Pasada una media hora, la velada parecía estar yendo de maravilla, o al menos eso intuía Edmund, quien se había esforzado en parecer alguien dócil y algo manipulable, al menos de esa manera podía crear una cortina de humo, metafóricamente hablando.
En un momento, Edmund dejo caer su copa y el fuerte estruendo del vidrio quebrándose se escucho por todo el salón, el cual quedo en un profundo silencio, Eirle observo a Edmund y lo noto pálido, mas de lo normal, su rostro casi estaba del color del papel, se acerco al chico y toco su rostro, notando lo frio que estaba, dirigió su mirada a la pequeña Melys, quien capto enseguida el mensaje.
- ¿Ocurre algo?
- Me siento mareado, muy mareado. - Explico, haciendo una arcada la cual cubrió con su mano, - ¿Crees que pueda ir al baño? - Pregunto de forma lastimosa.
- [El pregunta si pueda ir al baño, mi señor, al parecer tiene nauseas]
Eirle asintió.
Cuando Edmund pensó que su plan había salido a la perfección y había comenzado a caminar hacia fuera del salón, observo como Melys y 2 guardias mas venían detrás de el.
- ¿Es necesario que vayan conmigo? me da algo de vergüenza que me vean vomitar.
- Mi señor no quiere que lo dejemos solo, y él no puede acompañarlo por sus invitados.
Perfecto. Pensó Edmund de manera irónica, ahora como demonios se sacaría a 2 guardias gigantes de su camino. Buenos, algo se le había ocurrido. Edmund fingió tropezarse y ambos guardias lo tomaron por los brazos para evitar que cayera, Edmund aun con la cabeza cabizbaja y con esa actitud y caminata enferme, se aferro al hombro de uno de ellos y fingió desmayarse.
- [¡Iré por el curandero!]- Dijo el otro guardia, corriendo en la dirección contraria.
Edmund abrió levemente los ojos y con un movimiento rápido tomo la daga del guardia y se la encajo debajo de las costillas, sin darle tiempo de siquiera respirar, cayo desplomado en el suelo, dejando un charco de sangre a su alrededor, Edmund observo como dejaba salir su ultimo suspiro y saco la daga de su cuerpo, se giro hacia Melys, quien se hallaba quieta, con los ojos abiertos y las manos en los labios, Edmund dudo, solo era su niña.
Cerro los ojos, pensó durante unos segundos y cuando los abrió, golpeo fuertemente la cabeza de la pequeña con el mango de la daga, con las manos temblorosas observo a la pequeña inconsciente junto al guardia muerto.
No había tiempo para arrepentimientos, debía buscar a Caspian y sus compañeros y salir corriendo de esa isla. Comenzó a correr hasta llegar a los jardines de aquel enorme palacio, como era de noche y las calles solo eran alumbradas por unas suaves antorchas, se encontraba algo desorientado, decidió seguir su instinto y comenzó a correr en la dirección que el creía la correcta.
Una vez Caspian observo el manto de la noche cubrir la isla, miro a Drinian quien ya se encontraba puesto en marcha, debido a que solo los iluminaban unas cuantas antorchas, los guardias no se habían dado cuenta de que Drinian estaba sobre sus rodillas intentado abrir la celda. Un vez se escucho un pequeño clic, Drinian abrió lentamente la reja de barrotes y, aun agachado, llego hasta la celda de Caspian e hizo lo mismo, demorando menos de 10 segundos.
Caspian salió de inmediato fuera de la celda y sin perder tiempo se ubico detrás del guardia que allí se encontraba y tomo con fuerza su cabeza para posteriormente girarla fuertemente, dejando caer el cuerpo muerto del hombre, al mismo tiempo Drinian encajaba la pequeña daga en el ojo del otro guardia y luego en su garganta, evitando que hiciera ruido alguno.
Ambos se observaron y decidieron tomar las armas de los guardias y comenzar la búsqueda de sus amigos y de Edmund, la adrenalina corría por sus venas mientras veían como un se acercaban a un grupo de guardias, pero ya era demasiado tarde para detenerse y pensar en otro plan, simplemente se abalanzaron hacia ellos con todo. enterrando las dagas de los guardias anteriores, notando como la sangre les salpicaba en el rostro y ropas. Una vez terminaron con los 4 guardias, escucharon unas campanas sonar y una gritadera de personas en todas direcciones.
- Es Edmund. - Dijo Caspian corriendo hacia la dirección de las campanas.
Ambos, al llegar al centro del pueblo, notaron como Edmund estaba luchando contra mas de 10 soldados junto a Reepicheep, Edmund se encontraba exhausto y podían notarlo por sus ya lentos movimientos, pero había acabado con al menos una doce de guardias, Caspian se unió a la lucha y Drinian se encontraba encargándose de los que iban llegando.
- Caspian...
- Ya estoy aquí Ed. . . Vamos a salir de esto.
- Se por donde podemos salir, deben seguirme cuando les diga.
Caspian asintió.
En menos de un minuto Edmund dejo escuchar un fuerte grito, alertando a los demás para que lo siguieran, en cuanto Edmund comenzó a correr, Drinian, Caspian y Reepicheep lo siguieron rápidamente.
- ¡Debemos volver por el resto!
- ¡Ya están muertos capitán!- Anuncio Reepicheep.
- ¡Pusieron sus cabezas en lanzas!- Termino por decir Edmund.
Un par de minutos después llegaron hasta el borde de un acantilado, los 4 se detuvieron y se observaron entre ellos.
- ¿Ahora que hacemos?- Pregunto Caspian.
Escucharon michos pasos correr en su dirección y notaron las antorchas aproximarse, Edmund pudo reconocer la voz de Eirle y sabia que estaba dispuesta a matarlo, así que tomo la mano de Caspian y observándolo fijamente le alerto de lo que ocurriría ahora.
- ¡Salten!
Y los cuatro muchachos desparecieron en el oscuro océano.
Les dije que intentaría publicar mas seguido (u‿ฺu✿ฺ)
¿Cómo están? ¿Cómo pasaron sus fiestas? Espero que todo este yendo bien para ustedes <3
Les cuento que ya estoy por licenciarme de mi carrera y comencé este año con todo el animo del mundo jijiji, y eso mismo (junto al apoyo de mi noviecito) estoy intentado actualizar esta historia y ver si este año la termino (❁'◡'❁)
OJALA LES HAYA GUSTADO MIS NIÑXS
¡LOS KERO MUCHO!

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𝐼𝑛𝑠𝑒𝑛𝑠𝑎𝑡𝑒𝑧 𝑛𝑎𝑣𝑒𝑔𝑎𝑛𝑡𝑒 [𝐶𝑎𝑠𝑚𝑢𝑛𝑑]
FanfictionLos ojos de Edmund habían comenzado a tener un extraño color verde brillantes, Caspian noto la falta de Ed y desesperadamente lo busco, encontrándose con la horrible escena de Edmund subiéndose a la baranda del barco, su presión bajo de golpe a ver...