Capítulo 18: ...fue una maldición...

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Con ayuda de mi abuelo, llegué al árbol que use para llegar a este lugar y nos fuimos por allí, así que una vez que estuve en casa, fui a ducharme para cambiar mi ropa cubierta de sangre, nunca había tomado una ducha mientras todo mi cuerpo tiembla por temor, pero al menos el agua tibia sobre mi piel me fue calmando poco a poco.

Ya estando lista, me arregle y sequé mi cabello velozmente para bajar e intentar comunicarme con el ángel lo antes posible, necesito hacer eso antes de que mi familia termine de recorrer el mundo dando la noticia sobre la traición de algunos guardianes.

Cuando llegue al primer piso, vi como mi hermana alejaba a mi madre de ella, así que me acerque para saber que sucede.

-No me puedes tocar, estuve en contacto con la sangre de Blanca y ahora soy tóxica para ustedes -dijo Luna sorprendiéndome.

-¿Cómo que eres tóxica para ellos? ¿Hay algo que no esté en mi conocimiento? -pregunté cruzándome de brazos.

Luna se vio en la obligación de terminar de contarme lo que Alk y mi abuela no pudieron decirme. La maldición que tengo la puedo pasar hacia el resto de los Scut, siempre y cuando ellos estén en contacto con mi sangre, como Luna, aunque eso no es todo, los seres sobrenaturales no nos pueden tocar porque ahora nuestra piel es sumamente caliente cerca de la de ellos, es por eso que los únicos que podrían tocarnos, son los humanos, si algún ser sobrenatural decide tocarnos, puede correr el riesgo de quemarse vivo.

Puse en riesgo a toda mi familia, sobre todo a mi hermana y no lo supe, ahora ella puede morir por mi culpa. Todo esto es mi culpa.

-No, Blanca, no pienses que es tu culpa, nadie pensó que te podrían maldecir así, calma -dijo Erik acercándose hacía mí intentando darme un abrazo, pero me aleje velozmente.

-Lo siento tanto, Luna -dije entre lágrimas y deseo abrazarla, mi corazón pide a gritos un abrazo y no lo podré recibir, ni ella podrá recibir uno, solo por mí culpa.

Me dejé caer al piso, presa de la desesperación, quería gritar, deseo romper todo lo que está a mi paso y así pasó, sin poder controlar lo que sucedía, las cosas a mi alrededor comenzaron a temblar y se rompieron, los muebles cayeron y escuche como los vidrios se rompían cada vez que sollozaba.

Por fin, después de tanto tiempo, el miedo que acumule tras pelear con múltiples monstruos o mitendas, ese miedo, cayó sobre con todo el peso que no creía que tuviera. Los recuerdos de esas cosas intentaron atacar a mi familia y a mí, se sintieron como un balde de agua fría.

Coloque mis manos en mi cabeza para jalar mi cabello en un intento de detener esos recuerdos usando el dolor pero no se detuvo, solo conseguí llorar más. Todo fue mi culpa desde un principio, eso es lo único que pensé, repetí una y otra vez en mi mente que esto era mi culpa.

-Lo siento -escuché la voz de Erick seguido de un golpe que sentí fuertemente en la parte trasera de mi cabeza y todo se volvió oscuro.

***

Me desperté en mi habitación y comprendí el porque desperté allí cuando al sentarme sentí una punzada en mi cabeza y al tocarla con mi mano, descubrí que está rodeada por vendas.

-¡Erick! -grité enojada e intenté levantarme de mi cama, pero caí velozmente al piso. Mis piernas no lograron sostener mi peso.

Mi abuelo fue el que tuvo que ayudarme a levantarme, ya que es el único humano en esta casa, no tuvo más opción que ayudarme incluso a bajar la escalera, algo que nos costó mucho más de lo esperado, porque si, peso bastante y mi pobre abuelo no sabía muy bien como ayudarme.

-Lamento no poder sanar eso, no puedo hacerlo sin poner mi vida en riesgo, de hacerlo no podré ayudarte como deseas -dijo Esteban observándome mientras hacía una mueca.

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⏰ Última actualización: Dec 27, 2022 ⏰

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