El amor y la fama [#1]

20. ¿Es el final?

-Layla-

En la actualidad cuando se habla del mundo del modelaje la gente ya no solamente piensan en cara bonitas y cuerpos "perfectos", ahora también piensan en todo lo que hay detrás de esos cuerpos, detrás del todo el maquillaje y la ropa bonita que llevamos.

Desde que tengo uso de razón he estado en el ojo público de millones de personas, desde que tengo uso de razón he tenido a millones de personas detrás de mí diciéndome exactamente las cosas que debo o no hacer, desde que tengo uso de razón la gente me ha subestimado a mí y a todo el trabajo que he hecho para lograr llegar a donde estoy actualmente.

Recuerdo como en los primeros años de la industria la gente solía compararme descaradamente con mi madre y mi hermana mayor, y recuerdo también como cada noche me acostaba con lágrimas en mis ojos pensando en cómo alguien como yo podría llegar a tener un lugar importante en la industria.

"Ha logrado todo lo que tiene gracias a su familia" "Solamente es una cara bonita que tuvo suficiente suerte"

Vaya, no podría poner en palabras las millones de veces que he escuchado esas frases a lo largo de mi vida y para ser sincera aún no sé exactamente cómo reaccionar ante ellas, ya que en cierta manera es cierto. Sería demasiado hipócrita de mi parte salir ante los demás diciendo que mi apellido y mis contactos no me han dado una gran ventaja en la industria, pero al mismo tiempo estaría mintiendo si digo que yo no he tenido que aprender como sacarle todo el provecho posible a esa ventaja que tengo.

He trabajado duro para poder llegar a donde estoy y nadie me puede decir lo contrario.

—¿Qué opinas? —Me pregunta Elena con voz suave, sacándome de la pequeña ensoñación que suelo tener minutos antes de cualquier presentación importante. —Coloqué un poco más de brillo es tus ojos para que estos resalten mucho más con la luz de la pasarela.

Me hago un poco hacia adelante, emocionada de por fin poder observar el maquillaje en el cual Elena ha estado trabajando arduamente.

Al ver mi reflejo en el espejo noto completamente deslumbrada como ella logró resaltar a la perfección mis ojos verdes, a los cuales le estoy empezando a agarrar un poco más de cariño cada día que Ezra me recuerda lo hermosos que son.

—¡Está perfecto! —Exclamo con una gran sonrisa antes de ir hacia ella para tomarla entre brazos y abrazarla. —Realmente adoro por completo como siempre logras hacer maravillas con mi rostro.

—¡Qué va! El maquillaje ayuda a hacer unas pequeñas cositas, pero tampoco hace maravillas, Layla. —Comenta, separándose levemente de mí para que nuestros ojos se encuentren. —Tú ya eres hermosa sin o con maquillaje.

Estoy a punto de agradecerle por sus palabras, cuando una chica me toma del brazo y comienza a llevarme a jaladas por todo el lugar hasta llegar al vestidor, en el cual tres chicas más se unen a ella y comienzan a entregarme el vestuario que estaría desfilando al público en unos cuentos minutos.

Mientras intento cerrar el cierre de la falda a mi espalda siento unas cuantas miradas sobre mí, expectantes a ver algo que no sé qué es.

—¿Algún problema? —Pregunto en voz baja a una chica pelirroja que lleva en sus manos las botas que debo de ponerme. Ella al escuchar mi voz simplemente niega con la cabeza, pero yo puedo notar como comparte una pequeña mirada con otra de las chicas que la acompañan. —¿Están seguras?

Creo que la pelirroja va a volver a negar con su cabeza, pero no puedo estar segura por completo, ya que en ese intente veo como una chica con una coleta castaña alta empieza a caminar hacia mí, dejando que su tacón marque el paso a donde va.