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✿ִ𝆬 Namjoon
Se encontraba en la misma habitación, de hecho era su estudio en donde decidían pasar las tardes cuando tenía trabajo por hacer, uno sentado en diferentes sitios, el en su silla del escritorio y ella en el sofá cama que conservaba desde su debut.
Nam solo veía como su novia pasaba los dedos por el ipad tratando de organizar una nueva agenda para la semana que venía, amaba eso de ella, lo ayudaba aunque no era su obligación.
Se le borró la sonrisa al alcanzar a ver como tenían muchas actividades por hacer junto a los demás chicos, recordó que Jimin no se sentía bien, Jin tenía dolores de espalda y los años lo estaban alcanzando aunque sin problemas podía seguir con su carrera.
—¿Y si nos separamos un tiempo?
Ella no dijo nada, solo estaba procesando lo que el había dicho, cambió su cara a preocupación. Se acomodó en el sofá para mirarlo mejor
—Solo siento que necesitamos un descanso, un descanso de estar juntos todo el tiempo, de poder hacer nuestras cosas separados, de descansar o hacer lo que queramos, pero...
—¿Pero?
—Army no merece esperarnos tanto tiempo— añadió con la voz entre cortada, se acercó a abrazarlo.
—Ey, ellos entenderán la decisión que ustedes tomen, saben lo cansado que puede ser y ustedes lo merecen sin duda alguna.
—No quiero que Army la pase mal, siento que nos necesitan y estamos decepcionado a todos— ahí fue en donde Namjoon empezó a quebrarse, ella lo abrazó y acarició su espalda.
—Todo estará bien, ¿si?— tomó su rostro para darle un beso en la punta de la nariz, el solo tenía los ojos y mejillas rojas— yo estaré ahí, de verdad que Army entenderá.
Namjoon trató de sonreír con el corazón hecho bolita, el solo quería que Army siempre tuviera música de ellos y que siempre sean felices pero era necesario un descanso.
✿ִ𝆬 Jin
Alzó una ceja al mirar el correo que había estado revisando varias semanas. "Ejército Militar", miró que tenían mucho más proyectos que habían dejado a medias, sentía angustia de ver a los chicos muy desanimados esta semana.
Ya no sentían esa pasión al hacer música juntos.
Se puso de pie y le sonrió a los demás mientras salía a la puerta, le hizo una seña a su amada y lo siguió.
—¿Esta todo bien?
—¿No has sentido que todos están desanimados? Algo no está funcionando entre nosotros.
