Han JiSung y el gato platinado [#3]; minsung

21. El lienzo de Slytherin y la luna llena, pt. 2

Guía de colores de Han JiSung:

Rojo: enojo; Rosa: vergüenza; Violeta: amado; Azul: triste; Celeste: emocionado; Blanco: peligro; Amarillo: preocupado; Verde: asustado; Naranjo: confundido; Gris: dolido; Marrón: neutro; Verde menta: alegre; Negro: cansado; verde oliva: miedo; Rosa pálido: culpa; Rubio cenizo: nerviosismo; Crema: decepción. Magenta; frustrado. Turquesa: calma.

Capítulo 21

El lienzo de Slytherin y la luna llena, parte 2

Una vez que la puerta de la oficina de la profesora McGonagall fue abierta, los tres chicos que estaban en el pasillo se levantaron.

Kevin y SunWoo, sintiéndose despreciados, salieron con velocidad del lugar. Felix, por su parte, salió con sus hombros agachados y mirada baja, totalmente avergonzado de la desastrosa situación.

Pero a los tres chicos no les importó aquello. Cuando la puerta de la oficina de McGonagall se cerró y notaron que ya no había moros en la costa, rodearon a Felix.

—¿Y bien? —exclamaron los tres.

Felix, soltando un suspiro, asintió.

Con rapidez (o lo que podía permitirse con la velocidad que HyunJin tenía), los cuatro chicos se encaminaron hacia el séptimo piso, entre los pilares y la falta de energía, la Sala de Menesteres emergió entre las paredes, con la puerta tan idílica que, al cruzarla, emanó el mismo olor a hogar.

—Hogar, dulce-

—Sí, sí- ¡Al grano!

En la mesa, el Mapa del Merodeador estaba abierto y activo; solamente tenía algunos nombres de maestros que marcaron hace unos días para hacer la prueba de la función del mapa, pero con Felix sacando de su bolsillo un ligero cabello de pluma, supieron cuán beneficiados estaban.

—¿Cómo lo hiciste? —preguntó HyunJin, asombrado. Le quitó el pelo de pluma a Felix para verlo—. Es... precioso- en serio.

—Tuve que seguir cantando cerca de quince canciones para que, coincidentemente, hubiese una forma especial para quitar la maldición de alguien —contó Felix a su pésame, recostándose en uno de los pufs mientras veía a sus amigos trabajar—. Debí de colocarme de cabeza mientras la profesora McGonagall conjuraba un desencantamiento. SunWoo se burló de la situación, pero encontré detrás del escritorio de la profesora la pluma que enlista a los estudiantes de Hogwarts cuando nacen. Mientras regañaba a SunWoo, yo robé la pluma.

—Felix Lee, ¡eres un genio! —proclamó HyunJin, acercándose a él para darle un beso en la cabeza.

SeungMin le quitó sin tapujos el pelo de pluma a HyunJin y, con cuidado, lo colocó sobre el mapa extendido. Junto a JiSung y HyunJin, los tres colocaron sus varitas sobre el pelo y, conjurando en voz baja, el pergamino comenzó a absorber el mapa.

Fue un lapsus de quince minutos de concentración de hechizo; Felix se les unió para que el encantamiento fuera más rápido, y miraron el mapa por un tiempo absurdamente prolongado hasta que, al creer que habían perdido la esperanza, HyunJin apuntó hacia un rincón del mapa.

—¡Miren! ¡Hay dos nombres ahí!

—Oh —apuntó SeungMin hacia otro lado—. Miren- en las cocinas también hay dos estudiantes.

—Tenemos que marcar a Filch —recordó JiSung en voz alta—. Y a la jodida gata.

Pero los nombres de los estudiantes aparecían de a poco y en tiempos extensos entre uno y otro, haciéndolos concluir que, para la mañana del día siguiente, todo los nombres de las personas que estaban en Hogwarts estarían en el mapa.