Capítulo veintiuno.

363 20 1
                                    

Capítulo veintiuno.

Evelyn's pov

Apenas he dormido en toda la noche de la emoción que tengo en el cuerpo.

Llevaba años queriendo ir a un concierto, y más a uno de Blackbear, pero el dinero me lo impedía. Y por fin voy a poder ir a uno y verle en directo.

Pasaré la mañana con mis amigas y luego iremos juntas al concierto como llevo semanas planeando.

Me visto rápidamente con lo primero que veo que no está mal y cojo mis cosas guardándolas en un pequeño bolso que pueda ponerme alrededor del cuello.

En cuanto abro la puerta veo a Brandon listo para llamar al timbre.

—Vaya, te veo emocionada.

Me sonríe antes de abrazarme.

—Me gusta que estés feliz. Vamos, Tessa y los demás están ya en el restaurante esperándote para comer.

Asiento con una pequeña sonrisa, agradeciéndoselo, y le doy un pequeño beso en la mejilla caminando a su lado mientras hablamos de cosas cualesquiera.

Cuando llego al sitio ya están todos en la mesa, y nos hacen una señal con la mano a mí y a Brandon para ir donde ellos están.

—Siento llegar tarde, ¿habéis pedido algo ya?

—Claro que no, te estábamos esperando.

Asiento con una pequeña sonrisa y cuando el camarero se acerca a tomarnos nota no perdemos más tiempo y pedimos cada uno nuestra comida.

El resto de la mañana transcurre con normalidad y entre risas.

Pero yo apenas me doy cuenta de nada porque me siento demasiado nerviosa y demasiado emocionada.

Dylan: Esta noche, después del concierto, ven a mi casa. Tengo una sorpresa. ¿Alguna vez llegamos a tener una verdadera cita, pelirroja?

Sonrío mordiéndome el labio inferior cuando leo el mensaje que me acaba de llegar.

El día está yendo demasiado bien, de momento. Algo pasará seguro.

Así que intento tranquilizarme y no hacerme demasiadas ilusiones con nada para luego no llevarme una decepción.

Cuando terminamos de desayunar ponemos cada uno rumbo a su casa excepto las chicas y yo, que nos vamos a la de Tess para cambiarnos, comer e irnos directamente al concierto en autobús ya que está a las afueras de la ciudad.

—Esto va a ser alucinante, ya lo verás, Ev.

Mi emoción no parece ser la única, sino que mis amigas también están completamente alegres, con ganas de ir conmigo.

Y lo cierto es que nunca han sido muy fanáticas de este cantante.

Pero sé que lo hacen por mí. Por eso son las únicas personas en las que confío plenamente, en las que sé que nunca harían nada para hacerme daño. Ni ellas, ni Adam, ni Andrew.

—¿Qué vamos a comer? —pregunta Lauren, mirándonos. —Estoy hambrienta.

—Lauren, acabamos de desayunar —responde Stella, mirándola con diversión.

—¿Y?

Lauren se encoge de hombros de forma exagerada, lo que nos hace reír a todas.

—Pues he pensado que quizás podríamos preparar unos espaguetis a la carbonara o algo así.

—¿Pasta?

—Pasta.

—Mi favorita.

Asiento cuando escucho el último comentario de Lara, dándole la razón. La pasta también es una de mis comidas favoritas, por no decir la que más.

Todo por un idiota.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora