Cuando las historias se hacen reales.

Capítulo 5: Alk Scut.

Es Alk, acabo de ser salvada por el famoso Alk Scut. Es sorprendente, se parece...demasiado a mí, solo que él es más alto (insisto, parece que todos son más altos que yo en esta historia). Tiene el mismo color de cabello que tengo yo, sus ojos ¡son como los míos! Su color de piel, es igual a la mía ¡Es una Blanca versión hombre!

-¿Blanca? – dijo alguien detrás de mí y me gire encontrándome con Annie, pero está sucia y su ropa está rasgada – Blanca – esta vez me abrazó y se puso a llorar en mi hombro.

¿Qué sucedió mientras estaba en ese lugar? ¿Cuánto tiempo pasó?

-Dalka, los niños, yo... - me miró apenada – casi perdimos a uno de no ser por Erik.

-Tranquila, no lucharan más solos – dije y le sonreí – estoy aquí y traje a alguien conmigo.

Deje que Annie mirara a Alk y ella me miró alzando una ceja. Increíble, incluso teniendo sus ojos rojos por las lágrimas, se sigue viendo furiosa, como si fuera  golpearme.

-¡Blanca, esa bruja hija de su madre, casi me hace puré y tú sabes que no me gusta el puré, mientras tú te fuiste a hacer un clon! – dijo Annie cruzándose de brazos – y más encima lo hiciste más alto que tú. Amiga, es tiempo de resignarse, ninguna de las dos crecerá más, no quisimos dormir temprano, no quisimos tomar leche, ahora pagamos las consecuencias ¡Supéralo!

-Señorita, lo siento, se ve gravemente equivocada, soy Alk, puede que me parezca a Blanca, pero no soy su gemelo, si es lo que usted quería decir – dijo Alk dejando con la boca abierta a Annie – supongo que podrías contarme que sucedió en este lugar luego de la desaparición de Blanca.

-Sí, claro, lo siento – dijo Annie parpadeando varias veces – bueno, cuando Blanca se fue, Derek llegó corriendo a las habitaciones contando que se la habían llevado y que debíamos estar alerta. Todos nos levantamos y nos juntamos aquí, en el living, dejamos a los niños pequeños detrás de nosotros en un intento de cuidarles, pensábamos que tendríamos más oportunidades de que nada nos pasara, por el hechizo que hicieron los chicos, pero entró una extraña niebla y se escuchó la risa de una mujer, era muy extraña, seguido de eso, la puerta se abrió y entraron demonios con forma de animal, sombras y muchas cosas más.

<<Entre los que entraron, estaba el Chonchón que intentó llevarse a un niño, pero no lo consiguió gracias a los brazaletes. Desde ese momentos nos mantuvimos luchando e intentando mantener a los pequeños a salvo, pero uno de ellos, se sacó el brazalete, no sé cómo lo consiguió, pero se lo sacó y fue arrastrado por lo que los chicos llamaron un "lobo infernal", Erik evitó que el niño fuera llevado al infierno lanzando cuchillas de plata que se encajaron en todo el demonio, pero el pequeño está muy mal herido.

<<En estos días no hemos dormido tratando de que no nos dañen, han jugado con nuestras mentes y no pierden oportunidad alguna para torturarnos.

-Llévame con el niño – dijo Alk y Annie nos guió a una de las habitaciones donde había un pequeño, esta muy pálido y se ve muy débil acostado en esa cama– lo revisare – sacó las sabanas y lo que vi me hizo llevar una mano a mi boca por la sorpresa y la pena que me dio al ver al niño así.

No es solo una mordida, eso tampoco son simples rasguños, su pierna esta llena de mordiscos, pobre pequeño, él podría perder su pierna.

-Bien, Blanca, sujeta las manos del niño – ordenó Alk y sin pensarlo mucho le obedecí –. Amigo, estarás como nuevo.

Alk cerró sus ojos y mis manos empezaron a brillar, al igual que las de él que están sobre la pierna del niño. Me sentía extraña, sentí un leve dolor, luego sentí como si un gran peso cayera sobre mí para irse dejándome sumamente en paz. Alk abrió los ojos y la pierna del pequeño estaba totalmente sanada.