 

— ¿Qué es todo esto? 

— Estuve aprendiendo sobre medicina natural en mis tiempos libres, no quería solo depender del cordial. 

Edmund acarició la cabeza de Lucy orgulloso, estar tan pendiente de sus propias cosas en el barco evitó que se diera cuenta de lo grande y grandiosa que se había vuelto su hermana menor.

— Eres increíble Lucy. — La menor evitó su mirada algo sonrojada, los halagos no eran su fuerte.

Pasaron el resto de la mañana ayudando con las tareas básicas, al estar casi la mitad de los tripulantes enfermos había muchas más cosas que hacer por el resto. Caspian había dormido casi todo el día, cerca del atardecer fue que despertó alterado salió a la cubierta al no ver a Edmund a su lado.

— ¿Caspian? ¿Te sientes bien? — El recién nombrado lo miró con el miedo impregnado en los ojos, Edmund sintió un nudo en la garganta. — Hey . . .

— Dijiste que estarías ahí cuando despertara. — Susurro Caspian, había apoyado su cabeza en el hombro de Ed mientras este lo abrazaba.

— Lo siento, tenía que ayudar al resto.

Caspian se quedó ahí un par de segundos, tratando de regular sus latidos y recuperar el aliento, cada vez se sentía más enfermo.

— Lamento interrumpir, pero no creo que Caspian deba estar fuera de cama. — Mencionó Lucy sonriendo cómplice, era la primera vez que tenía oportunidad de hablar con Caspian.

— Lucy tiene razón, debes volver— Edmund ayudó a que Caspian comenzará a caminar y lo guío por la cubierta con cuidado.

Llegaron a la habitación y Caspian terminó siendo arropado por Ed.

— Edmund ¿puedes ir por agua fría y unos paños? — El mayor asintió y salió de habitación rápidamente.

El lugar quedó en un total silencio, Caspian miraba intrigado a Lucy y esta solo podía sentir aquella intensa mirada en su espalda.

— ¿Eres hermana de Edmund? — Preguntó sin rodeos.

Lucy se dio vuelta y asintió con una sonrisa.

— No te pareces mucho a él...

— En realidad él se parece más a Susan y yo a Peter — Lucy se acercó y noto lo roja que estaba el rostro de Caspian — Tienes fiebre— Afirmó.

— Tu hermano no hablo mucho de ustedes.

— No me sorprende, tampoco hablo mucho de ti, pero puedo notar lo mucho que te estima — Respondió la menor.

— Edmund es genial — Lucy comenzó a creer que Caspian comenzaba a delirar por la fiebre.

— No te pareces en nada a todo lo que se dice de ti — Mencionó Lucy.

— Tu eres exactamente como las leyendas te describen.

— ¿Haz escuchado mucho sobre nosotros?

— Prácticamente desde que era un infante.

Lucy dejo salir una risa incomoda, aun se sentía extraña con todo ese tema, hace apenas unos meses había recuperado sus recuerdos y no era algo fácil de hablar en voz alta, ni siquiera con sus hermanos había tocado el tema. 

— Tengo muchas preguntas - Le hizo saber Caspian. 

— En otro momento podría responder algunas. 

Caspian pareció quedar satisfecho con aquella respuesta y no siguió insistiendo con el tema, segundos después Edmund entro con las cosas que Lucy había pedido, atendieron a Caspian y Lucy aviso que saldría a ver a los demás, Edmund quiso quedarse unos minutos mas antes de salir. 

Edmund se recostó a un lado de Caspian y apoyo su cabeza en el pecho durmiente de este, escuchando el latido tranquilo. 

— No tienes permitido morir Caspian... aun debo responderte. 







Algo cortito pero pronto saldré de vacaciones de invierno y me dedicare a avanzar esta historia <333, gracias por la paciencia y las buenas vibras, cada vez que me llega una notificación de ustedes me alegran el día 💖👀

𝐼𝑛𝑠𝑒𝑛𝑠𝑎𝑡𝑒𝑧 𝑛𝑎𝑣𝑒𝑔𝑎𝑛𝑡𝑒  [𝐶𝑎𝑠𝑚𝑢𝑛𝑑]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora