" HOY QUE ESTAS COGIENDO MI MANO"
📅 18 de Julio
🕰️ Dos días después
📍Villa Olímpica, Port Orange
Sara estaba apoyada en uno de los muros de la Villa. Desde ahí se veía el puerto así como la playa de Daytona. Se apartó el pelo de la cara pensando en la locura que habían sido estos dos días. Desde que llegaron a la Villa Olímpica no habían parado. Entrenamientos mañana y tarde, un partido amistoso esa mismo día, y entrevistas a diestro y siniestro. Cuando llegaba a su habitación, simplemente se dejaba caer en la cama invadiéndole un profundo sueño.
Casi no había visto a Nico. Habían coincidido en el comedor durante alguna comida y apenas habían hablado. Los chicos de fútbol iban casi al mismo ritmo que ellas y por ahora, era agotador. Tenia que admitir que las ganas de verlo aumentaban cada día. Pensaba en él y ponía una sonrisa tonta. Los momentos que habían compartido juntos en el avión, habían sido increíbles. Echaba de menos hablar con él, su risa y sus manos en su cuerpo mientras la abrazaba. Cerró los ojos y una imagen de los dos durmiendo, le vino a su cabeza. Necesitaba estar cerca de Nico de nuevo y comprobar si esto que sentía era algo más que un simple encaprichamiento.
- Hola, rubia.
El cuerpo de Sara recibió una pequeña descarga eléctrica al escuchar esa voz. Se giró lentamente y recibió a Nico con una gran sonrisa, algo que él imitó igualmente. Mojó por instinto sus labios y volvió a fijar su vista en la bahía algo nerviosa.
- Hola, moreno –le respondió ella riéndose al tiempo que se quitaba los auriculares de sus oídos y pausaba la canción que escuchaba.
- Castaño más bien –le dijo él situándose justo a su lado.
- Cierto. ¿Cómo estás? Casi ni nos hemos visto desde que hemos llegado.
- Cansado Sara. Entrenamientos dobles, entrevistas, algún que otro encuentro con los patrocinadores...y encima el cabrón de Pablo que ronca más que su puta madre.
Sara río al escucharlo hablar así de su compañero. Una tonta sonrisa se instaló en su cara al mirarlo de nuevo de reojo. Eso que dicen que sientes mariposas en el estómago cuando te gusta alguien, era totalmente cierto en su caso. Pero no eran mariposas, era todo un catálogo de insectos y aves voladoras.
- Buen partido el de hoy –le dijo él procurando no mirarla tan fijamente. Porque si lo hacía, se perdería aún más en esos azulados ojos.
- Podía haber sido mejor –le respondió ella chasqueando su lengua- sobre todo si Terry se centrara más. Me tiene hasta el coño con su actitud.
- La verdad es que su juego deja mucho que desear...pero es muy buena defensa.
- Cuando quiere...por cierto, ¿tú sabes que ha pasado entre Gavi y ella? cuando nos dieron las habitaciones me contó que se habían enrollado pero que no quiere saber más de él porque es un niñato creído.
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El último latido/Nico González
FanfictionCuando Nico vió a Sara por primera vez sintió eso que llaman el primer amor. Ese que te enseña a amar, pero también a sufrir. Unieron sus almas desde la primera mirada. Se amaron con cada latido de su corazón. Crearon su pequeño mundo a miles de k...