Hacia mucho no contemplaba un estruendo tan sonoro y relajante como el que produce el beso de las olas y la arena.
Y aceptarlo me da un poco de pena, me mostraba escéptico ya que prefería privarme de la razón con aquel amargo elixir que la vida me merma.
Tan serena y tranquila la luna se posa sobre mis labios, de todos los delirios, en el agua salada bebí los míos.
Tuve que aguantar las ganas de arrojarme y perderme en su misteriosa profundidad.
Sin importarme que me pudiera ahogar, pues sería ahora parte del mar.
Le echo un ojo al vacío y este me tienta, sus gélidas caricias me quieren enseñar la niebla.
¿Será este el momento de saltar?
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Mi lugar más triste.
PoetryLos sentimientos y experiencias más íntimos, el acercamiento lingüístico a lo real, entrego un poco de lo que soy, lo que siento y lo que he vivido, un espacio en donde me permito amar, llorar y hasta odiar. Bienvenidos a mi lugar más triste. Antolo...